El oficialismo logró postergar la sesión del Senado de esta semana para asegurarse los votos para aprobar la Boleta Única de Papel, pero Unión por la Patria bajará hoy al recinto para insistir con el tratamiento del financiamiento universitario y los fondos reservados de la SIDE.
Tras un acuerdo entre La Libertad Avanza y las bancadas colaboracionistas, el oficialismo logró postergar una semana la sesión en la que se tratarán el proyecto de Boleta Única de Papel, el aumento del financiamiento universitario y el decreto con el que Javier Milei otorgó fondos reservados a la SIDE.
La decisión se tomó tras la reunión de Labor Parlamentaria en el despacho de la vicepresidenta Victoria Villarruel, y a pesar de las presiones de Unión por la Patria para que se sesione este mismo jueves. Sin embargo, la bancada tiene planeado bajar hoy al recinto e insistir en sesionar.
La indefinición sobre la fecha de la sesión se extendió hasta ayer, cuando finalmente se agendó la sesión para el jueves 12 de agosto a partir de las 14 horas. Con esto el oficialismo ganó tiempo para obtener los votos y aprobar la boleta única.
La necesidad de obtener un triunfo en este punto es prioridad para La Libertad Avanza, ya que en los otros dos puntos del temario se enfrenta a una situación adversa y una posible derrota, que en el caso del DNU sería histórica, ya que nunca ambas cámaras dejaron sin efecto un decreto.
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A contramano de la decisión de la mayoría de postergar la sesión de hoy, el interbloque conducido por José Mayans adelantó que a las 14 horas estará presente en el recinto para insistir en que se realice la sesión y pidió acompañamiento de los demás bloques.
Desde el sector tienen particular interés en tratar el proyecto del financiamiento universitario y el rechazo al DNU, en los que la oposición parece estar mayoritariamente de acuerdo. A través de un comunicado, indicaron desde la bancada:
“Esperamos poder contar con la presencia de los otros bloques para poder darle repuesta a todas las universidades del país y ponerle un punto final al despilfarro que hizo este Gobierno con los fondos reservados a la Secretaría de Inteligencia”.
En paralelo, enviaron una nota a Villarruel con justificaciones sobre el pedido, y señalaron que “en el plenario de Labor Parlamentaria no se ha logrado acuerdo, ni se ha distribuido el plan de Labor en los plazos reglamentariamente previstos”.
Por esto, expresaron su “voluntad de celebrar una sesión ordinaria el día jueves 5 de septiembre y a formular una propuesta sobre los temas a tratar”. Así, pidieron a la Vicepresidenta que garantice las condiciones para que se celebre una sesión ordinaria.
Por lo pronto, la bancada peronista no contaría con los números para habilitar la sesión, pero como cuenta con 33 senadores listos para sentarse en sus bancas, no está lejos del número mínimo. En cualquier caso, la maniobra dejaría expuesta a la oposición que decida no acompañarlos.
“Estos dos temas que nos parece que son fundamentales para la Nación”, comentó la senadora Anabel Fernández Sagasti, quien también indicó que:
“Hay que fijar posicionamiento y esperemos que también nos acompañen todos aquellos que dicen defender la educación pública y que también se sienten indignados por este financiamiento de 100 mil millones de pesos a la SIDE cuando sabemos lo que está pasando con los jubilados y toda la gente que la está pasando mal en la Argentina”.
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Las declaraciones parecían estar destinadas a la bancada radical, que respondió con un comunicado en el que celebraron “la inclusión de temas importantes en la próxima sesión” a realizarse la semana que viene.
De esta forma, dieron a entender que no participaran de la convocada por Unión por la Patria para hoy. “Esos acuerdos alcanzan materias tan significativas para la ciudadanía como Boleta Única de Papel, el financiamiento para el sistema universitario público y el decreto de necesidad y urgencia que destinó 100 mil millones de pesos a la Secretaría de Inteligencia del Estado”, dijeron desde la UCR.
Además, en su comunicado aseguraron que “los argentinos apostaron por un cambio, con las esperanzas de avanzar hacia un futuro superador, de acuerdo con el potencial de nuestro país. En ese sentido, siempre nos encontrarán para discutir las cuestiones que permitan sacar a la Argentina de la decadencia”.
“Con esa premisa, renovamos nuestro compromiso para continuar ejerciendo el rol de representación para el que fuimos elegidos, acompañando o proponiendo caminos alternativos, según nuestro mejor entendimiento”, concluyó el bloque de Eduardo Vischi.
Boleta Única de Papel
Sea como fuere, hasta el momento la Boleta Única de Papel es el proyecto que más consensos tiene en favor del oficialismo. Sin embargo, el último borrador del dictamen fue objetado por la UCR, lo que encendió las alarmas. Es que debe ser aprobado por mayoría absoluta de 37 votos y Villarruel no puede desempatar.
Cabe señalar que el PRO es el que impulsa este proyecto, por lo que se supone que el bloque tendrá un acuerdo generalizado en este tema. Sin embargo, el macrismo viene mostrando una actitud compleja con respecto al Gobierno.
En la sesión anterior sus legisladores votaron mayoritariamente a favor de los jubilados (asestando una dura derrota legislativa a Milei), pero luego recibieron reproches tanto del gobierno como del propio Mauricio Macri, lo que suma dudas sobre la posibilidad de que voten de manera unificada.
Entre tanto, la UCR habló de “particularidades” que afectan el impacto del proyecto en diferentes provincias, afectando a las fuerzas locales que no tengan candidatos nacionales. La posición no es unificada, ya que desde otro sector aseguran que “está bien así el dictamen”.
Las idas y vueltas de las bancadas más cercanas al gobierno abrieron la posibilidad de que las diferencias lleven a un empate. En este contexto, Mónica Silva (Río Negro) presentó un proyecto propio y pidió separar las boletas según categoría a la hora de elegir, así como eliminar el casillero para votar la lista completa.
“Los votos para boleta única se sabe que están, pero hay que asegurarlos. Es darle una semana más al Gobierno”, aseguró un participante de la reunión. En el mismo sentido se expresó el presidente provisional del Senado, Bartolomé Abdala.
Según indicó, “somos optimistas” y aseguró que la única razón por la que no se votaría este jueves es “por razones de viaje de algunos senadores”. “Están los votos en la mente de varios senadores para sacar boleta única, pero necesitamos que estén sentados en el recinto y eso se va a poder producir el jueves que viene”, completó.
El gobierno tiene cierto apuro por aprobar el cambio de mecanismo ahora si desea implementar el mecanismo antes de las próximas elecciones. El nuevo borrador que se presentó a los bloques colaboracionistas aclara que quitará el casillero para votar lista completa y las PASO se adelantarían a la primera semana de agosto, acelerando los plazos del cronograma electoral.
Si se aprueba, deberá volver a la Cámara de Diputados, que decidirá si acepta los cambios o no. Cabe señalar que la media sanción se había votado en junio de 2022 y en febrero caerá el proyecto si no es tratado.
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Financiamiento universitario y fondos reservados de la SIDE
Por otro lado, la oposición cuenta con mayores concesos para aprobar una inversión de 738.595 millones de pesos en el presupuesto para las Universidades Nacionales, que se encuentran en una situación crítica a partir del ajuste de Milei.
El Presidente viene de vetar la movilidad jubilatoria y ya adelantó que hará lo mismo con cualquier proyecto que implique un costo fiscal para el Estado. Es decir, que la financiación de la educación entra en esta lista.
En el macrismo se votó en contra en la sesión que otorgó media sanción a la medida y sus senadores no firmaron dictamen en el plenario de comisiones del martes. Sí firmaron Eduardo Wado de Pedro (UxP, presidente de la comisión de Educación) y los radicales Stella Olalla, Flavio Fama y Martín Lousteau.
A contramano de la bancada amarilla, la larretista Guadalupe Tagliaferri firmó y podría inclinar la balanza en favor de la oposición. Ella viene de votar a favor de la movilidad jubilatoria y ya se ha mostrado crítica con la ley bases y el paquete fiscal.
La UCR es una de las impulsoras del proyecto y en Diputados negoció con el peronismo, que buscaba incluir la actualización de los salarios docentes y no docentes universitarios.
En cuanto al DNU que otorga fondos reservados a la SIDE. Habría consenso entre UCR y UP para rechazarlo. Si se concreta esto y no hay ausencia, el rechazo contaría con dos tercios y echaría por tierra el decreto.
En cuanto al PRO, la bancada podría rechazarlo como en Diputados, aunque esto podría traerle inconvenientes a la relación que Macri y Milei buscan recomponer. Tras el resultado en la cámara baja la diputada Silvia Lospennato había explicado que:
“Lamentablemente desde la sanción del DNU hasta que la Cámara de Diputados decidió su rechazo pasó un mes sin que la instancia de control parlamentario fuera convocada a darle tratamiento al tema”.
El planteo no fue escuchado por el oficialismo, pero dio cuenta de las tensiones internas en este punto. En la última reunión entre el bloque PRO y Milei acordaron una paz legislativa, que podría ser afectada por lo que ocurra en el Senado.
