Pese a que la inflación superó su propia meta, Javier Milei redobla la apuesta, desacelerando el crawling peg e ignorando el pedido del FMI para dejar de subsidiar un dólar excesivamente barato.
Este martes el INDEC dio a conocer el dato de inflación correspondiente a diciembre. En el último mes del año el Índice de Precios al Consumidor (IPC) ascendió un 2,7% y acumuló en 2024 un 117,8%.
Esto marca una aceleración con respecto al mes anterior (cuando el indicador había dado 2,4%) y el incumplimiento de la meta que el propio Gobierno de Javier Milei se había impuesto como condición para bajar la tasa de devaluación mensual del dólar al 1%.
Es que el libertario había asegurado que impulsaría el recorte del crawling peg si la inflación daba por debajo del 2,5%, pero pese a que el IPC estuvo un 0,3% por encima de lo esperado, Milei igualmente decidió forzar la reducción del ajuste mensual de la divisa extranjera.
La decisión tensiona las relaciones con el FMI en medio de las negociaciones para impulsar un nuevo programa con el organismo, que no está de acuerdo con sostener un tipo de cambio barato mientras se utilizan fondos de las reservas para intervenir el mercado cambiario.
De hecho, el organismo exige una unificación cambiaria (que implicaría una nueva devaluación que lleve al dólar a la zona de los 1.300 pesos), para luego avanzar con la liberación del cepo cambiario y, a la vez, mantener la libre flotación del peso.
En cuanto al dato de inflación, según el ente encabezado por Marco Lavagna, la división con mayor alza mensual en diciembre de 2024 fue Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (5,3%), escoltada por Comunicación (5%).
Esto tuvo que ver con los incrementos en los alquileres y en las facturas de electricidad y gas, así como las subas en servicios de telefonía y acceso a Internet.
Entre tanto, el segmento con mayor incidencia en el nivel general fue alimentos y bebidas no alcohólicas (2,2%) en cinco regiones. Entre tanto, en Gran Buenos Aires la incidencia más alta se registró en restaurantes y hoteles (4,6%).
En el otro extremo, las dos divisiones con menores aumentos fueron Prendas de vestir y calzado (1,6%) y Equipamiento y mantenimiento del hogar (0,9%). Noreste y Gran Buenos Aires fueron las regiones de mayor suba mensual (2,9%), ubicándose por encima del promedio nacional. Entre tanto, Cuyo fue la de menor (2,3%).
¿Qué implica la reducción del crawling peg?
El hecho es que la suba de la inflación se volvió a acercar al 3% y derrumbó el optimismo que venían mostrando en Casa Rosada, donde aspiraban a que el índice estuviera por debajo del 2,5%. Un resultado así era lo que Milei había puesto como condición para bajar el crawling peg del 2% mensual al 1%.
Cabe recordar que tras la brutal devaluación que impulsó en diciembre, a partir de enero comenzó a funcionar un esquema de control del tipo de cambio oficial que estipulaba que el dólar aumentaría su valor en un 2% cada mes, algo que -si se tiene en cuenta la inflación- quedó rezagado, algo que venía señalando el FMI.
Hasta el momento, el libertario había argumentado en favor de la convergencia de la inflación, tasas de interés y precio del dólar. “Vamos hacia ahí y en ese momento vamos a abrir el cepo“, decía durante sus últimas entrevistas.
Sin embargo, la inflación no se redujo e igualmente impulsó la reducción del crawling peg, lo que termina ampliando la brecha entre estas tres variables de la economía. Jorge Carrera, ex vicepresidente del Banco Central, comentó con picardía que “estamos viendo un gobierno que intenta demostrar lo que en un lenguaje académico llamamos las machoeconomics“.
Según explicó, “con esto Milei dice: Yo soy consistente, yo prometí que iba a bajar el crawl al 1%, y aunque el IPC haya dado 2,7%, igual lo bajo, confío en que la promesa vaga que hice va a hacer que los agentes económicos se sigan reacondicionando para ponerse acorde con ese 1%”.
“Respecto a la apreciación cambiaria, Milei sale a decir todo el tiempo que no existe y pareciera que el gobierno se lo termina creyendo”, apuntó sobre la situación, “lo grave es que no está haciendo nada para corregirla”.
En ese sentido, consideró que “es un juego un tanto infantil“. “Manejar el tipo de cambio no te lleva a ganar competitividad, que es el verdadero problema, para lo cual no sólo necesitás que baje más la inflación, sino que haya deflación en dólares“, apuntó.
Por otro lado, indicó que “el camino es completamente distinto, no sirven afirmaciones del tipo ‘yo soy fuerte’ o ‘yo cumplo con lo que digo’” y aseguró que “por mas que te empeñes, hay una dinámica de precios que tiene otros determinantes que van más allá de la credibilidad”.
“Querer forzarlo excesivamente es muy riesgoso, sobre todo en un contexto externo que no te ayuda, donde el resto de las economías emergentes está viendo una apreciación del dólar y preparándose para un mundo mucho más difícil en términos comerciales y están llevando adelante devaluaciones protectivas, mientras nosotros encaramos apreciaciones exageradas casi como un capricho para fortalecer la credibilidad”, detalló Carrera.
“Están tentando a la suerte a rifar la primera parte, el éxito fiscal, por una cuestión que se podría hacer mucho mas ordenada”, advirtió, “forzar los instrumentos del tipo de cambio puede ser una gran inconciencia“.

A contramano de lo que exige el FMI, Milei espera el dato de inflación para bajar el ajuste del dólar
La defensa de Caputo y una interna incipiente
Tras revelarse el dato de inflación de diciembre, el Ministro de Economía Luis Caputo realizó una extensa publicación en sus redes sociales defendiendo el resultado. Sin embargo, puertas adentro, las tensiones con su principal socio y titular del Banco Central, Santiago Bausili, son cada vez más aparentes.
En su defensa, aseguró que el dato confirma “la continuidad del proceso de desinflación” y “se da en un mes en el cual el índice presenta una estacionalidad positiva, vinculada a las fiestas y al inicio del período de vacaciones de verano”, mientras “la actividad económica como los ingresos reales de la población presentan una fuerte recuperación“.
Los dichos de Caputo sorprenden por el contraste con la explicación monetarista de la inflación que suele emitir Milei cuando se le pregunta al respecto. Sobre el final de su posteo, agregó que “la continuidad del proceso de desinflación puede apreciarse también en el análisis de medias móviles de la variación del IPC“.
“La media móvil de 3 meses fue de 2,6% mensual, el menor registro desde septiembre de 2020″, concluyó el ministro, que además durante su gestión decidió apelar a las medidas que siempre asoció al kirchnerismo para evitar saltos inflacionarios.
Inflación de Diciembre: 2,7%
✅ El IPC Nacional registró una variación de 2,7% en diciembre, confirmando la continuidad del proceso de desinflación. Esto se da en un mes en el cual el índice presenta una estacionalidad positiva, vinculada a las fiestas y al inicio del período de…
— totocaputo (@LuisCaputoAR) January 14, 2025
Un ejemplo de esto son los ajustes tarifarios. En diciembre INDEC apuntó que este sector fue el más afectado por la inflación, superando el 6%. Previamente, Caputo había congelado las tarifas de los sectores B y E, al tiempo que exige a los miembros que no cierren paritarias por encima del 1%.
El resultado agudizó las diferencias internas dentro del equipo económico, que cada vez ve con mayor preocupación la falta de reservas y las presiones del FMI para devaluar. Antes de publicar el índice de inflación, el oficialismo envió a sus periodistas amigos a “actualizar” las expectativas del Gobierno y decir que en realidad la inflación sería menor al 3%.
Incluso maquillaron las palabras del libertario para ocultar la condición que él mismo había propuesto para la baja del crawling peg, por lo que los medios aliados cambiaron el relato para asegurar que en realidad la condición era que la inflación diera menos del 3%.
La inflación de la Ciudad de Buenos Aires (que ascendió a 3,3%) fue la primera señal de que las expectativas del oficialismo eran exageradas, y que el INDEC daría un resultado superior al del mes pasado. En el mercado se esperaba algo similar. Un operador financiero comentó que “la suba de inflación de la ciudad dejó poco margen a Marco Lavagna para seguir dibujando el IPC”.
En cuanto al equipo económico del Gobierno. Cabe recordar que las empresas multinacionales acumulan 5 años de pago de dividendos en dólares. Caputo quiere pagar los dividendos atrasados -unos USD 8.000 millones- con los bonos Bopreal; y Bausili intenta evitar eventuales judicializaciones.
Para colmo, el vice del Banco Central, Vladimir Werning, respalda al Ministro de Economía, lo que según un técnico del Banco Central “genera un mal clima en la conducción del Banco”. “Los chicos Anker están agotados, la gestión es muy intensa, y por momento parece que se rompe la familia”, apuntó, haciendo referencia a la consultora que comparten Caputo y Bausili.
“Ha habido un costo social muy alto asociado al programa de austeridad”
Entre tanto, el diario inglés The Guardian publicó un editorial donde evaluó el Gobierno de Milei más allá de las cuestiones macroeconómicas, y comentó que “en sus primeros 12 meses, Javier Milei ha impuesto medidas económicas drásticas, lo que ha provocado protestas mientras apuesta por un rescate del FMI“.
Tras reconocer la afinidad ideológica entre el libertario y Donald Trump, indicando que “ambos son outsiders políticos unidos por una retórica de extrema derecha y una inclinación por el capitalismo anárquico”, el portal recordó que:
“Prometió una guerra contra los burócratas, brutales recortes del gasto público y una amplia desregulación de la segunda economía más grande de América del Sur” y remarcó que “como era de esperar, el resultado ha sido devastador: una recesión sumió a más de la mitad del país en la pobreza en los primeros seis meses de 2024“.
“Milei no ganó las últimas elecciones, sino que el gobierno anterior las perdió“, opinaron desde el medio en referencia a la escalada de la inflación durante 2023. Sin embargo, subrayaron que “después de su victoria, la inflación mensual se disparó al 25 por ciento antes de volver a caer por debajo del 3 por ciento en noviembre”.
Por otro lado, indicaron que “como devoto de Milton Friedman, Milei podría afirmar que sus recortes en el sector público fueron dolorosos pero necesarios. Esto está lejos de la verdad”. Al respecto, señalaron que sus políticas provocaron “un aumento en los precios internos mientras utilizaba controles cambiarios para contener mayores presiones inflacionarias”.
“La ironía de desplegar la intervención estatal mientras se defiende el libre mercado pasa desapercibida para los argentinos que luchan por sobrevivir”, ya que “ha habido un costo social muy alto asociado al programa de austeridad”.
Por ejemplo, “la caída de los salarios reales ha dejado a muchos sin poder pagar un seguro médico, lo que ha presionado aún más a los hospitales públicos que carecen de fondos suficientes”.
The Guardian también recuerda el cuantioso préstamo del FMI en 2018, cuando Mauricio Macri recibió 44 mil millones de dólares, y apunta que el libertario “está buscando fondos adicionales para aliviar los controles cambiarios sin provocar una liquidación del peso”.
“Un escenario así podría reavivar la inflación y dañar la popularidad de Milei antes de elecciones clave para el Congreso”, comentó, pero remarcó que “el FMI sigue desconfiando de que sus dólares se utilicen para apuntalar el peso, una táctica utilizada anteriormente por Argentina”, justamente por Luis Caputo.