La oposición quiere destituir a Gonard, pero no logró que el peronismo acompañe el tratamiento sobre tablas

marite gonard

Tras meses de denuncias y polémicas sobre la gestión de Marité Gonard como presidenta del Concejo Deliberante de Bahía Blanca, el concejal libertario Mauro Reyes propuso crear una comisión investigadora para indagar en su conducta y eventualmente destituirla.

Sin embargo, el proyecto no consiguió los dos tercios de los votos necesarios para ser tratado de inmediato sobre tablas, por lo que pasará a la comisión de Asuntos Legales, donde se analizará si reúne el respaldo necesario para abordarse en la última sesión ordinaria del año, dentro de dos semanas.

La moción para el tratamiento urgente recibió 12 votos, incluidos los de Vanina Linzuain (compañera de banca de Reyes), concejales de Juntos, Carlos Alonso (LLA) y Martín Barrionuevo (Avanza Libertad), pero no alcanzó los 16 necesarios, ya que Unión por la Patria decidió no acompañar el pedido de tratamiento directo.

Además, al inicio de la sesión, una moción de privilegio de Mauro Reyes obligó a la presidenta del HCD a acatar la anulación del pase de los concejales escindidos al bloque de LLA, y la designación de Valeria Rodríguez como presidenta del bloque. Posteriormente, en cuarto intermedio, se quitó el logo de LLA de las bancas de los ediles escindidos para reflejar esta situación.

Llamativamente, el concejal escindido de Juntos Marcos Streitenberger, nuevmente estuvo ausente presuntamente por no estar de acuerdo con esta maniobra. Su reemplazante, Silvina Cabirón, no fue notificada y la banca quedó vacía.

Gonard en la mira

De prosperar la iniciativa, podría derivar en el desplazamiento de Gonard de la presidencia del Concejo, cargo que ocupa desde fines del año pasado y que entonces generó la división del neonato bloque de La Libertad Avanza en el deliberativo: la propia Gonard quedó en el bloque “oficial” junto con Carlos Alonso como jefe de bloque, mientras que Reyes y Vanina Linzuain intentaron conformar otro bloque libertario, status que la presidenta Gonard les negó.

Con el correr de los meses, también Alonso se alejó de Gonard por lo que describió como manejos “personalistas” y la presidenta del deliberativo fue noticia recurrentemente por una serie de irregulariades y escándalos que incluyen, entre otros, el desconocimiento del reglamento, la admisión de que firma documentos sin leerlo, por estacionar de manera indebida frente al edificio del Concejo, por el manejo discrecional de la pauta pública para crear una plataforma digital de operaciones políticas, maltratos a trabajadores del deliberativo incluyendo a un trabajador de prensa que fue expuesto ante los trolls mileístas por la compra de un celular que ella misma aprobó.

Más cerca en el tiempo violentó la composición del bloque que comparte con Carlos Alonso al sumar en un twitt a tres concejales escindidos de sus bloques: Silvina Rubio y Marcos Streitenberger de Juntos y Valeria Rodríguez, vicepresidenta del HCD, y ex Avanza Libertad. Con esta nueva composición desplazaron a Alonso de la titularidad del bloque y hasta ingresaron en su despacho, lo que devino en una denuncia penal.

Luego, en la anterior sesión, una moción de privilegio propuesta por Alonso, que fue acompañada por 20 de los 24 ediles, anuló el pase de los tres concejales escindidos y lo restituyó en la Presidencia. No obstante, la edil Rodríguez (aliada cercana de Gonard) confirmó en una entrevista exclusiva con Juan Ignacio Guarino que no acatarían la cuestión aprobada por esta mayoría especial, a la que tildó de “vacía”.

Los fundamentos del proyecto de Reyes, aduce que Gonard no respeta el reglamento interno del Concejo y se cuestiona el posible pago de salarios indebidos, como el de una recientemente nombrada secretaria del bloque que no estaría en condiciones de ejercer el cargo, justamente porque el Concejo Deliberante no reconoce el agrupamiento de Gonard, Rubio, Streitenberger y Rodríguez como un bloque político legítimo.

También se menciona un pedido de plus salarial “al menos debatible” para la propia Gonard por antigüedad, y la contratación de una fotógrafa cuyos servicios diferentes ediles desconocen. Cabe recordar que además, el escándalo por la compra del celular (ver arriba) era justamente para suplir esta función.

Por otra parte, la propia Gonard se defendió manifestando que se trata de un embate de “la casta” luego de proponer la baja de dietas, omitiendo mencionar su pedido para aumentarse su salario de manera irregular en unos 4 millones de pesos por año, a valores actuales.

Otra vulneración a un bloque

Sobre el inicio de la sesión quien también tomó la palabra para realizar una moción de privilegio fue Martín Barrionuevo, para exigir que la presidenta de curso al alta a la secretaria política de su bloque.

Cabe destacar que se trata de un problema de larga data, en tanto Gonard mantenía a la anterior secretaria, Cristina Soto, pese a que se había pedido su baja. Soto es cercana a Valeria Rodríguez, que ya no forma parte del bloque de Avanza Libertad que Barrionuevo preside.

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