El presidente Javier Milei se encuentra en el centro de un escándalo internacional tras haber promocionado una criptomoneda conocida como $LIBRA que fue utilizada para cometer un fraude, provocando pérdidas millonarias entre inversores, muchos de ellos sus fánaticos seguidores en redes sociales.
Según estimaciones, más de 40.000 personas perdieron un total de 87 millones de dólares tras confiar en la recomendación del mandatario argentino que se vanagloria de merecer un premio Nobel como economista.
Luego de sostener durante horas su respaldo al proyecto, Milei eliminó el tuit original donde lo promovía, culpando a “la casta” por los cuestionamientos recibidos y desentendiéndose del caso.
La maniobra detrás de la promoción
Todo comenzó cuando Milei compartió un mensaje en su cuenta oficial en X recomendando invertir en $LIBRA , una criptomoneda vinculada al proyecto denominado “Viva la Libertad Project” . En su publicación, el presidente destacó que esta moneda digital serviría para financiar pequeñas empresas y emprendimientos argentinos, describiéndola como una herramienta innovadora dentro del ecosistema cripto.
Sin embargo, expertos y usuarios rápidamente identificaron a $LIBRA como una shitcoin , término utilizado para referirse a criptomonedas sin sustancia real, propósito claro o valor intrínseco, creadas generalmente para engañar a inversores inexpertos.
La maniobra detrás del proyecto fue meticulosamente orquestada. Según análisis especializados en plataformas como Dune, el token fue diseñado para atraer a inversores desprevenidos que confiaron en la palabra del presidente. Una vez que el interés generado por el tuit de Milei provocó un aumento exponencial en el precio del token, los creadores de $LIBRA ejecutaron lo que en el mundo cripto se conoce como un “rug pull” : vendieron masivamente los tokens que habían emitido a costo cero, drenando las reservas de liquidez y dejando a los inversores con activos sin valor .
El propio Milei fijó el tuit en el tope de su cuenta de X, que cuenta con 3.8 millones de seguidores , durante más de cuatro horas. Este tiempo fue suficiente para que miles de personas transfirieran sus ahorros a billeteras virtuales controladas por los creadores del proyecto, quienes hasta ahora permanecen desconocidos.
Según datos revelados por expertos en criptomonedas, el 84% de los tokens estaba concentrado en manos de solo 10 usuarios, evidenciando la falta de transparencia y legitimidad del proyecto.
Milei se desentiende de haber participado en la estafa
Tras el colapso del valor de $LIBRA y las críticas generalizadas, Milei intentó desvincularse del episodio. En un nuevo tuit, afirmó que no estaba “interiorizado de los pormenores del proyecto” y que, tras investigarlo, decidió eliminar su promoción inicial. Además, acusó a “las ratas inmundas de la casta política” de querer aprovechar la situación para atacarlo.
Sin embargo, este gesto no logró calmar la indignación pública ni evitar que figuras políticas y especialistas pidieran explicaciones formales.
Lo llamativo es que, antes de borrar el tuit, Milei no solo mantuvo el posteo fijado durante horas, sino que también lo reprodujo en su cuenta de Instagram y confirmó su respaldo en un chat con Bloomberg Línea, asegurando que “el proyecto es real e implica puro financiamiento privado”.
Esta contradicción alimentó aún más las sospechas sobre su participación directa o indirecta en la maniobra.