Se recrudece la crisis al interior de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. La jueza Elena Highton de Nolasco presentó su renuncia al Presidente Alberto Fernández.
En una carta fechada el 30 de septiembre, la ministra le informó al presidente de la Nación, Alberto Fernández, que dejará el máximo tribunal de Justicia el próximo 1° de noviembre.
“Tengo el agrado de dirigirme al Señor Presidente de la República con el objeto de presentar mi renuncia al cargo de Jueza de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, con efectos a partir del 1 de noviembre del corriente año”, comunicó la magistrada.
“Saludo al Señor Presidente con las expresiones de mi consideración más distinguida”, completó.
Molesta por la falta de consenso, Highton de Nolasco fue una de las magistradas que no participó de la audiencia en la que se designó como nuevo presidente de la Corte a Horacio Rosatti.
Fue Highton de Nolasco la que pidió formalmente postergar el encuentro donde Rosatti se autovotó como nuevo titular del máximo tribunal y, como no le dieron lugar al pedido, furiosa y en solidaridad con su colega, decidió no participar.
La fractura de la máxima instancia del Poder Judicial pone al descubierto una grave crisis que atraviesa el Poder más cuestionado de la República.
Highton de Nolasco fue designada en 2004, tras una propuesta del entonces presidente Néstor Kirchner luego de la destitución de Eduardo Moliné O’Connor.
El 9 de junio de aquel año fue designada ministra de la Corte tras ser aprobada su candidatura con 51 votos afirmativos y 5 negativos.
Y el 1° de septiembre de 2005 fue elegida vicepresidenta del Máximo Tribunal, tras la renuncia del juez Augusto Belluscio.
Con la salida de Highton de Nolasco, se abre una puerta para que el Poder Ejecutivo proponga a un nuevo integrante del máximo tribunal, que vive una situación particular luego de la reciente renovación de autoridades.