El Frente de Todos buscará avanzar con el impuesto a la grandes fortunas, impulsado por Máximo Kirchner y Carlos Heller. Esto en un contexto de optimismo en cuanto a expectativas económicas teniendo en cuenta el acuerdo de la deuda externa con acreedores privados.
El presidente Alberto Fernández ya había mostrado acuerdo con el proyecto, según había declarado el presidente de la comisión de Presupuesto Carlos Heller. "Yo diría que tenemos el total del apoyo del Presidente que lo ve como un buen proyecto y le parece que es una contribución importante para generar recursos en un momento en que el país tiene una significativa necesidad de esos recursos en función de las políticas públicas", había dicho en mayo de este año a la AM 750.
El ministro de Economía, Martín Guzmán también avaló públicamente el proyecto: "Los que tienen la mayor posibilidad de contribuir es razonable que lo hagan".
Por otra parte, se espera que el proyecto alcance a 12 mil personas. También, que los votos en Diputados son 119 aunque se deberían pulir pequeñas diferencias, con tal de aumentar las voluntades a favor aunque se descuenta que el bloque de Juntos por el Cambio lo rechace.
En tanto, el Frente de Izquierda presentó un proyecto alternativo propio: alcanzaría a las fortunas personales de más de $ 100 millones, las ganancias extraordinarias de bancos y empresas, las grandes propiedades terratenientes y la tenencia de viviendas ociosas. Según sus autores, recaudaría 15 mil millones de dólares que se destinarían a reforzar el sistema de salud; a otorgar $30 mil por mes a los que no tienen ingresos; y construir 100 mil viviendas en un año. La diputada Romina del Plá detalló: "Son medidas que están planteadas por única vez porque tienen relación con la pandemia".
De todas formas, el proyecto del oficialismo aún no fue enviado al Honorable Congreso de la Nación.