La expulsión del senador Kueider configura un nuevo capítulo de alejamiento entre Milei y su vicepresidenta en medio de un escándalo de contrabando protagonizado por el -ahora ex- legislador, que podría derivar en una denuncia contra Victoria Villarruel.
El Senado de la Nación definió este jueves la expulsión del senador aliado de La Libertad Avanza, Edgardo Kueider, quien se encuentra detenido en Paraguay por intentar ingresar más de 200 mil dólares sin declarar. Adicionalmente, la sesión donde se substanció la salida del senador entrerriano de la Cámara Alta profundizó el quiebre entre entre el presidente Javier Milei y su vicepresidenta Victoria Villarruel.
Desde Casa Rosada aseguran que Villarruel estuvo al frente de la sesión mientras Milei se encontraba en Italia reuniéndose con la primera ministra Giorgia Meloni, cuando debía estar al frente del Poder Ejecutivo (y no del Senado) como Presidenta interina. Sin embargo, desde el entorno de la vicepresidenta sostienen que Villarruel nunca recibió una notificación oficial.
El vocero presidencial Manuel Adorni y fuentes de la escribanía general manifestaron que Villarruel conocía las fechas de partida y regreso de Milei. En contraste desde la Cámara alta argumentan que el escribano se presentó recién a las 19 horas, para la firma del traspaso, dejando un vacío de varias horas.
El constitucionalista Andrés Gil Domínguez señala que, al no existir un traspaso formal, técnicamente no se produjo una simultaneidad de cargos que invalidara la sesión.
Como sea, la situación tensiona aún más la relación del presidente Javeir Milei con quien fuera su compañera de fórmula hace poco más de un año. Las consecuencias políticas son inmediatas.
El diputado PRO Damián Arabia, mano derecha de la ministra Patricia Bullrich, acusó a Villarruel de “usurpación de cargo“. Los trolls de Casa Rosada la señalan por incumplimiento de deberes, mientras su control sobre el Senado se desmorona en pleno inicio del año electoral.