Javier Milei había convocado a Cristian Ritondo, Miguel Ángel Pichetto y Rodrigo De Loredo a Casa Rosada para negociar el apoyo de aliados y dialoguistas de cara a las Sesiones Extraordinarias, pero desde Encuentro Federal rechazaron la invitación y piden que la discusión se lleve adelante en el Congreso.
El Gobierno de Javier Milei busca construir consensos de cara a las Sesiones Extraordinarias, que se extenderán desde el 20 de enero hasta el 21 de febrero e incluirán la discusión de siete proyectos de ley, por lo que convocó a los bloques aliados y dialoguistas a una reunión para el próximo martes.
La cita tendría lugar en Casa Rosada y el Jefe de Gabinete, Guillermo Francos, sería el anfitrión junto a Lisandro Catalán. En cuanto a las invitaciones, fueron convocados Cristian Ritondo (jefe de la bancada del PRO), Rodrigo De Loredo (titular del bloque UCR) y Miguel Ángel Pichetto (líder de Encuentro Federal).
Hasta el momento no hubo avances en las negociones de los principales proyectos que impulsa La Libertad Avanza, como la eliminación de las PASO o la designación de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla para la Corte Suprema. En otros casos, como el de Ficha Limpia, poco se sabe de la propuesta oficial que pretende impulsar el Gobierno.
Sin embargo, y pese al apuro del oficialismo, los dialoguistas de Pichetto se rehúsan a ir a Casa Rosada a negociar y regalarle una foto en conjunto al Gobierno en un año electoral. Ellos pretenden que las discusiones tengan lugar en un entorno más formal, como el Congreso de la Nación.
La posición de los dialoguistas
En los últimos meses, Javier Milei había decidido excluir a los integrantes de Encuentro Federal de la mesa parlamentaria del oficialismo. Sin embargo, ante la falta de acuerdos con respecto a las leyes que pretende tratar y la necesidad de juntar todos los votos que pueda en el Congreso, extendió su invitación a los dialoguistas.
Pese a esto, la bancada que incluye a diputados como Emilio Monzó, Nicolás Massot y Oscar Agost Carreño planteó que no asistirán a la convocatoria en caso de realizarse en Casa Rosada, y consideran que “una reunión sobre Diputados tiene que hacerse en el Congreso“.
Esta iniciativa ya había sido planteada previamente al titular de la Cámara baja, Martín Menem, quien parece estar más preocupado por la campaña y el armado de La Libertad Avanza que los proyectos a tratarse este verano, cuyos detalles desconoce, según quienes frecuentaron su despacho en los últimos días.
Los pichettistas sospechan que la invitación le daría al oficialismo “una foto de cumpleaños en año electoral“, algo que quieren evitar, especialmente cuando gran parte del temario está marcado por la incertidumbre.
“Estamos ante una convocatoria fantasma. Algunos títulos no tienen texto”, comentan los diputados al ser consultados. Un ejemplo de esto es el nuevo articulado de Ficha Limpia, que aún no se conoce y que según el gobierno tendría una excepción de cumplimiento en condenas que se ejecuten durante el año electoral.
Parte de la bancada cree que existe una falta de interés por generar los consensos necesarios para impulsar las leyes y los más desconfiados incluso creen que el oficialismo no tiene interés en sancionar los proyectos, sino montar un show para “dejar expuesta” a la oposición que se niegue a votar a favor.
La discusión por el Presupuesto 2025 funciona como antecedente. Si bien La Libertad Avanza se mostraba públicamente abierta a impulsar el debate, las negociaciones se cerraron ante los cuestionamientos al proyecto oficial y finalmente se prorrogó la ley de leyes.
No son pocos los que creen que este era el desenlace que buscaba el Gobierno, y en todas las bancadas (desde el PRO hasta Unión por la Patria) sostienen la exigencia de que el Presupuesto 2025 sea incluido en el temario de las extraordinarias.
A las críticas de macristas y radicales se sumaron los bloques de Democracia para Siempre y Unión por la Patria, que amenazaron con vaciar el recinto si no se debate la ley de leyes. Por ahora, el oficialismo se niega a habilitar esta discusión.
Tensa relación de LLA con el PRO
La convocatoria se produce en un momento de máxima tensión entre las relaciones del PRO con los libertarios. El partido liderado por Mauricio Macri rechazó la omisión del Presupuesto en el temario y publicó un duro comunicado acusando a Milei de “autoritario”.
En medio del tira y afloje por una eventual alianza electoral entre ambos espacios, desde la bancada amarilla adelantaron que estarán presentes el próximo martes para “escuchar” los planes del Gobierno.
Con respecto al Proyecto de Ficha Limpia, cabe recordar que el espacio intentó tratarlo en el recinto en dos oportunidades. Ambas fracasaron, justamente por la ausencia de varios integrantes de la bancada libertaria, que ahora impulsa su propio proyecto al respecto.
La posibilidad de que los libertarios impulsen la incorporación de una cláusula para exceptuar de la prohibición a quienes reciban condenas en años electorales abre la puerta a la posibilidad de que Cristina Fernández de Kirchner no sea inhabilitada, aunque podría generar un conflicto con el partido amarillo y la Coalición Cívica.
En cuanto a la eliminación de las PASO, hasta ahora ningún sector tiene una oposición tomada. La propuesta original del PRO y la UCR era la de suspender las primarias, y Jorge Macri envió a la Legislatura porteña un proyecto en ese sentido, aunque otros legisladores están dispuestos a avanzar con su eliminación definitiva.
No facilita la discusión la presencia de otros puntos del proyecto de reforma política que modifican el régimen de financiamiento de los partidos políticos. Ante todo, la posición generalizada es la de no regalarle el quórum a Francos sin pedir algo a cambio. La moneda de negociaciones podría ser justamente el Presupuesto.
En lo que respecta al bloque radical. Rodrigo de Loredo continúa de vacaciones y desde la conducción del bloque adelantaron que analizarán las propuestas que llevarán a la reunión del martes durante el fin de semana. Por lo pronto, solo tuvieron charlas informales sobre el temario.
Milei también deberá acordar con el peronismo
Como si las tensiones con sus principales aliados no fueran suficiente, si Milei quiere concretar los nombramientos de Lijo y García-Mansilla en la Corte Suprema deberá acordar con el bloque de Unión por la Patria en la Cámara Alta, donde necesita el apoyo de dos tercios de los presentes en el recinto.
El peronismo ya había hecho un gesto en favor de impulsar las negociaciones al otorgarle la firma que necesitaba para impulsar el pliego de Lijo, aunque puso en la mesa de discusiones la segunda candidatura de Milei y abrió la posibilidad de que se discuta la ampliación de la Corte y el nombramiento del procurador general.
Hasta ahora, García-Mansilla ni siquiera tiene dictamen de comisión, pero en Balcarce 50 dicen que si el Senado no lo vota, el Poder Ejecutivo lo nombrará en la Corte por decreto. Según dicen, no aceptarán que solo entre uno de los candidatos.
Según las bancadas dialoguistas, este es el único tema que le interesa a los libertarios. “Solo les interesa nombrar a los jueces de la Corte”, comentan, aunque consideran que “todo está muy verde“. Por lo pronto, el dictamen necesario para su tratamiento en el recinto aún no ha sido presentado en la Mesa de Entradas del Senado.
Entre tanto, el peronismo pone en duda que se pueda cumplir el cronograma que propuso Milei y advierte que no podrán llevar el debate en comisión en las últimas semanas de enero, y que deberán esperar a que terminen las obras de refacción en el recinto.
En cuanto a la eliminación de las PASO, el peronismo tampoco tiene una posición tomada al respecto y Germán Martínez (titular de la bancada) tampoco fue convocado por el oficialismo.
Se trata de 99 diputados, aunque es complejo que voten en conjunto. El santafesino Eduardo Toniolli acaba de renunciar a la vicepresidencia del PJ bonaerense y rechaza a viva voz la eliminación de las primarias, mientras que otros sectores planean plegarse a la iniciativa.
Asunción de Stefanía Cora en el Senado
Otro tema a tratar durante la próxima sesión de la Cámara Alta será la asunción de la camporista Stefanía Cora, quien deberá ocupar la banca que quedó vacante tras la expulsión de Edgardo Kueider, detenido en Paraguay por intentar cruzar la frontera con varios miles de dólares.
Con su salida, Milei pierde uno de sus aliados y el bloque peronista pasaría de tener 33 integrantes a alcanzar los 34, quedando cerca de los 37 Senadores que son necesarios para obtener quórum propio.
Para concretar la asunción de Cora, es necesario convocar a una sesión y obtener el quórum para tomarle juramento. Este proceso podría ser el detonante para que se convoque al recinto antes de que se realicen reuniones de comisión, lo que aceleraría el tratamiento de los temas pendientes.