El exministro de economía en tiempos de Néstor Kirchner, Roberto Lavagna, declaró como testigo en el juicio por la obra vial en Santa Cruz. Desvinculó a esa provincia de la “cartelización“. No nombró a Cristina Fernández de Kirchner y advirtió que obras cuestionadas pudieron incluso iniciarse en gobiernos anteriores.
La causa conocida como “Vialidad” en la que se montó una maniobra para involucrar a Cristina Fernández de Kirchner en el supuesto direccionamiento de la obra vial en Santa Cruz y que se encuentra en la etapa de juicio oral está cada día más cerca de caerse por la falta de pruebas y declaraciones de testigos que aseguran la inexistencia de delito.
En este caso, quien declaró como testigo fue el ex ministro de Economía Roberto Lavagna y la conclusión de sus palabras puede resumirse en cinco puntos centrales: revalidó que había hablado de “cartelización”, pero dijo que no la percibió desde su cargo sino solamente a partir de una advertencia del Banco Mundial y un “análisis preliminar” de la Secretaría de Política Económica; negó “específicamente” que se haya constatado ese tipo de maniobras en Santa Cruz, que es lo que se juzga puntualmente; no nombró ni una vez a la vicepresidenta Cristina Kirchner; no aportó nada en cuanto a Lázaro Báez; y hasta sugirió que el “listado de obras” cuestionadas por el organismo internacional pudo iniciarse en gobiernos anteriores y sólo ejecutadas durante el gobierno de Néstor Kirchner.
El exministro de Economía (entre abril de 2002, con Eduardo Duhalde, hasta noviembre de 2005, con Néstor Kirchner) declaró en los tribunales federales de Retiro a pedido del fiscal Diego Luciani ante el TOF2 que juzga a CFK, al exministro de Planificación Julio De Vido y al empresario Báez, entre otros, por supuestos delitos con la obra pública vial en Santa Cruz entre 2003 y 2015.
Lavagna, quien además fue candidato presidencial en 2019, comenzó respondiendo una pregunta del fiscal sobre un programa del Banco Mundial que financiaba obra pública vial en Argentina.
“Sobre finales del ultimo trimestre de 2005 el Banco Mundial dejó trascender que probablemente iba a iniciar un análisis de cómo marchaba este proceso de rutas. No clarificaron el motivo y fue de manera informal”.
“Por eso el Ministerio de Economía tomó la decisión de hacer algún análisis preliminar por parte de la Secretaría de Política Económica. La primera conclusión fue que había algunos elementos preliminares que hacían suponer la posibilidad de la cartelización de la obra publica, un acuerdo entre las empresas participantes de las licitaciones”, contó.
Dijo que esa posible cartelización era en todo el país, no en un lugar puntual, y que una veintena de obras viales fueron suspendidas. Aclaró que la ejecución de las obras dependía del Ministerio a cargo de Julio De Vido, uno de los juzgados en el caso, aunque no le pudo atribuir responsabilidades en particular.
Unos meses antes de las elecciones legislativas de octubre de 2005, el entonces ministro de Economía pidió con carácter de urgente que Defensa de la Competencia comience una investigación completa sobre el tema de la supuesta cartelización.
“No sé las conclusiones porque en noviembre de 2005 se produjo mi cambio y no tuve más información. Con el correr de los años hubo algún tipo de denuncia y por el 2008 se cerró el tema”, se desvinculó, y dijo que “el presidente de la Nación tomó conocimiento” porque él se lo había informado personalmente.
El elemento central de las palabras de Lavagna en relación con lo que puntualmente se juzga llegó cuando el juez Jorge Gorini, del Tribunal Oral Federal 2, le preguntó si esa “circunstancia de cartelización se había constatado en Santa Cruz en ese período“, dado que lo investigado es la obra que Báez recibió entre 2003 y 2005 en esa provincia. “Específicamente, no“, fue la contundente respuesta.
Lavagna no nombró ni una vez a Cristina Kirchner. Tampoco a Báez hasta que el juez Gorini se lo mencionó en una pregunta, de cuya respuesta además surge que el ex ministro tampoco pudo aportar nada desde su paso como ministro respecto del empresario.
“¿Mientras fue ministro tomo conocimiento de Lázaro Báez y Austral Construcciones?”, también le preguntaron. Y respondió:
“Casi imposible no haber tenido conocimiento después. Desde noviembre de 2005 que salí del ministerio no tuve otra función en el estado por lo que no tenia otra fuente de información más que lo que sale en los medios de comunicación. Pero es el único conocimiento”.
El abogado de De Vido, Maximiliano Rusconi, le preguntó a Lavagna si personalmente había tenido alguna percepción de cartelización de obra pública mientras fue ministro. “No, no tenia ningún elemento”, respondió.
Por su parte, otras defensas como la de Báez y Periotti indagaron al ex candidato presidencial sobre la elaboración del presupuesto nacional, su intervención en las obras públicas y el rol de los funcionarios del Ministerio de Economía en el Banco Mundial.
En ese punto, Juan Villanueva, abogado de Báez, cuestionó como “bastante confuso” al modo en que Lavagna se enteró de la preocupación del Banco Mundial por la obra pública.
El ex ministro no pudo atribuirle de manera directa a ningún funcionario del organismo internacional la noticia, dijo que no lo recordaba pero que podía haber sido el entonces Secretario de Finanzas quien se lo transmitió.
Además, en otro punto, Lavagna expresó que, de hecho, la preocupación del Banco Mundial podía ser de obras iniciadas en períodos de gobierno anteriores y que estaban en curso durante la gestión de Néstor Kirchner.
“Por alguna razón se levantaron o interrumpieron un cierto número de licitaciones”, sostuvo y poco después de una hora y media de declaración se retiró.
Después, Lavagna explicó cómo fue la conferencia en que habló públicamente de la cartelización:
“Fue a finales de octubre, principio de noviembre (de 2005). Estaba previsto que la abra el ministro de Economía y la cierre el ministro del área de Obra Pública, que era De Vido”.
Sostuvo que cuando se refirió al tema frente a la Cámara de la Construcción “generó un estado de agitación entre los presentes bastante fuerte” y que “alguien” le “dijo ‘doctor, justo acá viene a decir esto'”, a lo que él respondió “precisamente acá”.
“Supongo que en ese informe preliminar (del Banco Mundial) hay un listado de obras en general“, contestó Lavagna al recordar sus dichos vinculados a la supuesta “cartelización” durante ese acto, y consideró “perfectamente factible que al hablar sobre posibilidad de cartelización de obra pública haya dicho algo de lo que implica en términos de sobrecostos para el Estado“, consultado por el fiscal Luciani.
Lavagna dijo que después de sus dichos en ese acto no habló con Néstor Kirchner y recordó que dejó su cargo en ese gobierno a fines de noviembre de 2005, por pedido del entonces presidente.
Además, el exministro le dijo al Tribunal que en esta época “no tenía diálogo” con el ministro De Vido ni con el exsecretario de Obra Pública, también juzgado, José López.