En estas nuevas jornadas del Centro de Estudios Bahía Bicentenario, disertaron los arquitectos José Zingoni y Roberto Monteverde, el ingeniero civil Horacio Varela y la arquitecta Rosana Vecchi, bajo el lema "hacia una ciudad inclusiva". El encuentro se realizó en las instalaciones de la Universidad Tecnológica Nacional y contó con una nutrida participación.
Zingoni y el urbanismo táctico
El primero en tomar la palabra fue el director de la carrera de Arquitectura de la Universidad Nacional del Sur, arq. José María Zingoni quien se refirió al concepto de "urbanismo táctico" y su aplicación en concreto con el Programa White 2020. Por urbanismo táctico se entiende la "planificación para intervenir en el corto plazo".
En su aplicación justamente hay que definir en primera instancia dónde invertir y en ese sentido, Zingoni señaló que habría que hacerlo en los sectores más postergados. Incluso manifestó que los presupuestos públicos deberían ser más que una planilla de cálculo y estar georeferenciados para que permitan exhibir adónde van los recursos.
Yendo a la cuestión especifica de White, indicó que las vías del ferrocarrill separan sectores e identidades diferentes y que deben ser potenciadas e integradas conjuntamente. También se refirió a las intevenciones en Av. Dasso, que incluyen no sólo la pavimentación sino la vereda peatonal, una bicisenda y un puente peatonal que lo cruza. También se refirió al postergado barrio Saladero y a los trabajos de pavimentación y recuperación del espacio como lugar de esparcimiento y encuentro, así como a la recuperación de la capilla San José Obrero, ícono del barrio.
Finalmente se refirió al frente marítimo y su importancia para la identidad de la ciudad toda. Entre otras cosas, destacó que está siendo licitada la obra del ingreso, la parquización aledaña y destacó que si se toman conjuntamente el espacio incluyendo la usina, podría generarse un paseo público de unos 700 metros, compartable en extensión con el Paseo de las Esculturas.
Vecchi: urbanismo y políticas de suelo
La ponencia de la arquitecta Rosana Vecchi respondió a la pregunta ¿de qué hablamos cuando hablamos de una ciudad inclusiva? En ese sentido remarcó que Argentina es uno de los mejores países en lo ateniente a calidad de vida pero que a su vez se trata de un país muy desigual, según indica el índice de GINI.
"Argentina no es pobre, es desigual... hay pobreza por que hay desiguladad" remarcó y señaló el dualismo que se genera en nuestras ciudades y en Bahía Blanca en concreto a partir de la gentrificación y la fragmentación socio-espacial. Ahí es justamente donde Vecchi señala que es necesario el rol del Estado para igualar oportunidades.
Para esto es necesario que el Estado planifique políticas públicas, concretamente políticas urbanas y más específicamente políticas de suelo, que son potestad de los estados municipales. En ese sentido, repasó los exitosos casos de intervención estatal urbana en Dallas y Bogotá, para luego referirse al caso de Bahía Blanca.
Bahía Blanca es una ciudad que no es ni segura, ni inclusiva ni compacta. Hay tres zonas bien diferenciadas como el centro, la zona norte residencial y el la zona sur, de carácter lógistico-portuario. Esto produce a su vez segregación social en tanto que aquellos ciudadanos que ocupan una zona no urbanizadas caen en una "trampa de pobreza" de la que muchas veces es difícil salir y que potencia esa misma segregación.
La pista para solucionar esta situación es -según Vecchi-"coser la ciudad" encontrando puntos para operar e intevenir justamente con políticas de suelo.
Varela y la cuestión de la movilidad
El ingeniero civil Horacio Varela se refirió a la cuestión de la "movilidad urbana", a la que definió como aquello que da vida a la ciudad. Sobre el inicio de su ponencia destacó que en 1970, Bahía Blanca tenía 3.400 hectáreas y 160 mil habitantes, y en 2019 ya tiene más de 10.000 ha y 300 mil habitantes. Actualmente sólo el 42% de las calles están pavimentadas.
Además resaltó que en sus inicios el corazón de la ciudad eran los Talleres Noroeste pero luego, con el desarrollo del puerto de Ingeniero White como puerto de aguas profundas, se cuadruplicaron los puestos de trabajo en la zona, la mayoría de ellos calificados y de alto poder adquisitivo.
También en los 90s, la apertura de Cabrera, permitió que mucha de esa gente se fuera a vivir a la zona note de la ciudad, que ahora tenía una vía directa al centro. A su vez, esas familias pudientes comenzaron a requerir -por ej- trabajo doméstico de personas que vivían en la zona sur de la ciudad, provocándose un gran flujo de personas entre el Norte y el Sur de la ciudad.
Varela también criticó que las 18 líneas de transporte converjan en el centro y especialmente en calle Chiclana, compitiendo entre sí. También señaló la altísima tasa de motorización de Bahía Blanca, con 180 mil autos para 300 mil habitantes, muy por la media del país y cercana al índice que se registra en Italia.
Como propuesta convocó a pensar un nuevo modelo de gestión del transporte público mediante un consorcio de gestión y una tasa de transporte que se pague junto al ABL. La justificación es que el 25% más vulnerable de la ciudad es la que lo usa prioritariamente y que pagando el 50% de su costo (la otra mitad está subsidiada) permite que el resto de los ciudadanos dispongan del colectivo.
También se refirió a la necesidad de promover el uso de la bicicleta, arraigado en la cultura ferroviaria de nuestra ciudad y lo perjudicial que resulta la superpoblación de automoviles, no sólo en polución sino también en congestión. El 25% de los bahienses en auto ocupan el 75% del espacio céntrico, según explicó, a la vez que el 35% de los habitantes de la ciudad llegan al centro caminando. Sobre el cierre definió la planificación como la "decisión política de consensuar el crecimiento".
Monteverde: Planificación con Compromiso Social
Por último, el arquitecto y urbanista rosarino Roberto Monteverde se refirió a la importancia de las políticas urbanas y a la planificación como herramienta de integración socio-urbana.
En ese sentido, tomó como ejemplos el caso de Medellín, Rosario y Cipolleti, mostrando cómo diversas intervenciones permitir pasar de ciudades fragmentadas a una ciudad cohesionada.
El caso paradigmático es el de Medellín, donde el 60% de los barrios eran considerados "subnormales" y estaban segregados a partir de los niveles de violencia e inseguridad que se vivía en ellos.
Para revertir la situación se hizo una apuesta fuerte en educación en los puntos más vulnerables. Se trató de una intervención multimodal, incluyendo a la población del barrio, por ej, como "guardianes del espacio público" con el fin, justamente, de velar por ese mismo espacio público. Como resumen, señaló la necesidad de "criticar el presente", con un "imaginario de futuro" y una "modalidad de actuación".
La palabra del senador Susbielles
Sobre el final de las ponencias técnicas tomó la palabra el presidente del Centro de Estudios, el senador provincial Federico Susbielles, quien destacó que estos encuentros "generan un montón de conceptos y un impacto fuerte que a uno lo hace pensar en la ciudad que añoramos". Cabe recordar que Susbielles es candidato a intendente y está abocado a la construcción de un frente político amplio y con un fuerte arraigo bahiense.
Hace unos meses cuando pensamos en esta plataforma de pensamiento, Bahia Bicentenario, teníamos la presunción de que Bahía Blanca y sus actores sociales y técnicos tenían la necesidad de participar, de discutir de proponer... La verdad que aquellos que pensamos fue excedido por la realidad.
En ese sentido, remarcó que "es hora de que nos demos la tarea de dar una respuesta colectiva, a la altura de las respuestas individuales y los liderazgos individuales que esta ciudad ha dado a lo largo de su historia".
