En la novena sesión ordinaria del año, que se relizará este jueves 24, está previsto que el Concejo Deliberante trate la postergada suba del 26% en el pasaje del transporte urbano de pasajeros.
De ser aprobado, la tarifa plana en la primera sección pasaría a costar $59,40, aunque el importe promedio se situaría en los $33,70. Para su entrada en vigencia, será necesaria la promulgación del jefe comunal y la adecuación del sistema SUBE, que se hace desde la Nación.
El tema del aumento iba a ser incluido en el orden del día de la sesión del 10 de junio, pero la negativa de los concejales Marisa Pignatelli y Carlos Antunes, de la Coalición Cívica e integrantes del bloque oficialista de Juntos por el Cambio, a firmar el despacho de comisión hizo imposible el tratamiento en esa fecha.
Los concejales pedían una semana más para analizar los números que había remitido el Ejecutivo en el proyecto presentado en mayo.
“Creíamos que algo tan sensible como esto requería de un análisis más pormenorizado”, dijo la concejala Pignatelli antes de aquella sesión.
Otra objeción que tenían los ediles era la cláusula de actualización para marzo de 2022 sin intervención del Concejo que tenía el proyecto, punto que fue retirado del texto de la ordenanza.
Pignatelli y Antunes pertenecen al mismo espacio político -la Coalición Cívica- que integra el senador provincial Andrés de Leo, quien a principios de junio presentó un proyecto de ley para establecer un mecanismo de distribución con reglas fijas para los subsidios al transporte.
De Leo señala que hoy ese reparto se hace discrecionalmente, con lo que los distritos del conurbano bonaerense resultan más beneficiados que los del interior de la provincia.
Por otra parte, en las últimas horas, el ministro de Transporte, Marcos Farina, anunció que la Nación incrementará en $8.000 millones este año la ayuda para el transporte público de las provincias.
