El abandono de la ex ministra de Ecuador María Duarte de la embajada argentina en aquel país provocó una escalada diplomática sin precedentes: el gobierno de Guillermo Lasso expulsó al embajador argentino en Quito y, en respuesta, la Argentina hizo lo mismo con el embajador ecuatoriano de Buenos Aires.
María de los Ángeles Duarte Pesantes, exministra de Ecuador durante la presidencia de Rafael Correa, abandonó este martes la embajada de Argentina en Quito (Ecuador), donde estaba refugiada desde hace más de dos años, debido a que el gobierno de Guillermo Lasso le negó el salvoconducto que le correspondía para viajar a nuestro país.
En la embajada argentina, Duarte permanecía junto a su hijo menor de edad (de nacionalidad argentino de parte de su padre) desde agosto de 2020 tras recibir una pena de ocho años de cárcel por supuesta corrupción.
Actualmente, Duarte se encuentra ahora en la embajada de Argentina en Caracas (Venezuela), según la información difundida este martes por la Cancillería argentina.
Duarte, que formó parte del gobierno correísta, agradeció a Argentina por haberla "cobijado ante la persecución de los gobiernos de Lenín Moreno y Guillermo Lasso".
La exministra argumentó que dejó la embajada porque:
"Al negarme el salvoconducto que me correspondía como asilada política, de acuerdo a la convención de Caracas de 1954, e impedir mi salida segura, el gobierno ecuatoriano me convirtió en su rehén política".
Duarte se desempeñó como ministra de Inclusión Económica y Social (2009-2010), Transporte y Obras Públicas (2010-2013) y Desarrollo Urbano y Vivienda (2015-2017) durante el mandato del expresidente progresista Rafael Correa.

Fue condenada en 2020 junto al exmandatario a ocho años de cárcel por cohecho como parte de la polémica causa "Sobornos 2012-2016".
La exfuncionaria se considera una perseguida política y niega los cargos en su contra.
"Tuve que salir bajo riesgo, pero ejercí el derecho que me asistía", expresó Duarte en su cuenta de Twitter.
A principios de diciembre del año pasado, Argentina decidió (en ejercicio del derecho que le otorga la Convención sobre Asilo Diplomático de 1954 y de acuerdo a la Convención Americana Sobre Derechos Humanos) conceder el asilo diplomático solicitado por la ex ministra.
Fue entonces que se solicitó al gobierno ecuatoriano el salvoconducto que le correspondía a la ex funcionaria para viajar a nuestro país. Sin embargo, el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso sostuvo que no correspondía darle asilo a Duarte por la cuestionada causa judicial en su contra, y en este contexto se negó a habilitar el salvoconducto.
Sin salvoconducto diplomático, Duarte podría ser apresada por la justicia de Ecuador cuando saliera de la sede diplomática de la Argentina en Ecuador, territorio inviolable por el derecho internacional.
Entonces, la exministra huyó el sábado hacia Venezuela. Duarte esquivó a las fuerzas de seguridad y de Inteligencia de Ecuador que controlaban los accesos de la residencia.
El conflicto diplomático
El escape de Duarte sucedió después que se conociera que el ministro de Relaciones Exteriores de Ecuador, Juan Carlos Holguín, convocó al embajador argentino, Gabriel Fuks, para dar explicaciones en torno a la salida de la exfuncionaria de la embajada de ese país en Quito.
Poco después el gobierno ecuatoriano anunció que declaraba a Fuks "persona non grata", lo que obliga al embajador a abandonar Ecuador en un lapso de 72 horas.
La respuesta argentina no tardó en llegar. Según la Cancillería, no vieron a Duarte salir de la embajada ni serian responsables de retenerla.
"Aún cuando se informara oportunamente a las autoridades ecuatorianas ni bien se pudo verificar, recién el lunes 13 de marzo, que la mencionada huésped había abandonado el predio de la Embajada -sin consulta ni previo aviso a ninguna autoridad de la Embajada argentina, lo cual fue reconocido por comunicados oficiales del Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana ecuatorianos emitidos ese mismo día-, no existe norma internacional alguna que obligara a las autoridades diplomáticas argentinas a ejercer custodia sobre la Sra. Duarte Pesantes," dice el comunicado argentino.
Cabe resaltar que todos los Estados tienen el derecho a expulsar a cualquier diplomático extranjero de su territorio. Pero las misiones diplomáticas suelen ser custodiadas por el derecho internacional, y cualquier conflicto con las mismas resulta en una escalada diplomática que varios analistas consideran "inaceptables".
El gobierno argentino decidió responder con la misma moneda, y expulsó del país al embajador de Ecuador en Argentina, Xavier Alfonso Monge Yoder, que debe abandonar la Argentina en 72 horas.
“Lamentando por lo tanto la incomprensible decisión del Gobierno ecuatoriano de solicitar el retiro de Ecuador del Embajador Gabriel Fuks, se ha decidido adoptar por nuestra parte la misma situación con respecto al Embajador ecuatoriano en Argentina”, dice el comunicado de la Cancillería.
Las debidas responsabilidades
Si bien el comunicado remarca que la situación no cambiará el "profundo aprecio" con el pueblo, señalan la "inoperancia de las autoridades ecuatorianas" para que la persona mencionada pueda circular por Ecuador y partir hacia el extranjero "eludiendo los sistemas de control".
En pocas palabras, Argentina no es responsable de la inoperancia de las fuerzas de Seguridad e Inteligencia de otro país. Ni tampoco tiene la responsabilidad legal de ejercer custodia policial-judicial sobre personas implicadas en procesos judiciales ajenos al derecho argentino. Más aún cuando el Gobierno autorizó el asilo político a dicha persona.
La fuga de Duarte causó una conmoción política en Ecuador. Lasso está muy debilitado y aún no puede explicar como una ex funcionaria perseguida pudo esquivar a sus fuerzas de seguridad, a sus servicios de inteligencia, a sus autoridades migratorias y a todos los controles aéreos de su país.
En un nuevo comunicado, el ministerio de Relaciones Exteriores argentino dijo que "Duarte informó que se encuentra actualmente en Caracas y realizó averiguaciones sobre la documentación que nuestro país le pudiera extender", a la vez que "manifestó no tener intenciones de viajar a la Argentina en el corto plazo".
La Cancillería argentina informó al Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana de Ecuador, que la ciudadana María de los Ángeles Duarte Pesantes ya no se encuentra en la Embajada argentina.
Comunicado oficial 👇https://t.co/9ZZ2sMFkm7 pic.twitter.com/LvCh4khwXb
— Cancillería Argentina 🇦🇷 (@CancilleriaARG) March 14, 2023
Cabe destacar que por el momento no hay ruptura formal de las relaciones bilaterales, pero los lazos diplomáticos entre Argentina y Ecuador quedaron muy deteriorados.