La gobernadora María Eugenia Vidal volvió a negar que existan tensiones con el presidente Mauricio Macri a partir de su reclamo por una actualización del Fondo del Conurbano y dijo que entre ellos “no hay subtítulos”, aunque sin embargo se reunió a negociar con el líder del Frente Renovador, Sergio Massa, quien hace tiempo se ha despegado discursivamente de la Casa Rosada.
“No voy a ser candidata a presidenta. Dedico 24 horas mi energía a la Provincia, que necesita mi compromiso”, ratificó Vidal en TN para desmentir cualquier interés en competir por ese cargo, y enviar más señales a la Nación, desde donde le habían enviado mensajes en ese sentido tras su malestar por el recorte presupuestario que sufrió la Provincia para 2019.
“No lo llamaría ni pelea ni disputa ni hablaría de tensión”, insistió la mandamás bonaerense al ser consultada por los cruces que ministros de ambas administraciones tuvieron la semana pasada en torno al pedido de actualización del Fondo del Conurbano por inflación. “Entre nosotros no hay subtítulos, siempre nos decimos las cosas llanamente”, dijo sobre su relación con el Jefe de Estado.
Ayer trascendió que Macri accedió a compensar a la provincia vía decreto por los 25 mil millones que le costará el traspaso de los subsidios al transporte y la energía eléctrica de la órbita nacional a la bonaerense. Al parecer esa ayuda llegaría en calidad de obras de infraestructura para mostrar en el año electoral.
También ayer, luego de la reunión con Macri en la que habrían acordado esa ayuda extra, Vidal se llegó hasta el Four Seasons para mantener una reunión en total hermetismo con Sergio Massa, su aliado legislativo desde que asumió. Como presentará el presupuesto el próximo lunes, la mandataria necesita los votos del Frente Renovador en ambas cámaras, pero especialmente en Diputados, para poder aprobar el pedido de endeudamiento que podría llegar este año a los 100 mil millones de pesos.
El encuentro se produjo, según fuentes massistas, por pedido de la gobernadora “preocupada” porque el tigrense había decidido dejar la rosca en manos de un puñado de diputados y senadores suyos y correrse a un lado este año. El requisito que pone el titular del Frente Renovador es que se apruebe en noviembre y antes del tratamiento de la ley de leyes, un proyecto de ley de sus legisladores que busca desdoblar las elecciones municipales de las provinciales y nacionales: esto es, que los intendentes puedan ser electos en una fecha distinta al gobernador y el presidente. Vidal, quien está a priori en contra, quedó en dar una respuesta en los próximos días.