En la gobernación bonaerense hay malestar con un grupo de intendentes de Juntos por el Cambio, en cuyos distritos la curva de contagios de coronaviurs viene subiendo marcadamente en las últimas semanas.
La llegada del COVID-19 y su dispersión en el interior bonaerense preocupa en La Plata, y la mayor parte de la propagación del virus se ha dado en agosto.
Por dar un ejemplo, el 1 de agosto Tandil tenía 8 casos y al día de hoy (27 de agosto) suma 88 . Otros casos a destacar son General Viamonte, que tenía 1 solo contagiado y hoy tiene 111; Junín, de 24 contagios pasó a 152.
Según analizan en La Plata, la falta de controles en los accesos a los distritos para controlar la entrada y salida de personas, especialmente de otros puntos con circulación comunitaria como el AMBA, Bahía Blanca o La Plata.
Un caso testigo es Pinamar, distrito gobernado por el cambiemita Martín Yeza, que el 1º de agosto tenía 22 casos y hoy tiene 213. Yesa, como otros jefes comunales, flexibilizaron los operativos, a pesar de que el municipio sólo tiene dos accesos fácilmente controlables.
Otro distrito que muestran una curva que se vuelve más preocupante es San Nicolás, que tenía 54 casos a principios de agosto y hoy llega a los 408. También Bragado, al borde del colapso sanitario, pasó de tener 37 casos a 400. La situación es especialmente complicada porque 7 de las 8 Unidades de Terapia Intensiva están ocupadas.
La imagen que en algún momento ofreciera el gobernador Axel Kicillof, de un interior como un Uruguay casi libre de casos, quedó superada por la expansión de la pandemia que además ya tiene dos importantes focos en el interior.
El primero de ellos es Mar del Plata, que retrocedió a fase 3, ante el aumento sostenido de contagios. Se trata del distrito con mayor número de positivos en el interior bonaerense. Concretamente, General Pueyrredón tiene 2979 positivos, 1208 activos, 1709 recuperados y 62 fallecidos.
Un poco más atrás está Bahía Blanca, que desde el inicio de la pandemia fue uno de los distritos más golpeados del interior. Incluso, el intendente Héctor Gay llegó a ensayar un giro anticuarentena cuando celebró una movilización opositora y la calificó de "saludable".
Con los números de ayer, el municipio del sudoeste bonaerense tiene 942 positivos, incluyendo 26 muertos y 633 recuperados