La Oficina del Presidente Javier Milei celebró que los salarios duplicaron a la inflación con un supuesto informe de la Secretaría de Trabajo. Sin embargo, economistas remarcaron que la cifra dista mucho de la realidad.
El Gobierno Nacional publicó el lunes un comunicado celebrando que los sueldos del sector privado “están creciendo aproximadamente al doble de la inflación”, y detallando que “las cifras de abril evidencian un incremento del 16,1% en los salarios, mientras que la inflación se situó en un 8,8%“.
En este contexto, destacaron que “los argentinos comienzan a experimentar una recuperación del poder adquisitivo de sus ingresos, gracias a la desaceleración de la inflación mensual heredada del gobierno anterior”, “la estabilidad de precios” y “la eliminación del déficit fiscal, que generaba incertidumbre sobre la solvencia del Estado”.
La publicación atribuyó estos datos al informe mensual Panorama de Trabajo Registrado. Sin embargo, poco después la Secretaría de Trabajo debió salir a desmentir esta información.
Resulta que los datos utilizada por la Oficina del Presidente no corresponden a dicho informe, sino que surgen a partir del RIPTE (Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables).
En la desmentida, el organismo liderado por Cordero aclaró que la información que manejan “está en línea” con los datos del RIPTE, pero que la suba mensual del salario no implicó una recuperación del 6,6% tal como se desprende el texto oficial, sino del 3,9%.
Cabe destacar que además estos datos fueron difundidos a través de una gacetilla, pero sin el respaldo del informe correspondiente al mes de abril, que no estará disponible hasta los primeros días de julio. Al ser consultados al respecto, desde la Secretaría admitieron que “es una proyección basada en el 95% de la información que ya tenemos disponible“.
A esto se suma la mención a una “inflación mensual heredada“, un dato que también es falso, ya que la desaceleración inflacionaria se produce con respecto a los valores de diciembre y enero, cuando el IPC registró una suba del 25,5% y un 20,6% respectivamente.
La dudosa utilidad del RIPTE
Por otro lado, el indicador RIPTE es de dudosa utilidad para evaluar la situación salarial de los trabajadores, y desde el propio Gobierno aclaran que “no refleja necesariamente la evolución de los salarios del empleo privado registrado”, ya que lo que expresa es:
“La remuneración promedio sujeta a aportes al Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) que perciben los trabajadores que se encuentran bajo relación de dependencia y que han sido declarados en forma continua durante los últimos 13 meses”.
Es decir que no considera nuevos puestos de trabajo, sino solo aquellos que tengan una antigüedad de 13 meses. Tampoco tiene en cuenta los componentes no remunerativos del salario, y no contempla a los trabajadores registrados cuyas cajas previsionales no estén integradas al SIPA. A esto se suma que pone topes vigentes para los aportes al sistema de seguridad social.
Esto es importante cuando se tiene en cuenta que durante el mes de abril aumentó el tope salarial para los aportes jubilatorios en un 27,39%, ascendiendo a 1.874.839 de pesos, que es acompañado por el tope salarial.
De ese modo, la variación de los salarios solo se mide hasta los 1.874.939 de pesos, dejando afuera a cerca de un millón de personas que ganan más del tope, por lo que el sueldo promedio que releva el RIPTE es más bajo que un eventual promedio real total.
De todas formas, incluso este indicador marca una dinámica negativa para los salarios, ya que entre diciembre y abril la variación de los sueldos fue del 83%, mientras que la inflación acumulada durante ese periodo fue de 107%, por lo que en realidad hubo una pérdida de 23 puntos.
Por otro lado, el SIPA indica que en el primer cuatrimestre de 2024 se perdieron 95.000 puestos de trabajo registrados en el sector privado. A ellos se suman los 21.000 que se perdieron durante diciembre.
Críticas de los especialistas
Lo cierto es que varios especialistas se expresaron al respecto en redes sociales. Entre ellos, el director de la consultora CP, Federico Pastrana, quien remarcó que “es preocupante la desorientación del gobierno sobre la dinámica social y laboral” y señaló que “están mirando un indicador que no sirve, el RIPTE dejó de mostrar la dinámica salaria hace años, más que salarios, está influenciado por la movilidad jubilatoria y los saltos en los topes de los aportes personales“.
“El tope a aportes personales aumenta con la movilidad jubilatoria, que estuvo planchada en ene y feb. Al aumentar la movilidad y el tope a aportes, aumenta la base que toma el RIPTE, eso impulsa el indicador hacia arriba, influenciando el promedio que toma“, detalló.
“Ya en el último mes los salarios empezaron a ganarle a la inflación, porque subieron 14% y la inflación fue del 11%"
Parece que la confusión sobre la dinámica salarial es bien generalizada…
El RIPTE dejó de reflejar lo que pasa. Recién en marzo le gana a la inflación. Por q?
— Federico Pastrana (@fpastra) May 8, 2024
Entre tanto, Sebastián Menescaldi (director de EcoGo) rechazó que se trate de “la recuperación más significativa de los salarios reales desde 2009”, como aseguran desde la Oficina del Presidente, sino que el nivel salarial se encuentra en bajos históricos.
“Tomando distintos indicadores, en el caso del sector privado registrado los niveles actuales todavía se ubican en torno a los menores valores de los últimos 15 años“, señaló, y agregó que “con la demanda laboral en retroceso, no prevemos todavía una recomposición significativa, que podría venir recién hacia fin de año”.
“Tras el fuerte ajuste contractivo de los salarios provocado por la necesidad de reacomodar el tipo de cambio de fines de 2023, los salarios privados se mantienen estables y con un retroceso de más de 15% en términos reales con respecto a los valores máximos alcanzados el año pasado”, concluyó.
Luis Campos (Investigador del Instituto de Estudios y Formación de la CTA – Autónoma) se hizo eco de los datos del SIPA y el EIL para remarcar que “el empleo registrado siguió cayendo en marzo y abril” y agregó que “los datos de ocupación registrada son muy malos“.
“Estamos hablando de 126.000 personas que perdieron su trabajo registrado en cuatro meses“, comentó, “en el sector privado registrado el retroceso arrancó en septiembre de 2023. Llevamos siete meses de caída ininterrumpida”.
1. El empleo registrado siguió cayendo en marzo y abril (SIPA y EIL). En los primeros cuatro meses del nuevo gobierno perdieron su puesto de trabajo 95.000 asalariados registrados en el sector privado. En abril el derrape se habría profundizado
— Luis Campos (@luiscampos76) June 10, 2024