Se detectaron cuatro nuevos casos de coronavirus en el cárcel de Villa Floresta en Bahía Blanca. Se trata de cinco internos que fueron diagnósticados positivos por COVID-19, un día después de que se conociera el primer caso de preso. En total, la Unidad Carcelaria 4 suma 11 casos de coronavirus.
Los primeros casos de la unidad penal de Floresta correspondieron a cuatro trabajadores penitenciarios y un radiólogo. Ayer se informó el caso del primer interno contagiado con COVID-19, un hombre de 38 años. De este modo, el total de positivos es 10.
Ahora se sumaron los casos de internos de 29, 33, 36, 37, 38 y 47 años, que fueron alojados en el hospital de campaña del penal, todos con síntomas leves.
La aparición de un contagio por conglomerado en un contexto de encierro, como es una prisión, genera gran preocupación en la comunidad sanitaria en tanto el virus se propaga con mayor facilidad en dicho contexto. En consecuencia, diversos organismos internacionales han recomendado evitar la sobrepoblación carcelaria.
En nuestro país, el poder judicial, legislativo y ejecutivo, en sus diferentes estamentos, se ha mostrado inactivo en referencia a esta cuestión, especialmente luego de una serie de cacerolazos impulsados por los medios y el ala dura de la oposición, que instalaron que "el gobierno quería liberar delincuentes".
En la Unidad Carcelaria 4 de Villa Floresta hay 853 internos, por lo que el potencial de contagiados tiene un techo muy alto. En el probable escenario de la propagación del virus entre un porcentaje importante de la población carcelaria, la demanda al sistema sanitario podría ponerlo en aprietos o simplemente, hacerlo colapsar.