En una entrevista para un medio local, el intendente de Bahía Blanca, Héctor Gay, se despachó en duros términos contra la Ley Impositiva bonaerense, a la que tildó de “abusiva” y también calificó de “extorsión” la actitud del gobernador Axel Kicillof.
La ley actualiza los tributos provinciales para que sigan la inflación de 2019 y sólo propone aumentos mayores para 200 terratenientes que poseen más de 2.000 hectáreas.
Durante sus años de profesión periodística, Héctor Gay se caracterizó como por ser el vocero y defensor del poder instituído de la ciudad de Bahía Blanca. Ahora, como intendente, mantiene su coherencia y se posiciona claramente a favor de las 200 familias de terratenientes que condicionan las cuentas de la provincia en un acto de rebeldía fiscal.
En declaraciones a Café por Medio, el intendente macrista manifestó que “hay muchas cosas para discutir” respecto de la Ley Impostiva que Axel Kicillof giró a la Legislatura Bonaerense, que según el jefe comunal bahiense “en algunos aspectos parece abusiva”.
Además se refirió a la reunión pautada para el día 2 de enero, en la que Axel Kicillof recibirá a los intendentes de la oposición. Gay mismo participará de la reunión que será el jueves a las 11 en Casa de Gobierno.
“Si nos pide que le pidamos a nuestros legisladores que la aprueben, en esos términos, sería una extorsión porque tampoco se puede aprobar a libro cerrado cuestiones que están muy complicadas porque hoy hay algunas cuestiones que podés discutir”.
Cabe recordar que Axel Kicillof manifestó en una entrevista televisiva que la oposición no tenía un interlocutor claro, en tanto la ex gobernadora se encuentra de vacaciones en París y hacia dentro de Juntos por el Cambio no hay un liderazgo definido.
El gobernador además precisó que buscaron consensuar hasta el último momento, pero que los senadores de Cambiemos “dinamitaron” la mesa de negociación.
Gay además advirtió que por una “voracidad de recaudación” existe la posibilidad de que “perdamos competitividad” y agregó: “Entonces, hay muchas cosas para discutir respecto de una ley fiscal impositiva que en algunos aspectos parece abusiva”.
Sin embargo, evitó referise al Pacto Fiscal firmado por las y los gobernadores en 2017, incluyendo a María Eugenia Vidal, que significó la desfinanciación de la provincia.
El rojo fiscal generado en las provincias por este fallido acuerdo fue tal que las y los gobernadores, incluyendo los de Juntos por el Cambio, le pidieron a Alberto la suspensión del acuerdo para intentar reducir el déficit de sus provincias.
Finalmente, Gay se refirió al supuesto impuestazo del 75% en el imboliario rural y señaló que le parecía producto “quizá por el apuro y la necesidad de cubrir fondos” y que “no hay un cabal conocimiento de lo que es la provincia en sí, sobre todo, el interior”.
Sin embargo, el aumento del 75% sólo correrá para 200 terratenientes con más de 2.000 hectáreas y campos con un valor superior a $3.000.0000 en su valuación fiscal, no de mercado.
Por el contrario, el proyecto de ley define 3 categorías de aumento por debajo del 75%, una al 55% que significa cero aumento real, porque solamente aplica la actualización de los montos según el nivel de inflación que dejó Mauricio Macri en su último año de gobierno.
Además, las dos categorías inferiores le permitirán a los pequeños productores tener un alivio económico, en tanto la actualización será de 15% y 35% según la escala, es decir 40 o 20 puntos por debajo de la inflación.
Como si fuera poco, las propiedades de hasta 100 héctareas dedicadas a la producción tambera y las de hasta 50 hectáreas dedidas a la producción agropecuaria gozarán de excenciones impositivas.
Dejando de lado el análisis fino de la normativa, Gay prefirió señalar que “no es lo mismo 2.000 hectáreas en Patagones que en Pergamino”, desconociendo que solamente 200 familias de la alta sociedad poseen esa cantidad de tierras, que les permiten abultados ingresos y una capacidad contributiva extraordinaria con la cual hacer frente al tributo.
Para intentar fundamentar su oposición automática al proyecto del oficialismo, Gay fue un paso más y lanzó una pregunta retórica:
“Además es hasta contradictorio, vos decís, bueno, vamos a mejorar las inversiones, la productividad, ¿y cómo mejorás la productividad si arrancás con un gran impuesto a todos los que producen, justamente?”
Sin embargo, como se explicó más arriba, los únicos que pagarán un monto real mayor por este concepto será quienes tengan 2.000 hectáreas o más.
¿El resto de las y los productores bonaerenses no producen? Parece que no, o que al intendente macrista poco le importa. No sería la primera vez que Gay, como en sus épocas de periodista del procesista Grupo Massot, entiende que “el silencio es salud”.
No le pareció “abusivo” ninguno de los tarifazos que impulsaron Mauricio Macri y María Eugenia Vidal y que alcanzaron montos desorbitantes, como por ejemplo, el de la tarifa eléctrica que en cuatro años subió un 3.800%.
Sin ir más lejos, en el distrito donde gobierna, la tarifa de transporte urbana aumentó en sólo tres años y medio más 450% y como si fuera poco, este jueves Gay se negará a congelar por 180 días la tarifa del servicio urbano de transporte, tal como se realizó en el ámbito metropolitano.
El último incremento del valor del boleto se realizó en una sesión irregular del Concejo Deliberante, en la que el presidente del cuerpo decidió unilateralmente cerrar el recinto a la ciudadanía que se acercó a manifestarse en contra.
Además, el entonces presidente del deliberativo, Nicolás Vitalini, utilizó el “doble voto” para aprobar la ordenanza, que no sólo aumentaba la tarifa sino que habilitaba al departamento ejecutivo a realizar un “aumento automático” a mediados de este año.