Las acciones y bonos argentinos se desplomaron tras el discurso de Javier Milei en Wall Street y la desconfianza en su programa se extiende a la mayoría de la población argentina, con una caída mensual del 15% en este índice y un derrumbe de su imagen positiva.
Milei en Wall Street
El Presidente Javier Milei llegó a Nueva York el sábado por la noche y este martes a las 16:30 horas dará un discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU). Además, el lunes por la mañana realizó el tradicional toque de campana de Wall Street, con el que se marca el inicio de las operaciones del día en la Bolsa de Valores.
Si bien fue ovacionado por los presentes, su discurso en suelo norteamericano no cosechó los apoyos que el libertario esperaba, y tanto las acciones como los bonos como las acciones argentinas se desplomaron.
De esta forma, continuó la tendencia que ya podía observarse el viernes. En este caso, la mayoría de los ADRs argentinos (American Depositary Receipt) mostraron caídas que en algunos casos rozaron el 4%. Los bonos en dólares arrojaron reducciones del 1% en promedio.
Es que entre inversores no convencieron los dichos de Milei sobre la salida del cepo cambiario. El escepticismo con respecto a este tema se viene acumulando desde hace varios meses y a medida que el Gobierno Nacional evita dar precisiones sobre el tema.
El Presidente viene poniendo excusas para atrasar la fecha del fin de las restricciones, y desde Wall Street apuntó que “el cepo lo vamos a liberar cuando la tasa de inflación que tiene el programa macroeconómico sea cero“.
Para los inversores esto no son buenas noticias, ya que desde su punto de vista esta meta no es alcanzable a corto plazo. Uno de ellos comentó que las definiciones de Milei “descolocaron a todos“.
“Ustedes tienen una inflación observada en el consumidor que es 4% una inflación inducida por el programa -dado los controles de capitales, dado el crawling peg y la inflación internacional- del 2 y medio, por lo tanto, esa inflación hoy está en el 1 y medio“, indicó el libertario, quien posteriormente expresó:
“Cuando ese uno y medio haya desaparecido se va a dar en una situación donde además las LeFis hayan desaparecido y la base monetaria en el formato tradicional coincida con la base monetaria amplia. En ese momento, habrá desaparecido el money overhang y podremos abrir sin ningún tipo de problemas el cepo”, continuó.
“No estamos dispuestos a negociar bajo ningún punto de vista el equilibrio fiscal“, completó, en una explicación que evidentemente no convenció a los inversores.
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Cae la confianza en el Gobierno de Milei
Sin embargo, los inversores no son los únicos que desconfían en el programa de Milei, ya que según el “Índice de confianza en el Gobierno” que publica mensualmente la Universidad Di Tella, la confianza en el libertario cayó en un 14,8% en septiembre.
Actualmente, el índice se ubica en los 2,16 puntos. En comparación, el nivel de confianza es 14,6% menor al de la medición de septiembre 2016 (al comienzo del gobierno de Mauricio Macri) y 4,6% menor al de la medición de septiembre 2020 (al comienzo de la gestion de Alberto Fernández).
No solo es el nivel más bajo desde el inicio de su gestión, sino que además es la caída más marcada que sufrió el Presidente. En el caso de las encuestadas femeninas, el índice colapsó en un 25% (ubicándose en 1,81 puntos).
Entre tanto, si bien el mandatario retiene un elevado grado de confianza en los sectores más jóvenes, la franja etaria de mayores de 50 años mostró una disminución significativa del 20%. Algo similar ocurrió al medir los resultados según la zona geográfica, con una caída de confianza en el interior del país en torno al 18%.
Imagen positiva en caída libre
Como si esto fuera poco, Poliarquía (firma de Alejandro Catterberg y Eduardo Fidanza) dio cuenta del quiebre en la relación de Milei con la sociedad argentina. Es que solo en septiembre, el libertario perdió 7 puntos de imagen positiva.
Cabe destacar que se trata de una de las encuestadoras más respetadas del mercado. Según indica el informe, el diferencial positivo pasó de +10 a +2 al comparar la cifra con agosto, mostrando una caída mensual del 40%.
Para los analistas de la firma, esto da cuenta de “un deterioro consistente en la imagen de Milei por la recesión económica y el estilo agresivo”. El discurso de la pesada herencia comienza a perder su efectividad, ya que el 29% de los encuestados asigna la responsabilidad de la crisis al libertario.
Por otro lado, hablan de un “cambio significativo” en la imagen pública del Presidente, en un contexto en el que “empiezan a impactar los meses de recesión” con un marcado aumento del pesimismo y caídas del humor social.
Este mes la aprobación del gobierno fue del 53%, con una baja de 2 puntos, y la desaprobación fue del 47%, marcando una suba de 4 puntos. Este último indicador alcanzó su punto más alto hasta el momento.
Con respecto al pesimismo, al ser consultados por la situación general del país, la opinión negativa aumentó 7 puntos. Algo similar ocurrió cuando se preguntó por la situación económica, donde la marca negativa escaló 9 puntos (llevando el índice del 45% al 53%). El optimismo ciudadano colapsó 8 puntos.
Para el analista, “hay malestar por el aumento de las tarifas de servicios y el transporte. La gente dice que paren con el aumento de la electricidad“. Es que en los últimos meses se volvieron recurrentes los anuncios de quitas de subsidios y fuertes aumentos en todos los servicios.
La buena noticia para el Gobierno es que la inflación no se encuentra en el tope de la lista de preocupaciones de los argentinos, lo negativo es que fue reemplazada por el desempleo, que se ubicó en primer lugar con el 18%. La inflación alcanzó el 14% y por detrás se encuentra la molestia por la caída de los salarios (7%).
“Si bien la mayoría todavía culpa al sistema político, crece el porcentaje de los que responsabilizan al Presidente“, explicó el analista, marcando un dato que preocupa al gobierno, que hasta ahora basó su relato en la pesada herencia de las gestiones anteriores.
Si bien La Libertad Avanza encabeza la intención de voto (35%), en septiembre perdió 4 puntos. En contraposición, el peronismo creció en todas sus formas. El kirchnerismo aumentó 3 puntos (al 16%) y el peronismo no K subió 5 puntos (al 12%). El PRO de Mauricio Macri cayó de 13 a 10 puntos.
Desocupación, tarifas y jubilados
La encuesta de Satisfacción Política y Opinión Pública de la Universidad de San Andrés arrojó resultados similares a Poliarquía, con un marcado aumento de la insatisfacción con el gobierno y un fuerte rechazo a sus últimas medidas.
El 65% de los encuestados aseguró estar insatisfecho con la actualidad del país, lo que representa una suba de 10 puntos con respecto a julio, y le gana terreno al 35% que asegura estar satisfecho.
En este caso, la insatisfacción es más marcada entre los sectores más vulnerables de la sociedad y en la franja etaria entre los 28 y los 43 años.
Asimismo, la imagen del Gobierno tiene un rechazo del 51% y una aprobación del 46%, mientras que Milei es evaluado positivamente por el 43% y negativamente por el 52%. Además, su hermana Karina Milei, se muestra como la funcionaria con la peor imagen (la visión del 40% es muy mala y la del 15% es mala).
Por otro lado, para el 52% de la población la situación del país viene empeorando y -en línea con los demás sondeos- la pobreza y los bajos salarios encabezan la lista de preocupaciones. Esto está acompañado por un fuerte rechazo en varias medidas del Gobierno.
La que mayores reacciones negativas generó fue la decisión de vetar la ley de movilidad jubilatoria, que el Presidente celebró con un asado en la Quinta de Olivos y que marcó un rechazo del 62%.
Algo similar ocurrió con la decisión de limitar el acceso a la información pública, que fue vista negativamente por el 61% de los consultados. Además, la postulación de Ariel Lijo para la Corte Suprema fue apoyada solo por el 10%.
Entre otros puntos de la encuesta, se destaca que el 51% prefiere que el Estado sea más grande y la amplia mayoría exige mejores presupuestos para Salud pública (82%), jubilaciones (82%) y Educación (77%).
