La Dra. en Historia Ana Belén Zapata conversó con Juan Ignacio Guarino y Victoria Aure sobre la historia reciente de Bahía Blanca, al aire de El Ágora en Radio Nacional. En nuestra ciudad se está realizando el juicio a la Triple A local y Zapata, investigadora de CONICET, declaró como testigo de concepto para graficar el clima que se vivía en aquellos años de terrorismo paraestatal.
Durante la entrevista, la historiadora ayudó a vislumbrar los procesos históricos que configuraron el escenario de represión que se vivió en las víspera del último golpe de estado cívico-militar, analizando -entre otros temas- la construcción del polo petroquímico, la conflictividad sindical y las declaraciones como testigos de la defensa por parte de las autoridades del PJ Bahía Blanca, Mario Simón y Hugo Álvarez.
“En el Juicio se visibilizaron cuestiones que en los otros juicios de lesa no habían quedado tan claras, una tiene que ver con el entramado civil, no solo por los imputados que son civiles, sino también por un conjunto de situaciones respecto de la participación mediática, la judicial. Y otra cuestión que me parece muy importante es cómo aparecen ciertos procesos estructurales que marcaron a la ciudad y a la región y cómo esos procesos se relacionaron mucho con este contexto de conflictividad y también de avanzada represiva, de instauración de la doctrina de seguridad nacional, de la guerra fria. En ese marco creo debe ser pensado la instauración y construción de Polo Petroquímico que fué sumamente importante para la ciudad, la zona y la época también”.
“En el juicio escuchaba a la querella relatar que hay 24 víctimas en este juicio y 5 corresponden a trabajadores que o estuvieron en la planta de Techint en la construcción de la petroquímica o de alguna forma se relacionaron con ella, eso me parece sumamente importante porque es un porcentaje alto, 5 de 24, hay ahí un indicio de algo” agrega.
“Hay que remontarnos más atrás para pensar todo ese proceso, pensar en finales de los ’60 y recién tenemos la apertura en el ’81, es un proceso muy extenso” explica y desarrolla:
“Primero esa instauración (del Polo) tenemos que pensarla en el marco de las politicas desarrollistas y modernizadoras de los gobiernos de facto, de la Revolución Argentina a finales de los ’60, pero también fueron proyectos que continuaron , primero una propuesta de la Dow Chemical a finales de los ’60, que fué virando , fué un proceso sumamente complejo que respondió a una política, un plan de desarrollo que miraba a Bahía Blanca como un polo de desarrollo central para la provincia en esa época”.
“En términos de lo sindical, de lo que significó para el movimiento obrero de la época, es muy importante, porque pensar a Bahia como polo de desarrollo implicó también obras públicas que se motorizaron, obras civiles, cuando hablamos del sector de la construcción hablamos de un sector muy numeroso y fuertemente movilizado en términos de organización, de organización política, en la UOCRA lo que fué la gestión Bustos hasta principios del año ’74, fue un gremio que primero se vinculó muchísimo con otros sectores de la sociedad y que no solo hizo política hacia adentro sino que se visibilizó y hacia política en las calles”.
En esa misma línea, se refirió al frente de masas que se referenciaba en la conducción de los Bustos:
“El frente de masas de la tendencia revolucionaria de la juventud de trabajadores peronistas se va vincular fuertemente con otros frentes de masas de la propia tendencia pero de otros sectores, en la universidad, en sectores barriales, el abogado de la UOCRA era Víctor Benamo, que fué interventor de la Universidad durante la primavera camporista, y ese vinculo era muy fuerte, la politización es muy fuerte y se vincula a movilizaciones que fueron emblemáticas, por ejemplo la columna sur de trabajadores que fué a recibir a Perón a Ezeiza, esa organización partió en gran medida de la UOCRA y los responsables y referentes organizaron ese sector, que todos sabemos como terminó, recuerdo el diputado Mario Medina, que era cuñado de los Bustos me contaba que llos organizaron toda esa columna y después de toda esa situación quedaron recorriendo los hospitales de Buenos Aires buscando compañeros, procurando que vuelvan todos sanos, me contaba que no lamentaron heridos por lo bien que estaban organizados”.
En referencia específica al sector de la construcción, señaló:
“Era un sector muy numeroso, hay un disciplinamiento temprano hacia principios del ’74 cuando se dió la intervención de la UOCRA, una avanzada del sector de derecha del peronismo a disciplinar a este otro sector, es interesante ver como opera eso en lo que vino después, finalmente todo el proyecto de construcción de la UOCRA se terminó dando, consolidado y cerrado con moño durante el gobierno de Viola en el ’81, con un superacto con todos los sectores de la Corporación del Comercio y de la Industria, de los altos mandos militares, el propio Martinez de Hoz se llegó hasta la planta, claramente era un proyecto que tenia que darse sin resabios de sectores que veian como potenciales subversivos, como peligrosos para la concreción final de este proyecto”.
También se refirió a Rodolfo Ponce, Secretario General de la CGT en ese entonces, y principal referente de la Triple A en Bahía Blanca:
“Ponce fué un referente que surgió en gremio que en comparación con la UOCRA nada que ver en potencia y número de afiliados y demás, ahí hay otras cuestiones que son muy claras, estos sectores funcionaban en distintos sindicatos ligados a la actividad portuaria, la Junta de Granos, la oposición que se dá dentro del sector sindical y del movimiento peronista tiene expresiones de contraste y choque en los distintos gremios, atraviesa los distintos gremios, en la UOCRA se polariza a partir de la intervención donde cambia el signo político y esos sectores van a tener mucha más capacidad de acción y van a tomar el sindicato a partir de este momento, el grupo paraestatal empieza a tener otra estructura, otra posición, en la universidad les dan recursos, les dan vehiculos al grupo y le da una posibilidad de acción mucho más libre y más contundente, hay un salto cualitativo “.
Sobre el final, repudió las declaraciones de Mario Simón y Hugo Álvarez, presidente y vicepresidente del PJ bahiense respectivamente, quienes se presentaron en el juicio como testigos a favor de la defensa y dijeron desconocer la existencia de la Triple A en aquél entonces:
“Las declaraciones me parecieron de tono cínico, es casi imposible pensar que personas que tienen ese nivel…
Yo entrevisté muchísimos trabajadores que no tenían un encuadre, sindical o político, laburantes de base que vivieron estos procesos, afectados por lo que significó la lisa y llana violencia en la ciudad, pero por ahí habia cosas que se les pasaban porque era logico que al no tener ese encuadre y una gimnasia sindical más ávida, era entendible que ciertas cosas se les escapen…
Ahora me parece rayano en lo cínico que personalidades que son representantes y referentes del PJ, y han tenido una militancia en esa época digan que no conocian o desconocian, no puedo verlo de otra manera, incluso me parecio hasta poco inteligente, muy burdo, un intento escapista de evadir la situación” concluyó.