A un mes y medio de las elecciones generales, en el búnker de Unión por la Patria (UP) ajustan una campaña electoral “segmentada” para asegurar el crecimiento de Sergio Massa y la entrada en la segunda vuelta. En paralelo a la búsqueda de construir una “nueva utopía“, el oficialismo además lanza guiños de “unidad” con sectores democráticos de la oposición en materia de políticas de Estado.
En el oficialismo miran con detalles todos los análisis y encuestas que van llegando. Los sondeos señalan en coro un escenario que aparece como el más probable: Juntos por el Cambio (y principalmente Patricia Bullrich) se “desinflan” al tiempo que parece haber un crecimiento parejo tanto de Javier Milei como de Massa de cara a octubre.
En el comando de la calle Mitre consideran que esta etapa de la campaña “tiene que ser quirúrgica“, es decir, segmentada sector por sector. En ese sentido, apuntan al 36% del votante que acompañó a Horacio Rodríguez Larreta en las PASO que podría apoyar al ministro de Economía en las generales, a un fragmento del casi millón de votos que sacó Juan Schiaretti, y a un 4% de “votante blando” de Milei, que podría variar su voto en octubre.
En esa línea, la estrategia del oficialismo es desmentir una por una las propuestas del libertario, pero no bajo las críticas personales o con consignas como “te quieren sacar tus derechos“, sino señalando cómo esas políticas afectarían en el día a día de cualquier ciudadano y trabajador.
Los peligros que significarían la venta de órganos, la libre portación de armas, la quita de subsidios del transporte o la privatización de la salud y la educación pública; como así también la eliminación de la coparticipación federal o la privatización de entes públicos como el Conicet.
También hablan de enfocarse en temas como seguridad, economía e institucionalidad y transparencia, todos ejes que, según el comando de campaña, atraen al electorado opositor. En esa línea, puntualizan que no es momento de que aparezca la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner –u otras figuras centrales del kirchnerismo como el diputado Máximo Kirchner– porque el objetivo de esta etapa “es buscar votos afuera, no adentro”.
En ese sentido, resuenan las palabras del gobernador bonaerense Axel Kicillof, quien días atrás señaló que:
“Hay que componer una nueva canción. Hay que dejar de vivir de Perón, Evita, Néstor y Cristina; (ellos) son los momentos más gloriosos de nuestro país, (pero) hay que darle un carácter de época nuevo”.
En una “mateada” junto a Juan Grabois, Kicillof pidió “construir una nueva utopía”. “No vamos a entusiasmar solo con un discurso y una propuesta nostálgica“, advirtió.
El mensaje del gobernador forma parte de una estrategia consensuada entre Massa y la propia Cristina Kirchner para que el ministro-candidato ocupe toda la centralidad política y electoral.
Lejos de significar un alejamiento del kirchnerismo, la estrategia es enfocar el discurso en las propuesta a futuro, y no tanto en el recuerdo del pasado, sin que eso signifique bajar las banderas de los logros de los 12 años de gobierno de Néstor Kirchner y CFK.
De hecho, la vicepresidenta se reúne asiduamente con Massa, y Máximo Kirchner ocupa una oficina permanente en el búnker de campaña de UP. Pero todos en el oficialismo concuerdan en la necesidad de ir a buscar votos y apoyos por afuera.
En ese sentido, el ministro-candidato pone el foco en los distritos bonaerenses y provincias del interior donde se registró un corte de boleta por encima del promedio habitual. Los intendentes, gobernadores y referentes del peronismo territorial prometen que revertirán la situación.
En ese sentido, Massa viajará el viernes a Tucumán, donde se quedará hasta el sábado y se reunirá con gobernadores y la CGT. Hasta el momento, participarían del encuentro, además de Osvaldo Jaldo y Juan Manzur, el gobernador de Catamarca, Raúl Jalil, el de La Rioja, Ricardo Quintela, el de Formosa, Gildo Insfrán y el de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, entre otros.
Los acuerdos con Manes y los guiños al radicalismo
En sintonía con mostrar una mayor apertura política y con la convocatoria a un “gobierno de unidad nacional”, el oficialismo logró un importante punto de diálogo en el Congreso.
El Parlamento fue el escenario de una nueva interna en Juntos por el Cambio: el diputado Facundo Manes (UCR) y su colega Danya Tavella (Evolución radical) se diferenciaron del resto del interbloque opositor y dictaminaron con el Frente de Todos el Programa de Ciencia, Tecnología e Innovación 2030.
“Tenemos que terminar con las pavadas“, se molestó el neurólogo cuando supo que ni la UCR ni el PRO habían enviado a sus representantes a la comisión.
El neurólogo, que tenía a cargo el debate por presidir la comisión de Ciencia y Tecnología, no ocultó su fastidio cuando vio que las sillas reservadas para Juntos estaban vacías.
“Estamos haciendo lo que debe hacer una comisión: verse las caras, debatir, intentar ponerse de acuerdo y dictaminar sobre una política pública. En este caso, una política de Estado, que sea beneficiosa para toda la comunidad. No hay muchas vueltas: las especulaciones, las chicanas, las intrigas de palacio, en un momento, de una vez por todas, deben dejar paso a los objetivos mayores“, reclamó Manes.
Fue la tercera grieta de JxC en el Congreso en una semana. La primera sucedió el martes pasado, cuando la diputada Tavella, que responde al sector radical liderado por Martín Lousteau, aprobó junto a su compañero Emiliano Yacobitti los proyectos para crear universidades nacionales en Cañuelas y Saladillo.
La segunda fractura se dio el jueves pasado, en el Senado, donde la UCR firmó con el Frente de Todos un dictamen para regular los alquileres temporales, pese al rechazo del PRO.
Este miércoles, Manes y Tavella fueron las únicas figuras opositoras que participaron de la Comisión de Ciencia, Tecnología e Innovación, para tratar un proyecto diseñado en el Gobierno que define las políticas en esas áreas hasta 2030, con objetivos y agendas. En octubre fue aprobado en el Senado, con el respaldo de todas las fuerzas políticas.
“No puede ser que vociferemos de políticas a largo plazo en los canales de televisión, de consensos y que luego sea la conveniencia de nuestro sector la que prime“, los criticó. “Cuando se habla de ciencia y tecnología, dicen ‘este no es momento oportuno’, pero ¿cuándo lo es? Tenemos que terminar con las pavadas“.
Sin nombrarlo, Manes alertó sobre un crecimiento de Milei por la falta de consensos entre las otras fuerzas políticas.
“Tan mal está todo, que los disparates más grandes se dicen en todos lados. No inventemos una nueva fábula para caer en otra frustración. Estamos hablando a favor del progreso, de la equidad. La única manera de sostener el crecimiento en el tiempo, es invertir en ciencia“.
El debate por el cambio climático
Por otra parte, Massa volvió a enfrentarse con Milei respecto a la postura negacionista de este último sobre el calentamiento global.
“En plena campaña y en una discusión de valores que va a tener el desarrollo de la Argentina en los próximos años aparece quienes dicen que si un río termina siendo contaminado se paga porque tiene un precio, con la misma liviandad que dicen que se puede vender un pulmón. Para nosotros, un río y un pulmón no tienen precio porque tienen que ver con la vida“, dijo Massa al cierre del Encuentro sobre Economía Verde y Acción Climática realizada en el CCK.
“Esta es la agenda del país en el que soñamos que vivan nuestros hijos. Niegan aquellos que no tienen hijos y que de alguna manera le hablan a los perros tratándolos como hijos. Los que tenemos hijos y entendemos que merecen vivir en un lugar y un ambiente cuidado, donde tengan posibilidad y oportunidad de desarrollo, sentimos que tenemos una responsabilidad para que la agenda ambiental sean parte de las políticas públicas en serio a la hora de gobernar”, añadió Massa.
En ese marco, postuló que desde el oficialismo “no creemos en el ‘sálvese quién pueda‘. Creemos que el planeta, que es el lugar donde vivimos, lo tenemos que salvar entre todos para que todos podamos vivir un poco mejor“. Por ello, propuso que “somos una sociedad que cree en valores de convivencia y es muy importante plantearlo en este momento donde la agenda climática se va a transversalizar y la política va a estar obligada a opinar de estos temas”.
Las nuevas medidas
En tanto, el ministro de Economía puso en marcha nuevas medidas para proteger el consumo, la capacidad adquisitiva y el comercio internacional.
Este martes se confirmó que no habrá incrementos en las tarifas de luz y gas por lo menos hasta el mes de noviembre, para así evitar otro impacto en el bolsillo después de la devaluación post-PASO impuesta por el FMI. El congelamiento será exclusivamente para usuarios residenciales.
En tanto, este martes se conoció, a través del Boletín Oficial, la noticia de que el Gobierno implementó una nueva edición del programa dólar soja.
La medida presenta una diferencia en relación a sus ediciones anteriores, ya que no no propone un tipo de cambio diferencial fijo para productores. La misma buscará captar a “aquellos sujetos que hayan exportado en algún momento de los 18 meses inmediatos anteriores” con el objetivo de acumular reservas.
Por otra parte, el presidente del Banco Central (BCRA), Miguel Pesce, y el titular del Banco Central del Uruguay (BCU), Diego Labat, firmaron un acuerdo para ampliar las operaciones entre residentes de ambos países con moneda local, lo que permitirá hacer pagos de bienes y servicios con pesos uruguayos y argentinos. La medida busca descomprimir el uso del dólar blue por parte de uruguayos.
El mecanismo habilita a cursar pagos de operaciones de comercio de bienes y servicios (excepto los financieros) en monedas locales. El nuevo Reglamento Operativo del Sistema de Pagos en Moneda Local (SML), una ampliación del vigente hasta hoy, incluye el pago de servicios y la posibilidad de que tanto empresas como uruguayas facturen en las monedas de ambos países, lo que busca facilitar el comercio internacional.
