El gobierno nacional ordenó la creación de un régimen de información de precios y volúmen de comercialización de carnes y cueros, luego de que los precios se dispararan y el consumo de carne cayera 8,3% en el bimestre. La medida se enmarca en la protección social para morigerar el impacto negativo del parate económico por la pandemia de COVID-19.
La Resolución 103/2020 publicada hoy en el Boletín Oficial establece que los frigoríficos “deberán informar a la Subsecretaría de Defensa de los Consumidores: la cantidad diaria de kilos de media res y cuero vacunos comercializados; su precio promedio diario de venta por unidad de medida; la categoría de origen de tales productos".
Por su parte, Defensa del Consumidor “podrá publicar periódicamente en su página web y con acceso público, los precios de referencia de venta de media res y cuero vacuno”.
La norma estará viegente por 90 días a partir del día siguiente de la publicación en el Boletín Oficial (es decir, a partir del 2 de abril) y quienes no la cumplan “serán sancionados de acuerdo a lo establecido en el Decreto Nº 274/2019”, de lealtad comercial.
Como fundamento, la Resolución plantea que “se han observado en los últimos tiempos determinados desequilibrios en el mercado de la carne vacuna, producto de distorsiones en materia de precios en las distintas etapas de la cadena de comercialización, que comprenden desde la producción hasta su comercialización final”.
Finalmente, se señala que estos desbarajustes se tradujeron “en incrementos en el precio a las y los consumidores de carne vacuna, que no parecen guardar relación con la evolución de los principales componentes del costo de cada uno de los eslabones de la cadena, ni con la situación económica general”.