Con tres intensas jornadas comenzó el alegato del Ministerio Publico Fiscal en la causa caratulada “Aceituno Raúl y otros s/torturas privación ilegal de la libertad…” donde son juzgados delitos de Lesa Humanidad, atribuidos a la organización paraestatal Triple A en Bahía Blanca.
Los días 15, 16 y 17 de marzo pasados, pudo escucharse la exposición de la Unidad Fiscal de Derechos Humanos bahiense a cargo del Dr. Pablo Fermento, en el marco del juicio que se le sigue a cuatro imputados, por su pertenencia a la banda delictiva Triple A. El alegato se desarrolló en modalidad virtual como sucede desde hace varios meses, y fue transmitido por el canal de Youtube de la Universidad Nacional del Sur.
Fue seguida desde sus domicilios por los cuatro acusados, Raúl Roberto Aceituno, único acusado por homicidio, Juan Carlos Curzio, Héctor Ángel Forcelli y Osvaldo Omar Palleros, los cuatro imputados por asociación ilícita.
Antes del comienzo del alegato, el Tribunal resolvió la incorporación por lectura a la causa de tres testimonios de personas fallecidas o imposibilitadas de declarar: René Bustos, Silvia Morales y Miguel Puig. Esta incorporación de valiosos testimonios había sido pedidos por Fiscalia y Querella, con la negativa de la defensa.
Justicia para abrir caminos
En su introducción, el fiscal Fermento resaltó que se investigan 24 asesinatos alevosos y con ensañamiento cometidos en menos de dos años, 1974 y 1975, donde se “naturalizó” la muerte y la impunidad por falta de juzgamiento durante cuatro décadas y media, de dichas muertes, y adhirió al pedido de disculpas del tribunal poresta tremenda demora.
La demora no fue inocua, ya que hizo perder en el camino mucha prueba y también muchas personas: victimas, familiares y responsables de los crímenes. Tan sólo en el transcurso del debate fallecieron cinco testigos: Marta Favini de Gini, Miguel Ángel Pereyra, Eugenio Navarrete, Víctor Basterra y Jorge Bernardi.
“Además se perdió algo fundamental, como es el debate como sociedad sobre lo que sucedió en un periodo histórico muy doloroso del país y la ciudad, debate en el que la justicia estuvo ausente, y lo que quedo de la falta de debate colectivo, es el silencio y el miedo. Un miedo que vimos atravesar cada una de las audiencias testimoniales, porque a pesar del medio siglo, el miedo sigue vigente y se actualiza.
Esta parte de la historia que fuimos recorriendo de la ciudad de Bahía Blanca es una parte censurada, porque, así como el brazo genocida clausuro espacios sociales, también se clausuraron las representaciones de lo sucedido. De todo lo que escuchamos en las audiencias se sabe mucho, pero se habla muy poco, aun en la actualidad"
“Quiero decirle a los señores jueces que en este juicio estamos asistiendo a unas de las primeras instancias institucionales , tal vez la primer en la ciudad de Bahía Blanca en la que muchos de los que vivieron la violencia y las muertes, pudieron superar el silencio y el miedo para poder contar su verdad y reclamar justicia con valentía y coraje y no tenemos dudas que la sentencia que ustedes van a escribir va a ayudar a abrir caminos en el proceso colectivo de Memoria Verdad y Justicia y en la recuperación del sentido histórico tanto del país como la comunidad bahiense”.
Ponce y los Massot, juntos por la “limpieza”
El fiscal comienza advirtiendo que una de las tramas de este juicio, es la alianza entre el diputado nacional Rodolfo Fito Ponce, líder de la Patota Triple A en Bahía Blanca y la Familia Massot, desplegada desde las mismas editoriales del diario La Nueva Provincia como también en publicaciones con la palabra de Ponce:
“Los Massot y Ponce actuaban en tándem y de manera combinada” explica Fermento, como lo fue para exigir la “limpieza” de la Universidad Nacional del Sur de elementos “marxistas apátridas” o “foráneos”.
Con estas notas el diario se adelantaba a lo que iba a suceder, es decir ya sabía que iban a ocurrir los asesinatos de muchas de las víctimas de este juicio:
“No quedan dudas del rol que jugo La nueva Provincia como factor de Poder en la ciudad para generar este punto de inflexión que significo la llegada Remus Tetu al rectorado, para la política de represión y aniquilamiento”.
El miedo, el silencio y los olvidos convenientes, amparaban los crímenes cometidos en ese momento, donde la lógica represiva paraestatal, actuó como antecesora de la posterior lógica represiva concentracionaria.
Presencia de la Banda paraestatal de Este a Oeste
Luego de la introducción, en un segundo tramo, el Fiscal desarrolló las líneas represivas y las relaciones entre la Triple A, los servicios de Inteligencia y su integración a la estructura estatal.
En una exhaustiva línea de tiempo se recorrió la penetración realizada por la Banda paraestatal en ámbitos estudiantil y gremios, como también los primeros asesinatos perpetrados.
El recorrido incluyó la intervención en la UOCRA, la toma de la Universidad Tecnológica Bahía Blanca, como también de otras universidades como La Pampa, Mar del Plata, Comahue, La Plata y Buenos Aires. En todos los casos y lugares con las mismas características criminales.
Posteriormente al momento de desarrollar las características de esta asociación ilícita, de la cual los cuatro imputados formaron parte, puntualizó como era llevado a la práctica el acuerdo criminal de todos los integrantes.
Se trataba de una organización de entre 20 y 40 miembros, los cuales compartían diferentes ámbitos, como gremial, universitario y el de patrullaje de las calles a bordo de la famosa “fiambrera” y otros vehículos.
Los cuatro acusados aquí juzgados, eran parte contratada del cuerpo de “seguridad” de Remus Tetu, interventor de la UNS. A dicha pertenencia se le suma una amistad, que hacía que se los viera por las noches en lugares de diversión nocturna, boliches o cabarets, contando sus hazañas de asesinos a cuanto quisiera escuchar.
Los rituales del crimen
Por último el Dr. Fermento se refirió a los asesinatos en concreto cometidos por la banda, los cuales caracterizo como “asesinatos rituales” perpetrados para transmitir terror y disciplinamiento, donde existía un patrón a seguir como los secuestros nocturnos de las víctimas, las torturas, el acribillamiento con numerosas cantidad de proyectiles y la aparición de los cadáveres a los costados de las rutas.
La semana de alegatos cerró con el desglosamiento del crimen de dos de las víctimas en esta causa, el asesinato del estudiante David Watu Cilleruelo y del bioquímico y docente Rodolfo Celso Gini.
La abundante documentación de inteligencia sumada a las contundentes declaraciones de testigos y familiares, deberán ser decisivos para la condena de los integrantes de la banda.
Las fechas siguientes
La próxima audiencia será el día lunes 22 de marzo desde las 8.30hs y se presume que el Ministerio Publico Fiscal culminara su alegato con el pedido de penas correspondiente.
Posteriormente, en las fechas que el Tribunal considere, comenzará el alegato de la Querella de este juicio a cargo de la Dra. Mónica Fernández Avello en representación de la Agrupación H.I.J.O.S. Bahía Blanca.