Cuestionaron al Gobierno Nacional por su silencio ante la llegada de David Cameron a las Islas Malvinas. Entre tanto, el Gobernador Gustavo Melella declaró persona no grata al canciller británico y remarcó que es la primera visita de estas características en 30 años.
El lunes 19 de febrero el Ministro de Relaciones Exteriores del Reino Unido, David Cameron, arribó a las Islas Malvinas en el marco de una visita oficial. La última visita de un miembro del gabinete británico había ocurrido en 2016.
En este marco, Cameron remarcó que la soberanía de las Islas Malvinas "no será tema de discusión mientras quieran seguir siendo territorio británico". "Los habitantes de las Islas Malvinas deberían estar orgullosos", agregó.
La situación generó el repudió del Gobernador de Tierra del Fuego, Gustavo Melella, quien lo declaró persona no grata y remarcó que se trata de una "nueva provocación británica que busca menoscabar nuestros legítimos derechos soberanos".
Sin embargo, el Gobierno Nacional decidió guardar silencio ante la visita. Tampoco la Cancillería, que encabeza Diana Mondino, se expresó al respecto.
Cabe señalar que el hecho ocurre un mes después de la reunión de Cameron con el presidente Javier Milei, y es el primer viaje a las islas en 30 años de parte de un canciller británico.
Llegada de Cameron a las Islas Malvinas
El arribo del Ministro de Relaciones Exteriores del Reino Unido ocurre en el marco de su gira por distintos destinos de Sudamérica. Tras llegar a las Islas Malvinas, Cameron ratificó la soberanía de su país sobre el archipiélago.
Tras aterrizar en la base aérea de Mount Pleasant, visitó sitios donde se llevaron a cabo varias batallas de la guerra entre Argentina y Gran Bretaña en 1982. También colocó una corona de flores en el monumento a los soldados caídos en el conflicto.
Antes del viaje, el funcionario había expresado que:
"Las Islas Malvinas son una parte valiosa de la familia británica y tenemos claro que, mientras quieran seguir siendo parte de la familia, la cuestión de la soberanía no será tema de discusión".
"Los habitantes de las Islas Malvinas deberían estar orgullosos de la comunidad moderna y próspera que han construido", había dicho.
Entre tanto, el comunicado oficial emitido por la Oficina de Relaciones Exteriores, Commonwealth y Desarrollo aseguró que entre los objetivos de la visita estaba el encuentro con habitantes para conocer "su esfuerzo por construir una comunidad próspera y proteger el medio ambiente natural".
En ese contexto, el funcionario ratificaría el compromiso del Reino Unido "con el derecho de autodeterminación de los isleños, un principio que se vio claramente reflejado en el referéndum de 2013", donde "votaron a favor de mantener su estatus como territorio autónomo de ultramar del Reino Unido".
Repudio de Gustavo Melella
Tras su llegada, el Gobernador de Tierra del Fuego Gustavo Melella expresó enfáticamente su rechazo y lo declaró persona no grata en la provincia a través de un decreto.
Asimismo, se expresó al respecto a través de redes sociales, donde remarcó que "la presencia de David Cameron en nuestras Islas Malvinas configura una nueva provocación" que "busca menoscabar nuestros legítimos derechos soberanos".
La presencia de @David_Cameron en nuestras Islas #Malvinas configura una nueva provocación británica que busca menoscabar nuestros legítimos derechos soberanos sobre nuestros territorios y sostener el colonialismo en pleno S.XXI. No lo vamos a permitir.
— Gustavo Melella (@gustavomelella) February 19, 2024
"En tanto persista la usurpación británica de nuestro territorio y el Reino Unido siga rehusándose a reanudar las negociaciones", continuó, "no descansaremos en nuestra lucha". Además, remarcó que:
"Ningún representante colonial de un Estado que atenta contra nuestra integridad territorial mancillando la memoria y el sacrificio eterno de nuestros Héroes de Malvinas será bienvenido en nuestra provincia".
Entre tanto, en su decreto indicó que es la primera visita de un Canciller británico desde 1994, y solicitó la "adopción de medidas tanto en el ámbito nacional como provincial". Además, invitó a "adherir a los términos del presente decreto" a los distintos territorios del país, a organizaciones de veteranos y al Congreso de la Nación.
Su comunicado fue replicado por varios gobernadores, entre ellos Sergio Ziliotto (La Pampa), Gerardo Zamora (Santiago del Estero), Alberto Weretilneck (Río Negro) y Ricardo Quintela (La Rioja).
Silencio del Gobierno Nacional
Sin embargo, el Gobierno Nacional decidió no expresarse al respecto, hecho por el que recibió varias críticas. Una de ellas, de parte del ex secretario de Malvinas, Guillermo Carmona, quien comentó que:
"Cameron, el canciller británico, está en Malvinas. La Cancillería guarda silencio ante a una provocación que exige reacción diplomática. Si el repudio y la protesta no salen del gobierno demostremos como pueblo que no consentimos al colonialismo".
Por su parte, el excanciller Santiago Cafiero expresó "mi más categórico rechazo a la presencia del secretario de Relaciones Exteriores británico, David Cameron, en las Islas Malvinas".
"Se trata de una nueva e inadmisible provocación, que no sucedía hace 30 años, y que debe ser rechazada por el gobierno nacional", agregó.
La visita ocurre a un mes de la reunión que Cameron sostuvo con Milei en el Foro de Davos, en Suiza. En este contexto, el Presidente argentino había restado importancia al tema, indicando que no se refirieron "en profundidad" a la soberanía de Malvinas.
"Lo fijamos como un punto en una agenda donde la canciller, Diana Mondino, y el ministro Cameron avanzarán en buscar una solución al tema", había señalado.
Al respecto, la Oficina del Presidente había citado que "fijamos Malvinas como un punto en una agenda con Cancillería para avanzar en soluciones sobre el tema".
La negativa del Presidente a respetar la tradición diplomática de aprovechar los encuentros con funcionarios británicos para impulsar la cuestión de la soberanía de las Islas generó malestar en el mundo diplomático.
Según reportó la BBC, el Gobierno argentino señaló al Reino Unido que "aceptarían estar en desacuerdo y lo harían cortésmente".