Luis Caputo recurrió al Fondo de Garantía del ANSES para intervenir en el mercado de cambios y frenar el dólar en medio de un creciente escepticismo del mercado y los especialistas, que también obligó al Ministro a recorrer los medios oficialistas para insistir en que no hay atraso cambiario.
Lo que comenzó como un día de furia del Presidente Javier Milei este lunes, continuó el martes con una nueva caída de los mercados y una nueva intervención del Ministro de Economía Luis Caputo para evitar que se dispare el precio del dólar, esta vez con dólares del fondo de los jubilados.
Para colmo, según una lista creciente de especialistas (que van desde la CELAG hasta Carlos Melconian) advierten que el programa del Gobierno Nacional no es sustentable a largo plazo e incluso pronostican que podría colapsar antes de fin de año.
En este contexto, Caputo debió hacer una nueva gira en los medios de comunicación oficialistas para intentar calmar las aguas y desmentir que esté en riesgo su lugar dentro del gabinete.
Caputo intenta calmar el mercado con fondos de los jubilados
En medio de una jornada marcada por la incertidumbre, Luis Caputo impulsó una nueva intervención en el mercado cambiario para evitar otra suba del dólar financiero. La estrategia oficial hasta el momento viene siendo alimentar a los mercados con tantos dólares como sea necesario.
Sin embargo, en el Palacio de Economía parecen estar agotando sus recursos, porque en esta oportunidad el Ministro recurrió al Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) de ANSES, en una intervención que se da poco después de que el organismo previsional quedara en manos de Fernando Bearzi.
Son cada vez más las voces que cuestionan el programa económico del Gobierno y la falta de definiciones sobre el tipo de cambio y la salida del cepo, y el nerviosismo entre los inversores comienza a notarse cada vez más.
Así, se percibe una mayor demanda de dólares por parte de quienes quieren bajarse del carry trade (o bicicleta financiera). Este martes se registró el segundo mayor monto de operaciones en lo que va del año, con una fuerte suba en los últimos minutos de operaciones.
Para enfrentar la situación, el lunes pasado el Banco Central (liderado por Santiago Bausili) había utilizado reservas del Banco Central, que fueron vendidas a través de las mesas de dinero del Banco Nación y del FGS.
Este martes las operaciones se volvieron aún más riesgosa, ya que Caputo recurrió directamente a los dólares del fondo de los jubilados para comprar títulos y frenar los dólares financieros. Así, adquirió bonos soberanos AL30 (Bonares, de legislación local) por primera vez en el año, y GD30 (Bonos Globales de legislación extranjera).
Los bonos AL30 se utilizan para comprar en pesos y vender en dólares. Las operaciones fueron por 375 millones de dólares, entre las clase C y D, el segundo mayor registro en lo que va del año, y se llevaron adelante en los últimos minutos de operaciones con la intención de desincentivar futuras operaciones.
Tras la intervención, el dólar MEP bajó un 0,3% y terminó la ronda en 1.180 pesos. Los bonos en dólares también presentaron caídas, aunque el dólar CCL mostró una suba del 0,5% (cerró en 1.189 pesos). Algo similar ocurrió con el blue, que terminó en 1.210 pesos.
En cualquier caso, se trata de un escenario complejo para un gobierno desesperado por conseguir “fondos frescos” por parte del FMI, que a su vez requiere una nueva devaluación que -por el momento- Milei no está dispuesto a conceder.
Pero es que incluso si llegaran los mentados 11 mil millones de dólares que el libertario desea utilizar para abrir el cepo cambiario, lo cierto es que solo en enero el stock de préstamos en moneda extranjera superó los 12 mil millones de dólares.

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Caen las acciones y los bonos, mientras sube el Riesgo País
Más allá de las intervenciones del Gobierno, lo cierto es que para el final del día los activos argentinos terminaron en números rojos y algo similar ocurrió con los bonos. En cuanto al Riesgo País, el indicador terminó una vez más por encima de los 700 puntos, cerrando en 710 unidades.
Sin ir más lejos, el S&P Merval anotó una nueva caída del 5,1% (medido en dólares CCL) y se encuentra en su peor nivel en tres meses. El panel líder de BYMA cedió 4,9% y las acciones que más cayeron fueron las de Grupo Supervielle (7,1%); banco BBVA (6,5%), Grupo Financiero Galicia (5,9%) y Banco Macro (4,2%).
En Wall Street los activos argentinos registraron caídas de hasta el 8,2%, lideradas por Grupo Supervielle (-8,2%), Telecom (-7,7), BBVA (-7,3%), Grupo Financiero Galicia (-7%), Edenor (-6,4%) y Banco Macro (-6,2%).
En el caso de los bonos, los títulos en moneda dura bajaron hasta un 2%. Así, cayeron el Bonar 2041 (2%), el Global 2046 (-1,7%), el Global 2041 (-1,7%), Bonar 2038 (-1,3%) y el Bonar 2029 (-1,1%).
Previamente, los analistas del PPI habían asegurado que “febrero inició marcadamente negativo para los papeles argentinos“. “La toma de ganancias parece haberse profundizado y, luego de un mes del último máximo (US$ 2.387 el 9 de enero), el Merval ya corrigió un 19%”, expresaban, “en la última semana, casi la totalidad de los ADRs acumularon pérdidas”.
Entre tanto, desde Outlier explicaron al inicio de la jornada que “los que más sorprenden son los bancos que incluso habían recibido una recomendación por parte del BofA, y que habían comenzado en verde, pero sólo uno pudo sostenerlo”.
“El lunes estuvo bastante claro que los factores que pesaron fueron más que nada locales, justamente porque el movimiento local fue bien a contramano de la región y el mundo. Y en realidad, esa parece ser la lógica hace ya varias ruedas“, advirtieron.
Cabe recordar que en los últimos días el presidente estadounidense Donald Trump anunció una seguidilla de aumentos de aranceles para productos extranjeros que alteraron el mercado. En su último anuncio, oficializó las nuevas tarifas para el acero y el aluminio, que impactarán de lleno en la industria argentina.
El CEO de Insider Finance, Pablo Lazati, opinó que para que cambie la tendencia del S&P Merval, el Gobierno deberá avanzar con una “reforma laboral, reforma tributaria y acuerdo con el FMI (mínimo de u$s17.000 millones)“, por lo que las perspectivas no parecen favorables para los trabajadores argentinos. Sin embargo, agregó:
“Si bien es cierto que un nuevo desembolso del Fondo traería calma y previsibilidad al menos por unos meses, lo cierto es que las dos reformas planteadas serían las únicas variantes propulsoras para que el mercado local vuelva a romper los máximos alcanzados. Por el momento, no vemos que esto suceda en el corto plazo más allá de que los tres temas ya están instalados en agenda y poco a poco van avanzando”.

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La gira de Caputo por los medios oficiales
En este contexto, Caputo tuvo que emprender una gira por los medios afines al gobierno para intentar calmar las aguas en el mercado y desmentir los rumores sobre su eventual renuncia. Se trata de una estrategia que repite cada vez que su gestión se ve cuestionada.
Durante la tarde del martes declaró a la prensa que el préstamo del Fondo “va a estar para el primer cuatrimestre” y remarcó que no representaría nueva deuda. “El acuerdo implica nueva plata y no nueva deuda”, explicó, y aseguró que “con eso, el Tesoro le va a recomprar deuda al Banco Central, se reemplaza como acreedor al sector público por el Fondo”.
En cuanto a los rumores sobre su salida, aseguró que “no vale la pena ni desmentirlo” y remarcó que “la relación mía con Javier es la mejor probablemente que algún ministro tuvo con algún presidente”.
Además, repitió la muletilla oficial de que “para nosotros el dólar no está atrasado“, algo que no evitó el escepticismo del mercado. Como si esto fuera poco, luego de visitar Radio Rivadavia, fue al streaming Carajo (conducido por el “Gordo Dan”, Daniel Parisini), en un intento de dar un mensaje positivo al núcleo duro de Milei.
Se trata de una nueva muestra de debilidad del Ministro, que además debió buscar el apoyo de la Unión Industrial Argentina (UIA) luego de haber dejado plantado al sector en noviembre, cuando envió a un funcionario de segunda línea a la conferencia anual del organismo.
Sobre los rumores, cabe recordar que cobraron fuerza a partir de la columna publicada por Milei durante el fin de semana, en la que negó que el FMI esté pidiendo una nueva devaluación y negó el atraso cambiario, y que además alimentó las versiones sobre la posible llegada de Federico Sturzenegger a la Jefatura de Gabinete.
Al inicio de la semana comenzó el día de furia del mandatario, que terminó con insultos a los economistas que cuestionan su programa de gobierno, dos funcionarios despedidos y una jornada negra para las acciones argentinas.

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Mientras tanto, Javier Milei…
Luego de su arrebato del lunes, el Presidente se mostró junto Yuyito González, Roberto Piazza y la pareja del diseñador, Walter Vázquez, en lo que a todas luces es un intento de lavado de cara del Presidente tras su homofóbico discurso en Davos, en el que relacionó la homosexualidad con la pedofilia.
Sin embargo, lo que más llamó la atención fue la galería que Milei armó en la residencia de Olivos con retratos de sí mismo, que van desde el narcisismo (con gigantografías de su aparición en la revista Time y The Economist) hasta lo bizarro (en uno de los cuadros aparece encarnando a Wolverine).
Aparentemente, el libertario recibió por parte de Vázquez un cuadro en el que se lo puede ver con su característica campera de cuero y la banda presidencial. En la galería también se puede ver una obra de Loreley Portas con un león como tema central.
La respuesta en redes sociales no se hizo esperar, y varios usuarios hablaron del narcisismo presidencial, al tiempo que advirtieron por el lugar del culto a la personalidad dentro del fascismo. Incluso Carlos Maslatón (otrora militante del libertario, comentó: “Todos los dictadores, o simulacros de dictadores, son iguales”.
Entre el ruido interno y los informes que pronostican lo peor
En cuanto al programa económico de Milei, cabe señalar que el Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG) publicó recientemente un informe en el que lo comparó con el modelo de la convertibilidad y dio un pronóstico preocupante.
Según los economistas Guillermo Oglietti y Alfredo Serrano Mancilla, si bien ambos modelos son similares, el libertario viene “quemando etapas” y su programa está “envejeciendo prematuramente”.
Es que, en apenas un año, ya presenta números similares a los de Domingo Cavallo a fines de la década del ’90, en la previa de su colapso hacia fines de 2001. Al hacer una comparación temporal, calcularon que la edad promedio del esquema de La Libertad Avanza sería equivalente a 6,8 años del plan de convertibilidad.
Es decir que los libertarios ya recorrieron el 62% de los 11 años que duró el plan de Cavallo. “A este ritmo, el esquema económico actual encontraría los límites que encontró la convertibilidad antes de que termine 2025“, indican, “el deterioro social va muy rápido, aunque el desempleo va más lento que el deterioro de los salarios”.
Puntualmente, indicaron que la participación de los trabajadores en el PBI se posicionó por debajo del 44%, algo que en los ’90 tardó 4 años antes de ocurrir. En cuanto al desplome de los salarios, indicaron que:
“Durante la Convertibilidad, el salario real no bajó del 6% respecto al año de inicio (1991), mientras que Milei lo redujo en un 6,8% en un solo año”.
Cabe señalar que el desempleó subió 1,2 puntos, por lo que también avanza a un ritmo más rápido. En su momento, las reservas internacionales tocaron su techo en 1998 (en 67 mil millones de dólares), mientras que:
“Durante el gobierno de Milei, la trayectoria también parece haber encontrado un techo en torno a los 30 mil millones de dólares que alcanzó en abril de 2024 (menos de la mitad que el valor actual que tendrían las reservas disponibles durante la Convertibilidad) y, a partir de entonces, declinó y solo pudo recuperarse gracias al blanqueo de capitales (aunque actualmente ha retrocedido hasta los 30 mil millones)”.
Una diferencia (aunque no es favorable para el libertario) es que la deuda pública aumentó a un ritmo mucho mayor con Milei, creciendo en un 16%. Tampoco dieron buenas noticias en cuanto al tipo de cambio:
“El tipo de cambio real –tan apreciado en la actualidad como la Convertibilidad al segundo año- es el factor común que comparten tanto el programa de Martínez de Hoz como la Convertibilidad y que explica el fracaso de estos dos programas”.
“Este Gobierno no tiene plan”
El ex titular del Banco Nación, Carlos Melconian, también se sumó a las críticas y dio un panorama desalentador. Para él, el gobierno no tiene plan económico y por ahora “está basado en soluciones a corto plazo que más tarde o temprano se pagarán caras”.
“Este gobierno mostró que, cuando tenés las papas calientes, se te frunce un poco el ojete“, comentó en diálogo con Urbana Play, y señaló que “Argentina está con un problema de control cambiario popularizado como cepo”.
“Lo mejor que ha ocurrido es que no te encontraste con ningún liberalote berreta en el camino que hubiera pedido liberar y explotar las cosas”, dijo, y observó que “da la impresión que tener el superávit en el fisco es el dato saliente. Tener superávit en el fisco no es una condición suficiente para hacer con el dólar lo que quiero”
“A Brasil se le escapó el tipo de cambio porque tiene el fisco deficiente”, comentó, “la macroeconomía tiene que tener equilibrio entre lo fiscal y lo cambiario, detrás de los esfuerzos de todos hay cinco vivos ineficientes que necesitan una devaluación“, explicó.
Además, opinó que “lo que hicieron con las reservas es ingenioso, pero se terminó”, y agregó: “Ese modelo que permitió el blanqueo y las ventas de empresas en dólares ya no está más. Ahora hay que ver cómo se va a financiar el déficit”.
“Este Gobierno no tiene plan”, dijo el economista, y más adelante remarcó que “la compra de dólares no resolverá el problema de las reservas si no hay un plan que le dé estabilidad al sistema financiero y cambiario. El modelo actual está basado en soluciones a corto plazo que más tarde o temprano se pagarán caras”, dijo.
“El milagro del blanqueo fue momentáneo. Las empresas que vendieron dólares, van a tener que comprarlos de nuevo para pagar sus créditos, y eso va a ser parte del futuro endeudamiento que arrastramos”, concluyó.