La conferencia de Javier Milei y Donald Trump concluyó sin anuncios oficiales con la advertencia de que el salvataje financiero depende de las elecciones de medio término, una amenaza que derivó en un intento de la tropa libertaria por instalar que el republicano se refería a los comicios de 2027.
La reunión entre los mandatarios Javier Milei y Donald Trump en la Casa Blanca concluyó sin comunicados oficiales ni precisiones sobre el salvataje financiero que el secretario del Tesoro estadounidense había anunciado para la administración libertaria, al punto que el ministro de Economía Luis Caputo luego comentó que “espero que haya anuncios pronto”.
Sin embargo, el encuentro dejó una declaración que resonó como un ultimátum para el gobierno y una amenaza extorsiva para el electorado argentino: “Si pierde, no seremos generosos con Argentina”, advirtió el mandatario estadounidense en referencia a las próximas elecciones.
La frase del presidente de Estados Unidos desató una caída pronunciada de los bonos argentinos en los mercados, atentos a sondeos que proyectan un escenario electoral complicado para La Libertad Avanza.
Además, provocó caos comunicacional en la tropa libertaria, cuyos dirigentes y comunicadores intentaron reinterpretar las palabras de Trump argumentando que se refería a los comicios presidenciales de 2027 y no a la elección de medio término del 26 de octubre.
Todo esto pese a que la pregunta de la periodista no había dejado lugar a dudas, al punto que para los medios estadounidenses como Reuters y The Wall Street Journal no hubo margen para la ambigüedad: Trump condicionaba el salvataje al resultado electoral inmediato, no a una hipotética reelección dentro de dos años.
Un encuentro acortado y sin bilateral en el Salón Oval
El presidente argentino había soñado con una reunión bilateral en el Salón Oval, el espacio donde los líderes mundiales suelen sostener encuentros con el mandatario estadounidense. A último momento, la Casa Blanca canceló la bilateral sin mayores explicaciones y transformó el encuentro en un almuerzo de trabajo con ambas delegaciones presentes.
El cambio de planes se produjo luego de que Trump llegara tarde de su gira por Medio Oriente. La reunión, inicialmente pautada para las 12 horas, se retrasó hasta las 14 y finalmente Milei fue recibido a las 14:45.
El formato se limitó a saludos protocolares, una foto en el Salón Oval y un almuerzo en la Sala del Gabinete, con la participación de Karina Milei, Luis Caputo, Patricia Bullrich, Santiago Bausili, Gerardo Werthein y Alec Oxenford por la delegación argentina.
La última vez que un presidente argentino había tenido una bilateral en el Salón Oval fue Alberto Fernández con Joe Biden en marzo de 2023. Para Milei, la suspensión del encuentro privado representó un revés protocolar antes incluso de que comenzaran las declaraciones públicas.
Durante el almuerzo, Milei tuvo una única intervención breve en la que celebró la ayuda estadounidense como “una ruta para transitar tranquilos y hacer lo que los argentinos de bien necesitan”. También expresó su expectativa de que Argentina se convirtiera en “un buen caso para mostrar al mundo que las ideas de la libertad funcionan y generan prosperidad”.
Pero fue Trump quien dominó la escena con una ronda extensa de preguntas de periodistas argentinos y estadounidenses, mientras la comitiva de Milei permanecía en silencio sin participación alguna.
En ese contexto, el mandatario republicano lanzó las declaraciones que provocarían el terremoto: “Si (Javier Milei) pierde con un candidato de extrema izquierda, no seremos generosos con Argentina”. Trump fue más allá: “Si no gana, no vamos a perder el tiempo”, sentenció ante la mirada atónita del presidente argentino y su equipo.
El estadounidense insistió en que Argentina “está al borde de una gran recuperación, de un tremendo éxito económico” y elogió la gestión de Milei, pero también alertó sobre la posibilidad de que “podría fracasar”. “El plan puede caerse, sí, pero también le puede ir bien”, agregó.
En otro pasaje, Trump afirmó: “La elección está cerca y la victoria es muy importante, estamos acá para apoyarte. Será mejor después de este acuerdo”. Esta frase alimentó la confusión, ya que pareció sugerir que el mandatario estadounidense creía estar ante elecciones presidenciales y que Milei ya llevaba cuatro años de mandato.
El secretario del Tesoro, Scott Bessent, también respaldó a Milei pero con condicionamientos: “Estamos confiados en que al presidente y su coalición les va a ir bien en las elecciones. Esta ayuda está sujeta a políticas económicas fuertes. Volver a las políticas fallidas del peronismo generará que Estados Unidos reconsidere la situación”.
Sobre la relación con China, Trump advirtió que Argentina “no debería estar haciendo muchos negocios” con la potencia asiática. Bessent luego tuvo que aclarar que sus comentarios previos sobre “correr a China” se referían a bases militares (aunque no aclaró a qué se refería con esto), puertos y centros de observación, no al swap.
Operaciones, fake news y pases de factura
El resultado tuvo un efecto devastador en los mercados argentinos, que observan en las encuestas un escenario complicado para La Libertad Avanza en estas elecciones de medio término. Es por eso que el ecosistema comunicacional libertario desplegó una operación para instalar una relectura de las palabras presidenciales.
La versión que intentaron imponer sostenía que Trump se había referido a 2027, cuando Milei buscaría su reelección, y no a los comicios legislativos del 26 de octubre. Todo esto pese a que la periodista había sido clara al referirse a las elecciones legislativas y luego el propio republicano lanzó un comunicado mencionando los comicios de medio término.
La cuenta oficial de Santiago Caputo, asesor presidencial y uno de los artífices del encuentro, publicó: “Clarísimo el Presidente Trump: Si en el 2027 Argentina retrocede, Estados Unidos dejará de apoyarnos. Tenemos la oportunidad histórica de volver a ser una potencia mundial, no la dejemos pasar”.
El vocero Manuel Adorni reforzó el mensaje: “El apoyo de los Estados Unidos se explica, como dijo el propio Presidente Donald Trump, con que hoy en Argentina hay un gobierno que defiende las ideas correctas. Si Argentina siguiera la senda del socialismo o retrocediera en el 2027 nada de esto pasaría y volveríamos atrás“.
En redes sociales, dirigentes como Gordo Dan (Daniel Parisini) argumentaron que Trump creía estar hablando de elecciones presidenciales y no de medio término, y de paso culpó al canciller Werthein por no haberle explicado la diferencia al mandatario estadounidense.
“Si tan solo tuviésemos un canciller que en vez de andar llamándolo a Luis Juez para pedirle perdón por las boludeces que dijo un gordo boludo en tuiter, escuchara lo que viene diciendo Donald Trump respecto del tema”, lanzó, “la cosa hubiese sido distinta“.
Medios oficialistas como La Derecha Diario directamente publicaron una fake news atribuyendo a Trump un textual que nunca dijo: “Si Milei pierde las elecciones de 2027, dejaremos de apoyar a la Argentina”.
La Ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, presente en Washington como parte de la comitiva presidencial, lanzó una nueva versión sobre sus dichos: “Me parece que, desde nuestro punto de vista, el mensaje es que tiene que ganar este gobierno, si el resultado no es de triunfo, va a dejar de apoyar, si Milei dejara de ser gobierno”, declaró a LN+. La ministra intentó matizar:
“Hay que entender el mensaje: si cambia el régimen, si cambia la filosofía liberal por una comunista… No es que el 26 (de octubre) nos abandonan“.
Bullrich aseguró que Trump habría aclarado su posición “ya sin la prensa”, aunque reconoció que no se le explicó al mandatario estadounidense de qué se trataba la elección de medio término. “No sé si sabía o no sabía”, admitió. “No se trató de un lapsus”, añadió, “pero tampoco le explicamos“.
Sin embargo, los medios estadounidenses no dejaron espacio para la ambigüedad. Reuters tituló: “Trump no ‘gastará nuestro tiempo’ con Argentina si Milei pierde en el medio término”. The Wall Street Journal encabezó: “Trump dice que el salvataje a la Argentina depende de que Milei gane las próximas elecciones”.
Más allá de esto, el mensaje de Casa Blanca fue claro: el apoyo financiero a Argentina está atado no solo a la continuidad del modelo económico libertario, sino al resultado electoral del 26 de octubre. Un ultimátum que pone a Milei en una situación complicada y amenaza con sumarle un nuevo dolor de cabeza tras los comicios.