El argumento de Stornelli es que los audios difundidos y mediáticamente bautizados como parte de una "Operación Puf, probarían la existencia de un complot K en su contra. El fiscal ya faltó a cuatro citaciones y fue declarado en rebeldía. Ahora había sido citado nuevamente luego de que la Cámara Federal de Mar del Plata ratificara la competencia de Ramos Padilla al frente de la causa y que Stornelli estaba en rebeldía y debía ajustarse a derecho.
Las escuchas encuadradas en la "Operación Puf" son parte de una investigación ordenada por el juez Federico Villena sobre Mario Segovia, el "rey de la efedrina", y habían sido descartadas por ser irrelevantes para la investigación. Según Stornelli y sus periodistas aliados alegan que las escuchas fueron entregadas en forma de audios y desgrabaciones de manera anónima, algo que señala relaciones con los servicios de inteligencia, en tanto que las escuchas debieron haber sido destruidas por orden del juez pero "se filtraron" justamente hasta cierto sector del periodismo.
Por otra parte, las escuchas no constituyen una novedad periodística en tanto ya habían sido presentadas, también como supuestas pruebas del complot contra Stornelli, apenas a días de estallado el escándalo. De ellas se desprende la causa judicial iniciada por Elisa Carrió, junto a Mariana Zuvic y Paula Oliveto, y el mismo Stornelli.
Finalmente, un dato que da por tierra con la hipótesis de una supuesta "Operación Puf" es que los hechos investigados en la causa que se inició por la denuncia de Padro Etchebest contra Marcelo D'Alessio y Carlos Stornelli son anteriores a las escuchas. Es que el empresario estuvo acumulando pruebas durante semanas de las extorsiones de D'Alessio, antes de presentar la denuncia judicial junto con esa misma carga probatoria.
Cabe recordar que las extorsiones de D'Alessio consistían en pedirle una exorbitante cantidad de dinero para "borrarlo" de la "causa cuadernos". La extorsión tuvo lugar a finales de 2018, mientras que recién el 8 de enero fue el viaje a Pinamar en el que Etchebest se encontró con D'Alessio y Stornelli.
Dicha reunión fue filmada y presentada como prueba, confirmando que Etchebest ya venía juntando material probatorio para realizar la presentación judicial. En ese encuentro, D'Alessio le pide 300 mil dólares que supuestamente serían para Stornelli. Por esos días el mismo Etchebest comentó la situación por la que estaba atravesando a un dirigente político del kirchnerismo, por lo que el rumor de una presentación contra Stornelli llegó a los detenidos de Ezeiza unos pocos días después.
La fecha de las escuchas de la supuesta "Operación Puf" es del 18 y 19 de enero, mientras que la denuncia formal se concretó en sede judicial 10 días después, el 28 del mismo mes.
La defensa de Stornelli sabe que no hay delito alguno en esta sucesión de hechos pero también sabe de la efectividad de los recursos mediáticos. De este modo le permite comprar más tiempo a su cliente mientras pide la indagatoria de los ex funcionarios que se escuchan en las grabaciones ilegales: Eduardo Valdés, Juan Pablo Schiavi, Roberto Baratta y Carlos Zelkovicz.