Javier Milei llegó a Brasil en el marco de su participación en la Cumbre del G20 con la expectativa de reunirse con Xi Jinping y sin reuniones pautadas con Lula Da Silva, que propone impulsar un impuesto a los “super ricos” que el libertario se niega a apoyar.
Tras recibir al mandatario francés Emmanuel Macron en Casa Rosada, el Presidente Javier Milei partió a Brasil y arribó a Río de Janeiro ayer en torno a las 18 horas para participar de la cumbre del G20 que se llevará adelante entre el lunes y el martes.
El argentino fue acompañado por la Secretaria General de la Presidencia, Karina Milei; y el Ministro de Economía, Luis Caputo. A ellos se sumaron luego el canciller, Gerardo Werthein; el sherpa del G20, Federico Pinedo; y Daniel Raimondi, embajador argentino en Brasil.
Sin un acuerdo pautado con el anfitrión del encuentro, Lula Da Silva, el libertario apuesta a la confrontación, y sus objeciones a apoyar la agenda climática y la lucha contra la violencia de género, así como su negativa al impuesto a los “super ricos” que promueve Lula, ponen en riesgo el consenso de cara a la firma del comunicado final del G20.
En paralelo, el mandatario argentino tiene agendadas una serie de reuniones bilaterales en Río de Janeiro, que incluyen al mandatario chino, Xi Jinping; el primer ministro de la India, Narendra Modi; y la directora del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva.
Milei en Brasil
La Cumbre de Líderes del G20 se lleva adelante entre el lunes 18 y martes 19 de noviembre, y reúne a 19 países y a representantes de la Unión Europea. Es en este contexto que Milei arribó a Río de Janeiro.
La agenda oficial del organismo tiene previsto que los distintos mandatarios expongan sus posiciones sobre temas de interés común, como la lucha contra el hambre y la pobreza, la lucha contra la violencia de género, el cambio climático, etc. Además, está previsto un almuerzo de trabajo y la tradicional foto de la cumbre.
En el marco de la llegada del libertario, desde el gobierno de Brasil dejaron trascender sus preocupaciones por las posiciones que Milei viene tomando ante organismos internacionales, y suponen que su negativa a negociar el comunicado final del G20 podría generar la ruptura de los consensos dentro del organismo.
En última instancia consideran que, en combinación con Donald Trump, su objetivo geopolítico es implosionar al foro multilateral que reúne a los países más importantes del planeta.
Es que Milei viene de votar a contramano de la amplia mayoría de los países de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en temáticas como la prevención de la violencia contra las mujeres y el apoyo a los derechos indígenas.
Además, recientemente expresó sus intenciones de formar una organización de naciones paralela “en defensa de la libertad” y retiró a la comitiva argentina de la COP29, la conferencia de las Naciones Unidas sobre el cambio climático, algo que podría incluso poner en jaque el Acuerdo Mercosur-Unión Europea, que podría ser firmado durante el G20.
Desde Casa Rosada desmienten los trascendidos del gobierno de Lula Da Silva, a quien Milei solo verá en las actividades grupales que se realizarán durante la cumbre, aunque adelantaron que la posición argentina no cambiara de cara a la discusión.
En ese sentido, aseguran que están dispuestos a negociar y que buscarán que el comunicado final incluya los intereses de todos los socios, argumentando que Brasil podría utilizar el comunicado para apalancar su agenda doméstica.
Ante todo, varios puntos del borrador prometen generar tensiones entre ambos países. Por un lado, los borradores sobre los que se negocia incluyen un apartado sobre la crisis de Medio Oriente, que deja al descubierto las diferencias diplomáticas.
Brasil se ha expresado en varias oportunidades contra los ataques contra Palestina que viene llevando adelante Israel, que a su vez es -junto a Estados Unidos- la principal referencia internacional del libertario.
Otro tema que generaría tensiones es la propuesta del brasilero de impulsar un impuesto del 2% a los denominados “super ricos”. La negativa de Milei a aceptar esto va en línea con las modificaciones en los tributos que llevó adelante en Argentina, donde liberó a los contribuyentes más ricos del impuesto a los Bienes Personales.

El gobierno exime a los más ricos de pagar bienes personales mientras restituye Ganancias para trabajadores
La posición de Milei amenaza con bloquear el comunicado conjunto de los líderes del G20, algo que molesta no sólo a Lula, sino también al gobierno saliente de Joe Biden, así como a los referentes de Asia y Europa. Será el trabajo de Pinedo avanzar con las complejas negociaciones.
Sea como fuere, en el Gobierno argentino aseguran que “el presidente tiene sus líneas rojas y quiere que se las respeten“. “Eso no significa que viene a romper el G20”, sino “acordar sin transigir su mirada del mundo”.
“Es lo que estamos pidiendo, y es lo que estamos negociando con los sherpas del G20, al margen de la información falsa que el gobierno de Lula esta filtrando a los medios locales”, concluyó un funcionario argentino.
Lo cierto es que Lula tuvo un gesto con la administración libertaria la semana pasada, cuando recibió en persona las cartas credenciales de Daniel Raimondi, un diplomático de sólida trayectoria.
Agenda de Javier Milei
El martes, Milei tiene agendada una reunión con el mandatario de la República Popular de China, Xi Jinping, a las 10:20 horas. El libertario había iniciado su mandato con una posición confrontativa con el representante chino.
Sin embargo, tras el gesto de la administración de Xi Jinping de renovar el swap de monedas, y la expectativa de profundizar las negociaciones para fortalecer las reservas del Banco Central, Milei dio un giro de 180 grados en su percepción sobre el país asiático.
Así, Milei pasó de acusar a China de ser una “dictadura comunista” a asegurar que es “un socio comercial muy interesante porque ellos no exigen nada. Lo único que piden es que no los molesten”.
Cabe señalar que a las 11:30 horas también tiene prevista una reunión con la directora del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, y a las 12 estará con el primer ministro de la India, Narendra Modi. Finalmente se encontrará con el gerente general de la empresa italiana Enel, Flavio Cattaneo, a las 13 horas.
Entre los participantes del encuentro con Georgieva estarían Caputo y su equipo, quienes vienen desde hace meses intentando destrabar las negociaciones para recibir “fondos frescos” de parte del organismo.
Hasta el momento esto no ocurrió, pero en Casa Rosada consideran que la cena con Trump inició una nueva etapa en la relación de la Argentina con el FMI y el Banco Mundial (con cuyo presidente, Ajay Banga, Milei también se encontrará).
En cuanto a la reunión con Modi, la expectativa del Gobierno es aprovachar las intenciones del indio de avanzar con su estrategia de acercamiento a la región, y la particularidad de ambos países es que tienen economías complementarias.
La visita de Emmanuel Macron
Hasta el momento, las reuniones bilaterales que viene llevando adelante el mandatario argentino no vienen siendo una fuente de buenas noticias para la administración libertaria. Antes de viajar a Brasil, Milei recibió a Macron en Casa Rosada.
El encuentro duró poco más de una hora y tuvo entre sus temas centrales el trabado acuerdo Mercosur-Unión Europea. El francés hizo público a la prensa que no firmará el acuerdo. “no creemos en el acuerdo tal como se negoció”, manifestó, al tiempo de plantear que varios países no están satisfechos con las pautas.
Macron también reveló que Milei le dijo “que no estaba satisfecho” ni con el acuerdo ni “con el funcionamiento actual de Mercosur“. “Sería muy malo para su reindustrialización y muy malo para nuestra agricultura“, opinó.
“No podemos decir a los agricultores franceses y europeos que cambien sus prácticas, que dejen de usar ciertos productos fitosanitarios y al mismo tiempo abrir nuestros mercados a importaciones masivas de productos que no respetan los mismos criterios”, completó.
“No se debe sacrificar a la agricultura europea. Es lo que he dicho”, recordó, “si somos razonables, hay un camino posible, pero no se hará en detrimento de nuestra agricultura“.
La negativa de Milei a apoyar la lucha en defensa del medio ambiente también fue un punto de alejamiento entre el libertario y la gestión francesa, que busca poner esta cuestión sobre la mesa. Para colmo, Macron también visitó la Iglesia de la Santa Cruz para rendirles homenaje a los desaparecidos de origen francés.
Se trata del sitio donde el represor Alfredo Astiz marcó a las monjas francesas y a las Madres de Plaza de Mayo para ser secuestradas y asesinadas. Durante su paso por el país, el mandatario francés se reunió con referentes de Derechos Humanos y familiares de detenidos desaparecidos.
“Estamos mirando las posibilidades de equipamiento naval en un futuro cercano y el apoyo de Francia como socio global”, comentan desde Argentina, “el ministro está interesado en encontrar una solución al tema submarino. Se viene trabajando desde marzo el tema“.
Tratado de libre comercio con Estados Unidos
Detrás de las molestias de Milei con el funcionamiento del Mercosur también están sus intenciones de firmar un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos, una iniciativa en la que el nuevo embajador en Washington, Alejandro Oxenfrod, ya estaría tramitando.
El problema es que el Mercosur tiene una normativa que prohíbe realizar acuerdos unilaterales por afuera del bloque. Según explicó el especialista Emanuel Porcelli, “no hay ningún acuerdo de libre comercio firmado unilateralmente por miembros del Mercosur“.
El Profesor de Relaciones Internacionales de la facultad de Ciencia Sociales de la UBA comentó que “en el plano político resulta extraño que avances en un tratado de libre comercio con estados Unidos teniendo el del Mercosur y la Unión Europea sin cerrar“.
“Hay un principio que rige en estos casos que se llama de ‘trato a la nación menos favorecida’, en donde lo que acordás en términos de tarifas o a la hora de abrir en una negociación lo tenés que sumar a la otra“, explicó.
Por ejemplo, “si firmás un acuerdo con Estados Unidos más abierto al que cerraste con la Unión Europea, debe volver al de Unión Europea y equiparar“. “Con el que te sentás a negociar no podes arrancar en un punto anterior al que estaba”, completó, “por esto, se podría complicar el acuerdo con la Unión Europea puede debilitarte en la negociación”.
Además, remarcó que un acuerdo de estas características “no se firma de la noche a la mañana y aún con toda la sincronicidad y coordinación política que pueda haber con Trump, todo lo que se firma tiene que ser ratificado por los Congresos”.
“Si yo soy Estados Unidos y miro la situación de minoría legislativa de Milei, lo pienso, lo discuto o espero a las legislativas, como mínima”, opinó. Además, “hay una decisión del GMC que prohíbe explícitamente la negación unilateral de estos acuerdos”.
“Uruguay decía que esa resolución no estaba totalmente vigente e intentó a avanzar con China pero al fin y al cabo, Lacalle Pou está terminando el mandato y el acuerdo nunca existió“, puntualizó.