Mauricio Macri blanqueó que quiere volver a Casa Rosada en 2023 e incluso se ha mostrado junto al exministro de Economía Domingo Cavallo, y deja trascender que ya le armó un plan económico para los primeros 100 días.
No se trata del único líder PRO que mantiene reuniones con Cavallo, en tanto lo mismo cuenta para Horacio Rodríguez Larreta que también sueña en 2023 pero prefiere que sus encuentros con el ícono del saqueo menemista no trasciendan.
Larreta prefiere reunirse con Cavallo en un entorno más privado, como las oficinas de Luis Caputo o Hernán Lacunza, en tanto cree que en las y los argentinos aún queda el recuerdo del corralito y el manotazo a sus ahorros en 2001.
No obstante, Cavallo no volverá al Ministerio sino que por su avanzada edad, le dejará el rol a Carlos Melconián.
Cavallo impulsa la eliminación de los controles de cambio (el mal llamado cepa), un aumento en las tarifas de los servicios públicos y una devaluación mensual del 4% con algún pequeño aumento salarial.
“La cuestión clave para discernir si será posible evitar la hiperinflación en la transición del gobierno actual al que lo suceda en diciembre de 2023, como no se la pudo evitar en la transición del gobierno de Alfonsín a Menem en 1989, pasa por las ideas que predominen en la discusión entre partidarios de la dolarización voluntaria y de la desdolarización compulsiva” expresó recientemente.
Para bajar la inflación, Cavallo cree que es necesario permitir la dolarización voluntaria y el funcionamiento de un mercado cambiario totalmente libre para todo tipo de transacciones financieras y pagos y cobros de servicios y de esa manera se evitará la hiperinflación, porque la brecha cambiaria podrá mantenerse acotada con un manejo realista de las tasas de interés en pesos.
Por supuesto, en su plan también aparece una baja importante en las retenciones al agro. Nada muy diferente a lo realizado durante el gobierno de Mauricio Macri