Mauricio Macri visitará Olivos para reencontrarse con Javier Milei, en medio del escándalo que atraviesa la administración libertaria por las vinculaciones de José Luis Espert con el narcotráfico y el pedido del FMI para que el oficialismo construya mayor gobernabilidad para continuar con sus medidas de ajuste.
Javier Milei y Mauricio Macri volverán a encontrarse este viernes por la tarde en la Quinta de Olivos, en un nuevo capítulo del acercamiento entre ambos líderes que comenzó hace unos días. El encuentro se produce en el momento más delicado de la gestión libertaria, atravesada por múltiples frentes de conflicto que ponen en jaque su capacidad de gobernar.
La administración de Milei enfrenta una crisis cambiaria que se agudiza día a día, mientras continúa el escándalo que sacude a La Libertad Avanza por las vinculaciones de José Luis Espert, diputado y principal candidato del oficialismo en la provincia de Buenos Aires, con Fred Machado, un empresario procesado en Estados Unidos por narcotráfico.
En el PRO, la perplejidad ante el manejo gubernamental del escándalo es evidente. “Es como ver un choque de trenes en cámara lenta“, graficaba un integrante del partido amarillo, aunque las autoridades macristas se apuraron a negar que estén considerando el ingreso de sus dirigentes al gabinete nacional en medio de esta emergencia política.
Al igual que en el encuentro del domingo pasado, de esta nueva cumbre participará también el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, quien mantiene una buena relación con el referente del PRO y ha funcionado como principal nexo para que ambos líderes retomaran el diálogo tras más de un año sin contacto directo.
Javier Milei y el desafío de la gobernabilidad
El encuentro responde fundamentalmente a los reclamos del Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Casa Blanca para que el gobierno argentino construya mayor gobernabilidad.
Julie Kozack, vocera del FMI, fue explícita durante su última conferencia de prensa en Washington: “Con respecto al programa en curso, también seguimos enfatizando la necesidad de generar un amplio apoyo político para asegurar la implementación de la ambiciosa agenda de reformas de las autoridades y fortalecer la confianza”.
Es que Milei viene de sufrir varias derrotas legislativas consecutivas. Este jueves el Senado rechazó los dos vetos presidenciales a las leyes que declaran la emergencia pediátrica y que mejoran y blindan los presupuestos de universidades públicas. Ambas normas recuperaron vigencia, dejando al Ejecutivo en una posición de debilidad frente al Congreso.
Cabe recordar que en el caso de la emergencia en discapacidad, donde el Congreso también insistió, el gobierno decidió promulgarla pero no reglamentarla hasta que los legisladores especifiquen de dónde se sacarán los fondos para su financiación, en lo que a todas luces representa una medida dilatoria.
La administración Trump también se sumó al pedido de fortalecimiento político tras anunciar una ayuda financiera para Argentina. De hecho, una comitiva encabezada por el ministro de Economía, Luis Caputo, partió este viernes rumbo a Estados Unidos para reunirse con el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent.
La confianza en la continuidad del modelo económico libertario comienza a flaquear, y en la Casa Rosada son conscientes de que sin gobernabilidad el camino será cada vez más sinuoso.
El propio Milei lo reconoció al referirse a las dificultades que atraviesa como “pirotecnia electoral”, un término que busca minimizar la gravedad de la situación pero que evidencia la presión que siente el gobierno.
Además, el libeertario se encuentra además ante la necesidad de renovar su gabinete después de las elecciones legislativas del 26 de octubre. Varios miembros clave de su equipo son candidatos y, en caso de resultar electos, dejarán sus cargos ministeriales para asumir sus bancas en diciembre.
El Presidente ya anticipó los cambios: “Va a haber recambios porque Luis Petri va a ganar en la provincia de Mendoza, y lo va a hacer con amplitud, y Patricia Bullrich va a hacer lo mismo en la ciudad de Buenos Aires”. Se trata de los titulares de los ministerios de Defensa y Seguridad respectivamente.
También el vocero presidencial Manuel Adorni tiene asegurado su lugar en la Legislatura porteña, sumándose a la lista de salidas confirmadas. Ante este escenario, Milei explicó que deberá “recalibrar el Gabinete para que mantenga el equilibrio“, ya que actualmente “es muy compacto y todos trabajan muy bien juntos”.
El desafío para el Presidente será “crear otro equipo que tenga esta compacidad”, algo que en el contexto actual de debilidad política se presenta como una tarea compleja. La pregunta que sobrevuela la Casa Rosada es quiénes ocuparán esos lugares estratégicos y si habrá apertura hacia otros espacios políticos, principalmente el PRO.
Espert confesó que recibió dinero de Fred Machado y ahora asegura que “puedo haber pecado ingenuo”
Macri vuelve a Olivos en el peor momento de Milei
En este contexto crítico, Macri vuelve a desembarcar en Olivos apenas cinco días después de su primer encuentro con Milei en más de un año, en medio de versiones sobre la posibilidad de que el líder del PRO busque aprovechar este momento de fragilidad para colocar dirigentes propios en la administración nacional.
Nombres como Guillermo Montenegro, intendente de Mar del Plata y senador provincial electo, y Diego Santilli, diputado nacional, circulan como posibles incorporaciones a la estructura libertaria. Ambos fueron promotores de la alianza entre el PRO y La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires.
Sin embargo, desde el entorno del expresidente hay cautela. “No sabemos de dónde salió que pedimos reforzar el gabinete, pero no salió de nosotros“, señalaron fuentes cercanas a Macri. Un dirigente del PRO que trabaja en el comando de campaña bonaerense fue más contundente: “No hay nada de nada, no hubo llamado, conversación y nadie nos dijo nada“.
La actitud choca con la situación que se corroboró tras el apoyo del PRO a Milei antes del balotaje presidencial. Al llegar a Casa Rosada, el líder libertario nombró a María Tettamanti, una técnica ligada al expresidente, como secretaria de Energía.
Más tarde, en agosto, designó por decreto a Carlos María Frugoni al frente de la Agencia de Control de Concesiones y Servicios Públicos de Transporte, quien había sido presidente de AUSA durante la gestión de Macri. También desembarcó Patricia Bullrich en Seguridad, aunque luego se alejó del líder del PRO.
Sobre el encuentro del domingo pasado, que se extendió por tres horas, Macri escribió en su cuenta de X: “El domingo tuvimos una larga reunión con el presidente Milei y Guillermo Francos en la Quinta de Olivos. Es bueno haber retomado el diálogo después de más un año, siempre con la misma vocación”.
“Decirle la verdad al presidente sobre lo que pienso de la situación del país y encontrar las oportunidades para trabajar para que la Argentina salga adelante“, completó.
En aquella charla, el expresidente advirtió que las derrotas legislativas de La Libertad Avanza se deben a la falta de diálogo con el resto de los sectores políticos. Subrayó la necesidad de construir mayor gobernabilidad, coincidiendo con las advertencias de la administración Trump. Según trascendió, en ese encuentro no se habló de cargos.
“Después de todas las cosas impresionantes que pasaron en Estados Unidos”, dijo por su parte Milei en referencia al apoyo de Donald Trump, “cuando todo era algarabía, yo le escribí a Mauricio Macri y le di las gracias por las declaraciones generosas que había tenido en las últimas semanas”.
En declaraciones radiales, Milei fue elogioso con el expresidente: “Macri es una persona que tiene mucho para aportar. Y ahora, próximamente, nos volveremos a reunir. Yo tengo una excelente relación. A veces las relaciones se enfrían, pero ahora estamos coordinando una nueva reunión”.
Agregó sobre el domingo: “Tuvimos una charla muy interesante. La próxima charla es con agenda. Macri es parte de la solución. Y hay un conjunto importante de gobernadores que también son parte de la solución. No hay que dejarse engañar por la pirotecnia electoral. Macri tiene mucha generosidad. Al igual que la doctora Bullrich”.
Cabe recordar que luego de imponerse en las elecciones porteñas, apenas unos meses atrás, Milei aseguraba que “Macri debería entender que su momento ya pasó“. Aparentemente, ya no piensa lo mismo.

