Sergio Massa es hoy por hoy precandidato presidencial por Alternativa Federal, el armado del peronismo antikirchnerista. Sin embargo, hace tiempo que vine realizando acercamientos con el espacio que conduce Cristina Fernández de Kirchner y hay quienes aventuran que ya tendría un acuerdo con el kirchnerismo que se daría a conocer por estos días.
En ese contexto, el ex ministro de economía Roberto Lavagna, analiza la situación política, viendo que no logra crecer en las encuestas y que por tanto, tiene como opciones: o bien declinar su candidatura, o bien aceptar competir en las PASO, o bien hacer un papelón similar al que realizó Randazzo en 2017. “Podría irle peor que a Florencio” comenta off the record un dirigente de peso en la provincia.
Los allegados al economista de las chancletas señalan que hay evidencia de la negociación entre CFK y Massa: los dichos de Alberto Fernández que pide el pacto entre ambos, los gestos de dirigentes de La Cámpora y la avanzada de los dos principales referentes provinciales, Julio Zamora, intendente de Tigre, y el diputado Jorge D´Onofrio. Zamora por ejemplo, armó un interbloque en el Concejo Deliberante entre Unidad Ciudadana y los renovadores.
D’Onofrio por su parte marcó la diferencia entre Sergio Massa y Roberto Lavagna:
Hay dos tipos de dirigentes en la vocación de construir la mayoría: aquellos que hablan de sus candidaturas y aquellos que plantean el debate sobre el modelo de la Argentina. Ahí identifico a Sergio Massa, cuando planteó los 10 puntos de agenda, y a la ex presidenta, que habló de contrato social. Hay una primera etapa antes de definir candidaturas: por y para qué es la unidad.
Parece que la provincia de Buenos Aires se encamina a un gran acuerdo de todos los sectores del PJ que consensuarán el candidato a gobernador. A Lavagna por su parte, no le queda otra que seguir camino y seguir intentando construir una “tercera alternativa” con radicales sueltos, el socialismo partidario, y el peronismo más gorila.
En el caso de Massa, el dirigente repite públicamente que “no sé qué va a hacer Cristina. Hace diez años que no hablo con ella y todavía no dijo que era candidata” y en sintonía con ella afirma que “el próximo gobierno no va a poder gobernar si no construye compromisos y políticas de Estado sobre temas económicos, institucionales, educativos, y que no piense en el desarrollo del país”.
En ese contexto, Lavagna no tendría otra opción viable que no sea aceptar competir en elecciones PASO contra Juan Manuel Urtubey, el socialista Miguel Lifschitz y algún otro que logre sumar antes del cierre de listas. En los próximos días darán señales de apertura en ese sentido, en busca de incrementar el volumen político del espacio.