Mauricio Macri encabezó una reunión con candidatos del PRO de distintas provincias y la intención de que el partido se muestre como opositor tras las Elecciones Nacionales 2025, aunque se enfrenta a otro problema: Las diferencias internas amenazan con provocar nuevas fracturas.
Mauricio Macri convocó este martes a los candidatos del PRO de todo el país para definir el rumbo político posterior a las elecciones del 26 de octubre. En una reunión celebrada en la sede nacional del partido en San Telmo, el expresidente expresó que el partido debería mostrarse como oposición al gobierno de Javier Milei tras los comicios.
“Después de octubre, vamos a ser la mejor oposición posible, pero oposición” fue la frase que atribuyó el portal LetraP al expresidente y titular del espacio a nivel nacional, y que parece dirigida a Diego Santilli y Cristian Ritondo (principales impulsores del acuerdo electoral entre La Libertad Avanza y el PRO).
El cónclave reunió a candidatos de 13 provincias, incluyendo a Fernando de Andreis y Antonela Giampieri por la Ciudad de Buenos Aires, Diego Santilli, María Florencia de Sensi y Javier Sánchez Wrba por la provincia de Buenos Aires, Carlos Hernández por Corrientes, y Facundo Pérez Carletti por Santiago del Estero, entre otros.
Vale mencionar que estuvo ausente Gisela Scaglia, vicegobernadora de Santa Fe y candidata por Provincias Unidas, quien no participó del encuentro ni siquiera de manera virtual, aduciendo razones de agenda.
Aunque Santilli y Ritondo asistieron a la reunión, ambos dirigentes (que parecen estar más cerca de la tropa libertaria que de la amarilla) no aparecieron en las tres fotos institucionales que el PRO difundió posteriormente en sus redes sociales. En cambio, las imágenes mostraron a Macri flanqueado por Pérez Carletti y Hernández.
Tenemos candidatos en todo el país que combinan juventud, energía y experiencia en gestión.
Llevamos a cada rincón de la Argentina una propuesta seria, de cambio y de futuro porque ese es el camino para salir adelante. pic.twitter.com/KK7UY8U3Sx
— PRO (@proargentina) September 23, 2025
Mauricio Macri, Javier Milei y las Elecciones 2025
Durante el encuentro, Macri escuchó el panorama que cada figura trazó sobre su distrito, abordando la situación económica, política y social junto con los números de las encuestas. Santilli no dejó un pronóstico optimista sobre la provincia de Buenos Aires.
El diputado abrió las puertas a la posibilidad de un nuevo triunfo de Fuerza Patria y observó que la boleta de La Libertad Avanza está “clavada” en 34 puntos, el mismo resultado obtenido en las elecciones provinciales del 7 de septiembre.
Santilli (junto a Ritondo), fueron los artífices del acuerdo con los libertarios para las Elecciones Bonaerenses 2025, para las que el PRO debió renunciar a sus colores y marcas partidarias en la boleta, y ceder parte del control de los armados a Karina Milei y sus armadores. Pese a esto, la alianza sufrió una contundente derrota.
“Es un desafío”, declaró el diputado al salir de la reunión de cara a los comicios nacionales, oscilando entre posicionarse como opositor aliado o directamente como oficialista. Posteriormente remarcó que el PRO está “apoyando y acompañando al Gobierno” desde las elecciones generales de 2023 y concluyó: “Estoy convencido de que vamos a ganar el país“.
Por su parte, Macri confirmó que su relación con el presidente Javier Milei permanece congelada: “Hace más de un año que no hablamos”, reveló. El último encuentro entre ambos líderes se produjo en la Quinta de Olivos a finales de agosto del año pasado. Desde entonces, el PRO fluctuó en su relación con La Libertad Avanza.
El partido se dividió en las votaciones del Congreso, cerró acuerdos en algunos distritos y marcó independencia en otros. Mientras tanto, Karina Milei avanzó en el armado nacional de La Libertad Avanza y postergó un acuerdo integral con Macri, apostando a quedarse con el electorado macrista sin necesidad de integrar al expresidente.
Pese a esto, Macri mantuvo un tono conciliador hacia el gobierno nacional: “Estamos en un momento en que hay que ser muy prudentes, muy respetuosos“. “El Gobierno está enfrentando un desafío cambiario económico, creo que tiene un equipo con gente que entiende cómo sortear esta dificultad” agregó.
!Tenemos que aportar tranquilidad. Nunca aposté en que cuanto peor mejor“, expresó, al tiempo que destacó el respaldo del gobierno de Donald Trump a Milei: “El apoyo que le ha dado el gobierno americano ayer ha sido muy impresionante, es una tranquilidad para poder trabajar y empezar una nueva etapa”.
A río revuelto, ganancia de gobernadores
La reunión del PRO tuvo lugar en medio de versiones sobre un posible acercamiento entre Macri y Juan Schiaretti, exgobernador de Córdoba y referente de Provincias Unidas. Sin embargo, fuentes del cordobesismo niegan categóricamente cualquier tipo de alianza: “No hablan. Está todo bien entre ellos, pero están en proyectos distintos”.
El armado de Provincias Unidas parece más interesado en seducir a los macristas del interior que en alcanzar un acuerdo con el PRO como partido. La estrategia apunta a capitalizar las fracturas internas del espacio amarillo y sumar dirigentes descontentos con la conducción de Macri.
“El capital político más importante de este espacio son los gobernadores”, señalan desde el schiarettismo, marcando un recambio generacional en los liderazgos argentinos. La apuesta está puesta en que Martín Llaryora, Maximiliano Pullaro, Gustavo Valdés, Ignacio Torres, Carlos Sadir y Claudio Vidal logren ganarle a La Libertad Avanza en sus respectivos distritos.
El desparramamiento del PRO en la zona núcleo favorece la estrategia de Provincias Unidas. En Córdoba, la fagocitación del espacio amarillo comenzó en mayo de 2023, cuando Llaryora entregó cargos clave a quienes fueran presidentes del PRO local: Darío Capitani maneja la Agencia Córdoba Turismo y Javier Pretto se convirtió en viceintendente de la capital.
Provincias Unidas también apunta a sumar a nuevos arrepentidos de los pactos con Milei. Las fichas están puestas en Rogelio Frigerio, gobernador amarillo de Entre Ríos, y Alfredo Cornejo, su par radical de Mendoza.
En Santa Fe, la estrategia se materializa con figuras como Gisela Scaglia, quien migró hacia la construcción federal. Operadores locales consideran que Macri resta más de lo que suma para la estrategia de los gobernadores y Scaglia parece seguir esa línea.
Las fracturas del PRO se evidencian también en Córdoba. A la reunión de Macri no fueron invitados los tres diputados de la provincia que buscan retener sus bancas sin su padrinazgo. Laura Rodríguez Machado, alfil de Patricia Bullrich, está ubicada en el cuarto renglón de la boleta de La Libertad Avanza que encabeza Gonzalo Roca.
Oscar Agost Carreño, presidente del PRO local pero alejado de la conducción del expresidente, lidera la boleta del sello amarillo; mientras que Héctor Baldassi juega con Ciudadanos, un sello vinculado al cordobesismo.
Con los resultados de octubre sobre la mesa, Macri definirá qué harán los dirigentes de su partido que ocupen bancas en el Congreso. Algunas figuras migrarán hacia Provincias Unidas, mientras otras permanecerán fieles al jefe del PRO.
La incógnita reside en qué harán Ritondo y Santilli, los más entusiasmados con el acuerdo con Milei y ya posicionados como posibles candidatos a gobernador por La Libertad Avanza. Lo cierto es que el encuentro de este martes reveló un PRO fragmentado, con un Macri que enfrenta el doble desafío de mantener la cohesión interna y resistir el avance de construcciones alternativas que buscan capitalizar sus propias divisiones.
