El Concejo Deliberante de Bahía Blanca aprobó por mayoría un aumento del 26% en la tarifa del transporte público de pasajeros, llevando la la tarifa plana será a $59,40. La aprobación fue posible gracias a los votos del bloque de Juntos por el Cambio y de la concejala Gabriela Schieda, que a pesar de haber dejado el bloque oficialista en 2018 con críticas a la política tarifaria del entonces gobierno, levantó la mano para aprobar un nuevo boletazo y blanquear su regreso a Cambiemos.
Con la aprobación de la ordenanza resta ahora que el intendente Héctor Gay promulgue la ordenanza, y luego, que el sistema SUBE ajuste el nuevo cuadro tarifario que sitúa al transporte público bahiense entre los más caros del país.
El rechazo del Frente de Todos
Desde el principal bloque opositor no acompañaron el aumento, argumentando que la suba perjudica a las y los usuarios y criticando con datos duros la política de transporte del intendente Héctor Gay.
El encargado de expresar el rechazo fue el edil Pablo Rosenfelt quien llamó la atención sobre los desmedidos aumentos en materia de tarifa de colectivos que se vienen dando desde la asunción del intendente PRO.
“¿Sabe cuánto aumento la tarifa desde que Gay es intendente? El 813% (…) el intendente Gay en cinco años, está en casi el 50% de los aumetos que sufrió la ciudad de Bahía Blanca en 20 años”.
En contraposición, recordó que durante la gobernadora María Eugenia Vidal congeló los subsidios en 293 millones de pesos, mientras que la gestión del Gobernador Axel Kicillof llevó los subsidios a 472 millones de pesos en diciembre de 2019 y actualmente, según se consigna en el estudio de costos, treparon a nada menos que 612 millones de pesos.
“En materia de transporte la política de Héctor Gay ha fracasado” concluyó su intervención.
La “corruptela” con SAPEM Transporte
Por otra parte, cabe recordar que todavía está fresco el escándalo por el traspaso irregular de dos de las líneas más rentables que tenía la empresa mixta SAPEM Bahía Transporte. Como señaló en su momento el concejal Walter Larrea, el traspaso que benefició a la empresa privada San Gabriel implicó la venta a precio irrisorio de 17 unidades de colectivo, con una financiación que no existe en el mercado de crédito argentino.
Larrea es también Director de la SAPEM transporte y exigió precisiones sobre la operación a la sindicatura de la firma, que hasta ahora no fueron respondidos. Además, el edil peronista realizó una presentación pendiente ante el Tribunal de Cuentas bonaerense para que se expida sobre la legalidad de la operación, que fue denunciada como corruptela en un comunicado del bloque.
Schieda le evitó el doble voto a Compagnoni
Este nuevo aumento del boleto de colectivo es el primero en 4 años que pudo ser aprobado con un voto ajeno al bloque del oficialismo local.
Efectivamente, la última vez que Héctor Gay había logrado el acompañamiento de otras fuerzas fue en 2017 cuando logró el acompañamiento de los ediles del Frente Renovador, Ricardo Pera y Roberto Ércoli, así como de Vanina González, otrora renovadora que posteriormente hizo rancho aparte.
En ese entonces los votos del Frente Renovador se explicaban por la pertenencia al bloque de Julián Lemos, que se abstuvo de votar por ser un beneficiario directo del aumento del boleto por ser empresario del rubro.
También hay que recordar que Pera, Secretario General de la UTA bahiense ha sido un férreo defensor de los boletazos como forma de “cuidar el bolsillo” de los trabajadores de su gremio. Finalmente, tras su salida del Concejo, Vanina González pasó a ocupar cargos en el Municipio, siendo hoy la Secretaria de Políticas Públicas.
Posteriormente, tanto en 2018 como en 2019, los aumentos planificados para fin de año no alcanzaron los consenso y se votaron en enero del año siguente; en 2020, el entonces presidente del Concejo Deliberante, Nicolás Vitalini, no tuvo problema en pasar por encima del reglamento del cuerpo y prohibir el ingreso de las y los vecinos reunidos afuera del deliberativo, protestando contra otro aumento.
En 2020, tanto el bloque del Frente de Todos como la concejala Schieda se negaron a dar quórum para el aumento del boleto, pidiendo más tiempo para lograr consensos. Sin embargo, antes esta situación, Vitalini, ahora jefe de bloque de Juntos por el Cambio, y el presidente del Concejo, Fernando Compagnoni, también de Cambiemos sentaron como concejal a una reemplazante de Schieda, a pesar de que la edil ya no era parte del bloque oficialista.
Las convicciones “radicales” de Schieda
No obstante, cabe recordar que el monobloque UCR Illia integrado por la edil Schieda, es un desprendimiento de Juntos por el Cambio.
Schieda había sido electa en 2017 tras figurar en el sexto lugar de la boleta de concejales de Juntos por el Cambio en representación del radicalismo y en 2018 se separó del bloque con duras críticas al intendente Héctor Gay en particular y a Cambiemos en general, especialmente contra la política tarifaria.
En ese entonces, la concejala se definía como “radical pura” y despotricaba contra los “radicales teñidos de amarillos”. Pero en la cancha se ven los pingos, dice el refrán, y hoy Schieda se puso la casaca amarilla. ¿Querrá seguir los pasos de Vanina González?