La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner cuestionó este lunes al fiscal Diego Luciani, a cargo de la acusación en la causa Vialidad, por no replicar los demoledores argumentos de las defensas, que derribaron los alegatos de la fiscalía. Luciani confía más en la parcialidad del “Partido Judicial” que en sus supuestas “pruebas”.
“Vos que escuchaste y viste las audiencias del ‘juicio de vialidad’, donde las pruebas documentales, testimoniales y periciales que exhibimos demolieron las mentiras de los fiscales… Fijate lo que ahora dice Luciani, cuando le toca replicar“, escribió la titular del Senado en Twitter, compartiendo a un video de Luciani al momento de negarse a contestar.
Vos que escuchaste y viste las audiencias del “juicio de vialidad”, donde las pruebas documentales, testimoniales y periciales que exhibimos demolieron las mentiras de los fiscales… Fijate lo que ahora dice Luciani, cuando le toca replicar. pic.twitter.com/aZkRnR7j2n
— Cristina Kirchner (@CFKArgentina) November 14, 2022
Cristina destacó luego las cuestiones que quedaron sin responder por parte de la fiscalía. En este sentido, enumeró:
“Desde reuniones que nunca existieron, hasta registros telefónicos donde sólo aparecen empresarios macristas hablando de licitaciones y redeterminaciones de precios. El Partido Judicial a full“, cerró.
Desde reuniones que nunca existieron, hasta registros telefónicos donde sólo aparecen empresarios macristas hablando de licitaciones y redeterminaciones de precios. El Partido Judicial a full.
— Cristina Kirchner (@CFKArgentina) November 14, 2022
Los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola en realidad necesitaban contestar porque les señalaron sus groseras falsedades.
Por ejemplo, ellos afirmaron que había obras que no estaban en el Presupuesto Nacional de tres años consecutivos y se probó que todas las obras estaban. E incluso la defensa de CFK demostró que en un proyecto de presupuesto de la oposición de Juntos figuraban las mismas obras por los mismos valores.
También la fiscalía afirmó que no se rellenaron los cráteres de los que se sacó la piedra para hacer las bases de las rutas y las defensas hasta mostraron fotos a color de que esos trabajos sí se hicieron. Luciani y Mola prefirieron no responder, porque de lo contrario las defensas iban a seguir exhibiendo más agujeros en la argumentación fiscal.
La admisión de los fiscales de que no van a responder a las cuestiones de fondo contrasta con el pronóstico lanzado este lunes por el sitio Infobae, que adelantó que Cristina será condenada a una pena de entre seis y siete años de prisión, adelantándose así a decisiones supuestamente judiciales, exponiendo que en verdad son mediáticas.
Una mirada a las audiencias o incluso sólo de los alegatos indicaría que la acusación fue destruida. Sin embargo, ante la clara parcialidad de los tribunales de Comodoro Py, la propia Cristina auguró el resultado de esta causa armada: “La condena ya está firmada de antemano”.
Este lunes los fiscales admitieron que no tienen respuesta a los contundentes argumentos de las defensas y que prefieren terminar cuanto antes con la secuencia de refutaciones.
Sucede que Luciani y Mola armaron un show pseudo-judicial para las cámaras de los grandes medios de comunicación los acompañaban. Situación que contrastó con la casi nula cobertura de las refutaciones de las defensas, apenas cubiertas por un puñado de medios.
Durante los años de audiencias -tampoco cubiertas por los grandes medios- el tribunal fue sede de un desfile de testigos que refutaron cada una de las acusaciones de la fiscalía. Motivo por el cual la totalidad de los 13 acusados exigieron la nulidad de la causa por inexistencia de delito.
En verdad, Luciani-Mola debían ceñirse a los pedidos de nulidad, pero usaron nada menos que tres horas y media en las que se salieron de los límites y trataron de mejorar un poco los naufragios del alegato y de todo el juicio.
Eso motivó que algunos de los defensores dijeran que “fue una réplica encubierta”, aunque bastante limitada. En particular, el abogado de Lázaro Báez, Juan Villanueva, pidió responder y el Tribunal compuesto por Rodrigo Giménez Uriburu, Jorge Gorini y Andrés Basso lo autorizó a contestar este viernes, a partir de las 9.30.
En ese momento, se supone que se fijará un cronograma para que los 13 imputados digan sus últimas palabras -si así lo desean- y luego los magistrados darán a conocer el veredicto. Es seguro que en ese proceso Cristina volverá a hablar.
“El alegato de la fiscalía se sostiene en sí mismo. No tenemos nada que replicar”. Así Luciani reconoció que no tiene cómo defender sus acusaciones, pero tampoco lo necesita.
Basta con saber que el juez Giménez Uriburu es su compañero del equipo de fútbol Liverpool, donde el arquero es el juez Mariano Llorens, de la Sala I de la Cámara Federal porteña. Misma sala que liberó a los miembros del violento grupo fascista Revolución Federal, que amenazó con asesinar a Cristina.
Para completar el cuadro, Luciani, Giménez Uriburu y Llorens solían jugar en la quinta Los Abrojos, propiedad de Mauricio Macri.
De allí que la ex presidenta afirmara con seguridad en el video que anunció la recusación de la jueza Capuchetti en la causa por el atentado en su contra, que el “Partido Judicial” no la quiere como víctima, sino “presa o muerta“.