Carlos Stornelli faltó nuevamente a la citación a indagatoria en el juzgado de Dolores, en la que debía declarar por sus conexiones con la banda de espionaje ilegal comandada por Marcelo D’Alessio.
Es la quinta vez que evade a la justicia, esta vez luego de la que Cámara de Mar del Plata ratificara que está en rebeldía.
El fiscal de Comodoro Py lleva ya 65 días en rebeldía y debía responder las siguientes cuestiones:
- Amenazas al ex gerente de Pdvesa, Gonzalo Brusa Dovat: D’Alessio lo coaccionó con la promesa de armarle una causa en el fuero Penal Económico y obligándolo a declarar ante Stornelli. El abogado trucho estuvo presente dentro de la fiscalía de Stornelli, igual que el periodista de Clarín, Daniel Santoro.
- Solicitud de cámaras ocultas de modo ilegal a los abogados José Manuel Ubeira y Javier Landaburu, defensores en la causa de las fotocopias. El celular de D’Alessio, obtenido en un allanamiento, contiene diálogos con Stornelli al respecto.
- Espionaje ilegal al ex marido de la actual pareja de Stornelli, Jorge Castañon: D’Alessio le ofreció plantarle cocaína en una valija. Castañón declaró como testigo y brindó datos incluso de la relación entre Stornelli y Macri para desactivar la causa de Dolores.
- Espionaje ilegal internacional: intentaron vincular a empresarios uruguayos con una causa de terrorismo con el objetivo de impedir una operación comercial. También denunciaron espionaje contra legisladores del Frente Amplio.
- Intimidación y extorsión a Pablo Barreiro: se trata del hijo de un imputado y detenido, que declaró ante Stornelli que lo estaban persiguiendo y el fiscal desechó la declaración.
- Extorsión a empresarios: la más conocida fue la que inició la investigación, la extorsión de D’Alessio a Pedro Etchebest, pidiéndole 300 mil dólares a cambio de que Stornelli no lo impute en la causa de las fotocopias.
- Amenazas a Gerardo Ferreyra, uno de los dueños de Electroingeniería: Stornelli le pidió que declare como arrepentido contra “los mugrientos que estuvieron en Casa Rosada”. Ante la negativa de Ferreyra, Stornelli le dijo “si no podés arrepentirte, irás a la cárcel”
La “Operación PUF”
Hasta ahora, la única defensa ensayada por el rebelde Carlos Stornelli ha sido completamente a través de los medios de comunicación. En abril, su abogado Roberto Ribas manifestó en un show televisivo que los chats entre su defendido y D’Alessio eran falsos. No obstante, el fiscal se negó a entregar su celular para comprobarlo.
Sin embargo, la embestida más fuerte contra la causa de Dolores llegó en la forma de la “Operacion Puf”, consistente en la utilización de escuchas ilegales realizadas por el hijo de Stornelli, Mateo Nicolás Stornelli. Esta operación se ensayó en febrero y no tuvo éxito. Sin embargo, más recientemente, Lanata las refritó y logró cierto impacto mediático sumado a una avanzada contra el juez de Dolores, Alejo Ramos Padilla, en el Consejo de la Magistratura.
Las escuchas, como mostró el periodista Ari Lijalad en El Destape, fueron ordenadas por el Juzgado Federal en lo Criminal y Correcional N 2 de Lomas de Zamora, que está a cargo interinamente de Federico Hernán Villena, en el marco del Caso Aguape III, causa número 41.475/2016, en la que se ordenó monitorear las comunicaciones relacionadas con Mario Segovia, conocido como el “Rey de la efedrina”.
En primer lugar, la conversación de Baratta es varios días posterior a la denuncia y a los pedidos de medidas que realizó el juez Ramos Padilla, a quien le tocó intervenir sólo por el hecho de que su Juzgado en Dolores tiene jurisdicción sobre Pinamar, lugar donde se produjeron las reuniones -probadas mediante fotografáis- entre Stornelli y D´Alessio a las que fue citado Etchebest.
Las transcripciones que llegaron de manera “anónima” a Carrió en las que Baratta conversa con el abogado Carlos Zelkovicz son del viernes 1 de febrero, mientras que la radicación de la denuncia, el impulso penal y las primeras medidas de prueba datan del lunes 28 y el martes 29 de enero. De hecho, Etchebest se constituyó como querellante este último día.