Bullrich intenta despegarse de Macri: "En JxC siempre hemos estado presos de él"

Patricia Bullrich intenta pasar de página en la campaña de Juntos por el Cambio y dejar definitivamente atrás el liderazgo de Mauricio Macri. La candidata opositora busca despegarse del fundador del PRO por ser el referente con peor imagen del arco político y por sus constantes coqueteos con Javier Milei. Sin embargo, la ex ministra presenta entre sus eventuales ministros un rejunte de ex funcionarios macristas.

La candidata busca relanzarse con la presentación de su hipotético gabinete, que será una suerte de oficialización del “bullrichismo”. La ex ministra quiere ser la única lider de la alianza opositora, luego de derrotar a Horacio Rodríguez Larreta en las PASO.

La candidata del PRO pretende barrer con la influencia del fundador del partido, y lograr que la lógica partidaria no gire en torno al expresidente Mauricio Macri.

Que se acomode él como crea que se tiene que acomodar”, sentenció Bullrich este domingo.

“Nosotros hemos estado siempre presos en JxC de qué iba a hacer Macri. No tenemos que estar más presos. Macri hará lo que él considera que tiene que hacer. Tenemos que liberar a todo Juntos por el Cambio. Que Macri se acomode como él cree que se tiene que acomodar”, sostuvo la también exministra de Seguridad en Todo Noticias (TN).

“Si no, la campaña pasa a ser una campaña de respuestas y no de propuestas. Tengo que andar respondiendo qué va a hacer Macri. No sé que va a hacer”, se justificó.

El pasado 20 de agosto, durante una entrevista que brindó a LN+, Bullrich se había expresado respecto del lugar que ella creía que el exmandatario debería tener en un eventual gobierno suyo.

“Yo he hablado muchas veces sobre eso con él. No creo que sea la persona para ocupar un cargo público. Es más importante tener a Mauricio como alguien con quien uno puede hablar, como una persona de consulta. Muchos pudimos haber sido ministros en el pasado pero él es el único que estuvo en el sillón”, dijo entonces.

Lo cierto es que Macri presenta un problema mayúsculo para la candidata. El ex presidente no es sólo el político con más alta imagen negativa del país, sino que tras las PASO se convirtió en un abierto operador en favor del candidato “libertario” Javier Milei.

La noche misma del 13 de agosto, el ex mandatario se refirió a Milei como “parte del cambio” que él impulsa.

“Si no gobiernan ellos (el peronismo), ni nosotros (Juntos por el Cambio), gobernaremos nosotros a través de Javier (Milei). Lo importante es el fin del populismo”, confesó el ex mandatario ante empresarios del Círculo Rojo.

La prueba más cabal del impulso de Macri a Milei radica en que el expresidente puso al empresario Pedro “Pierre” Pejacsevich, un amigo íntimo suyo, a recaudar fondos para el libertario.

Pejacsevich es dueño de la consultora financiera T&P Asesores y ahora está recaudando fondos para la campaña de Javier Milei.

La remake macrista

Por estos varios motivos, Bullrich quiere despegarse de Macri y apuesta a una suerte de “renovación generacional” del espacio opositor. La candidata habló de “un nuevo Juntos por el Cambio, con una nueva cara y una nueva propuesta“.

“Estamos armando un nuevo Juntos por el Cambio, que es lo que realmente salió de esta elección”, dijo, dando por sentado que será bajo su conducción. En esa línea, elogió al gobernador electo de Chubut, Ignacio Torres, “que tiene 35 años, es un muchacho joven”, y al radical Maximiliano Pullaro, que viene de ganar las PASO para gobernador de Santa Fe. “Vamos a ser una selección de gente que va a ser la nueva cara de Juntos por el Cambio“, remató.

Con ese fin, esta semana Bullrich también avanzará en los anuncios de su eventual gabinete de ministros. La semana pasada presentó en sociedad a Carlos Melconian como vocero económico y futuro ministro de Economía. Sin embargo, Melconian fue un pedido del propio Macri, y “el Armenio” fue presentado casi como compañero de fórmula de Bullrich.

Resulta que, pese al discurso de intentar diferenciarse de Macri, los nombres que baraja Bullrich para llenar los casilleros de su gabinete son en su mayoría ex funcionarios del ex Boca.

Entre quienes suenan para mostrarse este lunes con la candidata pican en punta los economistas Luciano Laspina, de estrecha relación con Bullrich, y Hernán Lacunza, del larretismo.

También se anotaron Ricardo López Murphy y el radical Martín Tetaz. Habrá lilitos, larretistas puros (Soledad Acuña, Fernán Quirós) y también “peronistas republicanos”, representados por Miguel Ángel Pichetto.

El ADN macrista está presente en casi todos los apellidos. Algunos son fundadores del espacio como Javier Iguacel, quien será vocero del área energética y Andrés Ibarra, que hará lo propio sobre “modernización del Estado”.

Otro ejemplo es Federico Pinedo, el referente en Relaciones Internacionales y que otrora fuera un hombre cercano a Macri.

En relación con los nombres que serán anunciados, estarán Bernardo Saravia Frías, ex Procurador del Tesoro de la Nación (referente de Justicia), Pablo Bereciartua, presidente del Colegio de Ingenieros (Infraestructura), Guillermo Bernaudo, Ex Secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación (Agroindustria), Andrés Ibarra (de viaje ahora) ex ministro de Modernización, entre otros.

De forma paralela, Bullrich adelantó que en los próximos días hará un “inesperado anuncio“.

“Es algo que nadie se imagina. Vamos a armar un sistema que ponga el foco en el ser humano desde una perspectiva en el que todo aquello que tiene que ver con el ser humano, su vida, educación, cultura, bienestar y seguridad están todos bajo la misma filosofía. Este sistema estará a cargo de alguien que no se imaginan“, concluyó para sorpresa del periodista que la entrevistaba en TN.

Mil días prófugo

Mientras Bullrich pretende “pasar la página” macrista -nombrando a varios ex funcionarios de Macri como eventuales ministros-, se cumplieron mil días desde que el ex operador judicial de Cambiemos, Fabián “Pepín” Rodríguez Simón, se mantiene prófugo de la Justicia. En estos mil días, Bullrich jamás se expresó al respecto.

Fabián “Pepín” Rodríguez Simón

Este jueves es el día Nº 1000 de “Pepín” como prófugo de la Justicia argentina, luego de pedir asilo en Uruguay al alegar que era un “preso político” cuando era investigado en tribunales por su rol en torno al desarme del Grupo Indalo de medios, sin que pesara sobre él ninguna orden de detención sino simplemente un llamado a indagatoria.

El exoperador de Macri fue desde abogado en las causas por los Panamá Papers a integrante de la Mesa para apriete de Jueces y Fiscales, una figura clave en la extorsión a la ex procuradora Alejandra Gils Carbó y, además, quien propuso a Macri nombrar a Carlos Rosenkrantz –su amigo- y a Horacio Rosatti en comisión en la Corte Suprema de Justicia.

La justicia argentina lo había citado a prestar declaración indagatoria en la causa por la presunta extorsión a los empresarios del Grupo Indalo, pero frente a las repetidas ausencias lo declaró en rebeldía y lanzó una orden de captura internacional que está frenada hasta que se resuelva el pedido de refugio.

Mientras tanto, Rodríguez Simón reside en Montevideo, donde conserva su banca como diputado del PRO ante el Parlasur. Todavía no se trató un dictamen para expulsarlo del Parlamento del Mercosur, porque no llegaron a juntar los 77 votos necesarios.

No obstante, se pusieron de acuerdo entre legisladores alineados al oficialismo y a la oposición, para firmar un proyecto de declaración exhortando a Rodríguez Simón a presentarse a declarar ante la justicia argentina, algo a lo que hizo claramente hizo caso omiso.

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