La gobernadora María Eugenia Vidal le pidió a Julio Conte Grand, procurador de la provincia de Buenos Aires, atacar al presidente de la Corte Suprema Bonaerense, Eduardo de Lazzari. La gobernadora quiere dejar en claro que los jueces de la provincia tienen que ubicarse, como lo hacen los de Comodoro Py.
Lazzari quedó en el ojo de la tormeta cuando advirtió sobre el exceso de testigos de identidad reservada, escuchas ilegales, espías, arrepentidos, anónimos, presión mediática y política.
Ayer, Conte Grand le solicitó al Poder Judicial que investigue los dichos del presidente de la Corte Suprema bonaerense. De Lazzari rápidamente replicó recordándole algunos casos como el del fiscal de Mercedes (Juan Ignacio Bidone, imputado en la Causa de Dolores), la misma causa que tramita en Dolores Ramos Padilla hijo, o el juicio político contra el juez Carsoglio tras el apriete por agentes de la AFI para que mande preso a los Moyano.
Respaldos a De Lazzari
Luego del ataque conjunto a De Lazzari por la gobernadora y el procurador, la Asociación de Magistrados de la Provincia de Buenos Aires a cargo del Dr. Víctor Violini, salió en respaldo del presidente de la Corte Suprema provincial.
Los dichos de De Lazzari generaron un gran impacto ya que el diagnóstico fue lapidario además de acertado. Se trata de un jurista muy prestigioso, que se ha ganado el respeto a través de una carrera intachable e independiente. Sus palabras expresaron la creciente presión que se siente en el poder judicial y que resulta evidente en los expedientes.
Efectivamente, no son pocos quienes creen que hay una simbiosis o maridaje entre la Gobernación de Buenos Aires, el Ministerio Público en manos de Conte Grand, la AFI y Casa Rosada.
Por otra parte, con su accionar y sus presiones al poder judicial, al atacar al presidente de la Corte Suprema Bonaerense la gobernadora dejó más en claro que nunca que Vidal es Macri.