El mismo tribunal de justicia que en su momento lo condenó, ahora determinó en la sentencia que José López inventó que los bolsos con dólares pertenecían a Cristina Fernández de Kirchner. Así lo establecieron en un apartado en el que dan cuenta del “inverosímil descargo del imputado” y ex secretario de Obra Pública.
Las operaciones mediáticas en torno a los bolsos de José López
En su momento, José López declaró y los medios tergiversaron su declaración para incriminar a la ex presidenta, Cristina Fernández de Kirchner. En su declaración como arrepentido, López manifestó “Creí que el dinero era de Cristina”, no obstante, en algunos de los medios de mayor alcance de nuestro país, sus dichos fueron manipulados con una clara intencionalidad política.
En La Nación, Joaquín Morales Solá publicó que “José López declaró que los dólares del convento eran de Cristina Kirchner” sin dar cuenta que el imputado manifestaba que se trataba de una creencia y no de una certeza.
También Carlos Pagni escribió en su momento que “José López, por ejemplo, confesó que los 9 millones de dólares que revoleó tras el muro de un convento eran de su antigua jefa”. Unos pocos días atrás, La Nación insistió con la supuesta frase de Lopez manifestando que el dinero “era de Cristina Kirchner”.
José Lopez inventó que los bolsos eran de Cristina Fernández de Kirchner
Recientemente se conoció la sentencia de la condena al ex secretario de Obra Pública. En ella, los jueces determinaron que el relato de López es “inverosímil”, que acomodó su narración a la coyuntura política y que esto permitió su inclusión en el programa del arrepentido, con la proteccion del gobierno de Mauricio Macri.
En la sentencia, los jueces incluyeron un apartado de título “Algunas consideraciones con relación al inverosímil descargo del imputado JOSÉ FRANCISCO LÓPEZ”, en la que detallan que el condenado dio distintas y disparatadas versiones sobre el hecho delictivo.
En la última de ellas, José Lopez inventó que los bolsos eran de Cristina Fernández de Kirchner con la intención de involucrar a la actual senadora nacional en lo que fuera una operación conjunta con el gobierno nacional y medios afines.
En el apartado, los jueces Grünberg, Basílico y Michilini expresaron:
“Entendemos que las versiones que fue proponiendo LOPEZ no han sino más que para mejorar su situación, pues ha quedado claro que el imputado iba ajustando su defensa a medida que transcurría el juicio y se producía la pena. Ello, sumado a la coyuntura política nacional que, no puede desconocerse, intentó utilizar a su favor”.
Concretamente, se trató de la cuarta versión que brindó López sobre el origen de los bolsos llenos de dólares. Según esta versión, había recibido los bolsos de Fabián Gutiérrez, un ex secretario de Cristina Fernández de Kirchner que ya llevaba 10 años sin trabajar con ella.
“Si me llamaba Fabián era porque Cristina así se lo había indicado, Fabián era Cristina. Yo me preguntaba en ese momento porque me habían elegido a mí. Es obvio que creí que el dinero era de Cristina y que quien estaba enviando a Fabián era ella, y por eso le hice caso. Fue así como me dirigí al convento, y sucedió todo lo que es de público conocimiento”.
No obstante, los jueces determinaron que:
“Esa versión, el imputado LOPEZ no pudo sostenerla durante el debate con prueba que la respalde, pues fue claramente realizada aprovechando un contexto político que le permitía, para el momento de su declaración, acomodar su situación procesal y, eventualmente, poner en duda el origen del dinero”.
Además explicaron que “lo que claramente intentó LOPEZ fue desviar la atención, lo que no logró” y remarcaron el hecho de que “no quedan dudas entonces acerca de que LOPEZ era el tenedor y propietario de todo el dinero”. El mismo juez Grunberg había adelantado datos en este sentido, que tuvieron escasa -sino nula- repercusión mediática.
Aún así, evitaron investigar el origen del dinero de los bolsos que originó que López sea condenado por enriquecimiento ilícito.
El caso de José López, los bolsos y el convento
El sorprendente caso de López sucedió el 14 de junio de 2016, cuando el ex secretario se traslado desde su casa en Tigre hasta el convento Nuestra Señora de Fátima, ubicado en General Rodríguez. En su Chevrolet Meriva llegaba cuatro bolsos y una valija con una total de 8.982.047 dólares, 153.610 euros, 59.114 pesos y 425 yuanes. También poseía varios relojes de alta gama y una carabina calibre 22 mm. con mira telescópica.
Según dictaminaron los jueces, está demostrado que la intención de López era ocultar el dinero dado que no podía justificarlo y para eso intentó dejarlo en el convento, aún sabiendo de los riesgos que suponía llevarlo en persona.
Las distintas versiones de José López sobre el dinero mal habido
El ex secretario de Obra Pública brindó al menos 4 versiones sobre el origen del dinero mal habido que portaba en los bolsos. Durante la etapa de instrucción de la causa, manifestó ante el juez Daniel Rafecas que la plata había estado escondida en su casa bajo un tanque de agua.
Además, en la causa que enfrentó por la tenencia del arma, manifestó que se trata de una conspiración del kirchnerismo, de la que era poco más que una víctima.
También el 10 de agosto de 2018 habló ante el tribunal que finalmente lo condenó y expresó que era “plata de la política” sin brindar ulteriores detalles.
Finamente, el 4 de octubre de 2018 aseveró que creía que el dinero era de Cristina Fernández de Kirchner ya que se lo había entregado Fabián Gutiérez.
Según el juez Grunberg, es evidente el cambio en las declaraciones de López tras ser acogido como imputado colaborador o “arrepentido”:
“Es el de público y notorio conocimiento, y también surge del expediente reservado relativo al cambio de lugar de detención de José López, que esta segunda declaración tuvo lugar luego de haberse acogido ante la justicia colaborador federal (llamado de instrucción imputado como imputado ‘arrepentido’)”
“José López realizó primero una expresión genérica a que el dinero era “de la política”, para luego entonar una palinodia conspirativas de que incluye circunstancias tinte cinematográfico que no resisten el menor análisis”