En un acto conmemorativo del Día de la Industria celebrado en Ituzaingó, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, presentó oficialmente el Régimen Provincial de Inversiones Estratégicas. Este proyecto, que busca impulsar el desarrollo industrial y económico de la provincia, se posiciona como una alternativa al modelo antiindustrial propuesto por el gobierno nacional de Javier Milei.
El evento, que tuvo lugar en la sede de la empresa Traverso Alerjú S.A., contó con la presencia de más de 50 representantes de sindicatos y empresarios de diversos sectores industriales, incluyendo construcción, alimenticio, textil, automotriz, metalmecánico, naval, petrolero y farmacéutico, entre otros.
Kicillof, acompañado por su gabinete y funcionarios provinciales, delineó los puntos clave del llamado “RIGI bonaerense”:
- Exenciones fiscales: El régimen establece beneficios como exenciones sobre los impuestos de Ingresos Brutos, Inmobiliario y de Sellos. Estas varían según el monto de la inversión, desde un 30% durante cinco años para inversiones de hasta USD 50 millones, hasta un 20% durante tres años para inversiones superiores a USD 200 millones.
- Beneficios adicionales: Se ofrecen incentivos extra para proyectos que fomenten la sustitución de importaciones, la innovación tecnológica, el aumento del empleo, la localización en zonas de bajos ingresos, el incremento de exportaciones, la adopción de políticas de género y la sostenibilidad ambiental.
- Desarrollo de proveedores locales: Para inversiones superiores a USD 50 millones, se exige que al menos el 50% de los pagos a proveedores sean destinados a empresas radicadas en la provincia de Buenos Aires.
- Sectores prioritarios: El RIGI bonaerense se enfoca en iniciativas para desarrollar nuevos procesos productivos, construir nuevas plantas o ampliar instalaciones en la industria manufacturera, sectores vinculados a servicios o de uso intensivo de recursos naturales.
El gobernador enfatizó la importancia de este proyecto en el contexto económico actual:
“No podemos aceptar que la única forma de recibir inversiones en Argentina sea la de primarizar, la de rifar recursos naturales y la de no agregar valor a lo que tenemos”, declaró Kicillof. “Por eso lo que presentamos es una ley que reconoce y un régimen que acompaña a quienes inviertan para generar más valor agregado, para generar empleo de calidad, para desarrollar proveedores locales, para incluir nuevas tecnologías, para diversificar nuestra matriz productiva, para aumentar exportaciones, pero también sustituir importaciones”.
El ministro de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica, Augusto Costa, respaldó la iniciativa, destacando que “nuestro régimen provincial de desarrollo productivo y fomento de inversiones es un régimen de industrialización, de generación de producción y generación de trabajo”.
Kicillof aprovechó la ocasión para criticar duramente las políticas económicas del gobierno nacional, calificando la gestión de Milei como una “tremenda estafa electoral”. Señaló indicadores alarmantes, como una caída del 7,9% en la actividad económica, un 16% en la industria y un 23% en el consumo.
El gobernador también abordó la reciente eliminación de subsidios nacionales al transporte público, advirtiendo sobre su impacto en los trabajadores bonaerenses:
“Esto que llaman ahora reducir los subsidios no es otra cosa que encarecer a precios internacionales el transporte interno. Esas tarifas de transporte no eran más que salario indirecto”.
Kicillof concluyó su intervención con un llamado a la acción:
“Nos tenemos que comprometer a emplear todos los recursos que tengamos, a utilizar todos los micrófonos, a utilizar todos los ámbitos donde podamos, para explicarle al pueblo de la provincia de Buenos Aires que no hay Nación sin industria”. Y añadió: “Cuenten con el gobierno de la provincia de Buenos Aires como red y como escudo contra las políticas del Gobierno nacional”.