En los próximos días, la Sala de la Cámara Federal, integrada por Leopoldo Bruglia, Pablo Bertuzzi y Mariano Llorens, deberá pronunciarse sobre la apelación que presentó la defensa de Mauricio Macri contra el procesamiento en la causa por espionaje a familiares de víctimas del ARA San Juan.
Anteriormente, y frente a los casos de espionaje ilegal a aliados y opositores del Expresidente (como Cristina Fernández de Kirchner, Horacio Rodríguez Larreta y Diego Santilli), el Tribunal había considerado que los espías habían actuado a espaldas de la conducción de la Agencia Federal de Inteligencia: Gustavo Arribas y Silvia Majdalani.
Sin embargo, la teoría del cuentapropismo luego fue desmentida por los propios espías procesados, quienes explicaron a los jueces y en la Comisión Bicameral de inteligencia que las órdenes de espionaje provenían de sus superiores.
Además, la postura adoptada por Bertuzzi y Llorens se vio aún más cuestionada luego de la aparición del video de una reunión en el Banco Provincia, en la que se encontraban funcionarios de Cambiemos y personal de jerarquía de la AFI. En dicha reunión se habló de una “Gestapo sindical” para perseguir al gremialista Juan Pablo “Pata” Medina.
Ahora, el mismo tribunal deberá definir lo que pasará con el pedido de nulidad que presentó el abogado de Macri, Pablo Lanusse, contra el procesamiento dictado por el juez federal subrogante de Dolores, Martín Bava, en el marco de la causa por espionaje a familiares de víctimas del ARA San Juan.
La defensa de Macri
Durante la audiencia de apelación, Lanusse expresó a través de un escrito que:
“La actuación del Juez Federal subrogante Martín Bava estuvo signada -cuanto menos- de injerencia de factores externos y de intereses políticos que provocan, cuando eso se verifica, que la Justicia asustada, huya por la ventana del templo de los Tribunales”.
En este contexto, consideró que la solución a esta situación sería “sancionar con nulidad todo lo obrado por el nombrado” para “restablecer el valor Justicia y su credibilidad no solo en favor de mi ahijado procesal, sino de toda la sociedad interesada en su recto funcionamiento”.
Asimismo, el abogado defensor consideró que la conducta de Bava estuvo atravesada por “la animosidad, los intereses extra procesales y la funcionalidad del Sr. Presidente de la Nación, Dr. Alberto Fernández“, y argumentó que se trata de una “persecución política contra mi asistido, el Sr. Mauricio Macri“.
De esta forma, el procesamiento caería junto con el resto de las imputaciones sin que el tribunal deba tomar posición sobre la teoría del cuentapropismo que venía defendiendo hasta el momento.
La posición de la querella
Por su parte, la abogada querellante Valeria Carreras recordó el accionar del Tribunal frente a los anteriores casos de espionaje ilegal ocurridos durante el gobierno del Expresidente.
Además, frente al planteo de Lanusse, señaló que Bava ya no está al frente de la causa. El juez había decidido alejarse de ella cuando observo que los expedientes relacionados con el espionaje ilegal llegaban siempre al juzgado de Marcelo Martínez de Giorgi.