Se llevó adelante una nueva audiencia en la Megacausa Zona 5, en la que la defensa del imputado Mario Horacio Torres continuó con su alegato e insistió en utilizar los recursos negacionistas y reivindicadores habitualmente utilizados por los abogados de los genocidas.
Este jueves 20 de febrero continuó el juicio de la Megacausa Zona 5 en la ciudad de Bahía Blanca, que transita la última etapa de alegatos. Actualmente, la alocución sigue a cargo de los abogados defensores de los genocidas.
La centésima vigésima primera audiencia se extendió por algo más de tres horas, y fue realizada nuevamente de manera enteramente telemática, sin presencialidad en el Tribunal Oral Federal.
Al igual que la audiencia anterior, el alegato defensor prosiguió de manera conjunta por los abogados que patrocinan al imputado Mario Horacio Torres, representados por Gerardo Ibáñez y Laura Olea, de quienes ya nos hemos referido ampliamente sobre sus trayectorias como defensores de genocidas.
En esta oportunidad, la que usó las tres horas y algo más de audiencia fue solamente Olea, y en la próxima audiencia seguiría tomando la palabra Ibáñez.
Olea recurrió en su exposición a los recursos negacionistas y reivindicadores habituales utilizados por las defensas, negando los hechos, poniendo en duda la palabra de las víctimas, recurriendo a los argumentos televisivos o de redes sociales, para repetir slogans negacionistas sobre los números de víctimas, sobre la teoría de los dos demonios, el concepto de guerra y la culpabilidad del gobierno Kirchnerista porque en su gestión se reabrieron las causas.
Una defensa no solo negacionista y reivindicadora de los crímenes, sino fuertemente ideologizada y de acuerdo con los perpetradores y con la política nacional actual. Seguramente estos lineamientos defensivos no serán exclusivos de la hija de un genocida como es Olea y de un abogado cercano a lo castrense como Ibáñez, sino que se repetirán a lo largo de todas las defensas, considerando propicio el momento político actual para hacerlo.
La excusa de la guerra con Chile
Hasta ahora, el único imputado defendido que se ventiló su caso fue Mario Horacio Torres. Al momento de los hechos, Torres (con el grado de coronel) revistaba como Jefe del Departamento III Operaciones del Comando del Vto. Cuerpo de Ejército.

Ante las acusaciones realizadas, Torres negó su participación y dijo haber estado abocado “a la planificación de una operación convencional ofensiva contra un país vecino”, es decir a la posible guerra con chile por esos años.
Además, actuó como Presidente del Consejo de Guerra al que fue sometida una de las víctimas sobreviviente al ser blanqueado, luego de haber estado desaparecido casi dos años en el centro clandestino La Escuelita.
“Tales menesteres criminales lo hacen plenamente responsable, al haber liderado, precisamente, el simulacro de juicio que significara la continuidad del secuestro y las torturas”, había expresado la abogada Mónica Fernández Avello en su alegato acusatorio.
También pesa sobre su acusación haber participado como responsable, por las víctimas secuestradas el día 11 de agosto de 1978 en el barrio de Palihue Chico, donde la fiscalía en su alegato probó a través de la documentación aportada que el operativo fue llevado a cabo por el Comando 5to. Cuerpo de Ejército, en las que fueran privadas de la libertad 40 personas, en su mayoría de nacionalidad chilena.
Su plena responsabilidad con el Plan sistemático de exterminio también fue corroborada cuando el padre de una enfermera bahiense desaparecida en La Plata se entrevistó con Torres para tratar de saber sobre el paradero de su hija y recibió como respuesta del imputado “que se olvide de su hija y que los cadáveres no se entregan”.
Así, dio cuenta que era conocedor y parte del plan criminal, clandestino, ilegal y desaparecedor, implementado para secuestrar, torturar, asesinar y producir la desaparición de personas, utilizando la estructura orgánica de las fuerzas armadas y las de Seguridad a ellas subordinadas -federales y provinciales-, como ha quedado ampliamente demostrado en el transcurso de la Megacausa.
Al imputado se lo acusa por los delitos cometidos contra 18 víctimas y el pedido de pena de la fiscalía y las querellas es de 25 años de prisión. El jueves 27 continuará alegando el abogado Ibáñez, y debería finalizar, luego de tres audiencias, la defensa de Mario Torres.
Cumpleaños tras las rejas
Como dato de color, en la audiencia virtual del 20 de febrero pudo percibirse como los imputados chateaban en el chat del Zoom, que es público para todas las partes, sin tener ningún tipo de restricción ni llamado de atención de parte de los jueces que presiden el juicio.

Uno de los imputados le deseó feliz cumpleaños al convicto José Antonio Maidana, quien perdió el beneficio de festejar su cumpleaños en su casa, donde cumplía prisión domiciliaria, cuando en diciembre último fue acusado de producir material pornográfico infantil, y fue arrestado y llevado al penal de la provincia de Córdoba.
Además de afrontar la causa por delitos aberrantes de Lesa Humanidad, afronta otra causa por producción de material de abuso infantil. Una joyita Maidana.
Centésima vigésima primera audiencia de la Megacausa Zona 5 (20 de febrero de 2025)
¿Cuándo continúan las audiencias?
La próxima audiencia se realizará el día jueves 27 de febrero, desde las 9 horas, de manera exclusivamente virtual hasta nuevo aviso, donde proseguirá el alegato de la defensa de los genocidas.
Las audiencias se pueden observar en el canal de YouTube del Poder Judicial, de la Subsecretaria de Derechos Humanos de la Provincia de Buenos Aires, y también en el micrositio de la Megacausa Zona 5 en el Ágora Digital.