En medio del conflicto universitario, Javier Milei tuvo que aclarar que la universidad seguirá siendo “pública y no arancelada“, pero acusó a las instituciones de “financiar la mugre de la política” y cuestionó a los estudiantes que realizan tomas: “¿Ustedes están a favor del robo?”.
El conflicto con las universidades se profundiza día a día, y cada vez más instituciones educativas se suman a las medidas de fuerza contra las políticas de ajuste que promueve el Gobierno de Javier Milei, que incluyen la toma de facultades, clases públicas y marchas para visibilizar la situación.
Los dichos del Presidente durante el fin de semana no hicieron más que agudizar el conflicto. Durante el acto por el cambio de nombre del Centro Cultural Kirchner (ahora llamado Palacio Libertad), Milei aseguró que “el mito de la universidad gratuita se convierte en un subsidio de los pobres hacia los ricos, cuyos hijos son los únicos que llegan a la universidad”.
En este contexto, este martes el mandatario tuvo que salir a rectificar sus dichos para intentar bajarle la temperatura al conflicto. Durante una entrevista a LN+, aseguró que la educación seguirá siendo pública y “no arancelada“.
“Acá no está en discusión la universidad pública y no está en discusión el tema de que es no arancelada”, detalló, “la universidad va a seguir siendo pública y no arancelada, eso no se toca”.
Sin embargo, insistió en que “gratuita no es, alguien la está pagando, en este caso la paga mayormente los que no van“, y adelantó que está dispuesto a discutir el financiamiento, aunque “siempre cumpliendo la ley del déficit cero“.
Cabe recordar que esta fue la premisa con la que decidió el veto de la Ley de Financiamiento Universitario, por lo que cabe esperar más ajuste de cara a la discusión del Presupuesto Nacional 2025.
El relato de las auditorías
Más adelante, se refirió a los estudiantes que vienen llevando adelante tomas en distintas casas de altos estudios. “Todos los que hacen este revuelo”, dijo, “¿Acaso están a favor de que se utilicen las universidades políticamente para robar en beneficio de delincuentes de la política?”.
Más adelante, continuó: “¿Ustedes están a favor del robo? Como esto está siendo pagado por todos los argentinos, creo que corresponde que esos fondos tengan que ser auditados“. “¿Por qué no quieren ser auditados? No quiere ser auditado el que está sucio“, insistió.
Por otro lado, aseguró que “se utilizaban los planes sociales para hacer política“, y adelantó: “Yo no voy a ceder. (Raúl) Alfonsín cedió y voló todo por el aire”. “El que no quiere ser auditado es un chorro. ¿Por qué no quieren ser auditados? Porque la política utiliza las universidades para financiarse, para financiar la mugre de la política”, completó.
Los dichos se enmarcan en una seguidilla de acusaciones sin pruebas que el oficialismo viene realizando contra las instituciones universitarias. Previamente, el Secretario de Educación, Carlos Torrendell, había asegurado que había “alumnos inventados” por las universidades para recibir más presupuesto, algo que rápidamente desmintieron los rectores.
Lo cierto es que las casas de altos estudios en ningún momento se resistieron a ser auditadas. De hecho, desde el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) explicaron que las instituciones tienen sus auditorías internas, a las que se suma una externa que realiza la Auditoría General de la Nación (AGN).
En cualquier caso, las auditorías de la AGN dependen del Congreso, que este año está auditando a seis universidades nacionales. Sin embargo, lo que ha planteado Milei es crear un nuevo sistema de auditoría creado específicamente para la ocasión, a cargo de la Ministra Sandra Pettovello.
En otras palabras, la decisión de realizar una auditoría externa no depende de las casas de altos estudios, sino del Gobierno Nacional y el Congreso.
Discusión por el presupuesto
En cuanto al veto de la Ley de Financiamiento, el mandatario aseguró que el problema de la norma es que no indicaba de dónde saldrían los fondos para financiarla, y llamó a la oposición a presentar una nueva ley especificando el origen del financiamiento.
Sobre el conflicto, dijo que “los docentes no están bien pagos, es algo histórico. Los tipos que no lo arreglaron me vienen a pedir que arregle algo que pasa hace 40 años y yo estoy dispuesto a arreglarlo, lo que estoy diciendo es que me digan cómo lo hacemos”.
Lo que omitió señalar es que acumulan una pérdida salarial en torno al 50% con respecto a la inflación desde el inicio de su gestión, y que más del 80% de los docentes universitarios se encuentran por debajo de la línea de pobreza.
“Acá está el Presupuesto, díganme cómo lo vamos a arreglar: yo pago los intereses de la deuda, con el resto hagan lo que quieran, pero no voy a subir los impuestos ni tomar deuda nueva”, insistió.