Si bien la situación económica fue puesta en el foco después de los resultados de las elecciones primarias, varios indicadores señalan un inesperado crecimiento económico. Actualmente, la economía se encuentra en los niveles que manejaba previo a la pandemia,y en algunas áreas incluso muestra números mejores a los del 2018.
En primer lugar, el EMAE del Indec creció 0,8% sin estacionalidad en julio contra el mes previo. Impulsada principalmente por la industria y el comercio, en lo que va del año acumula un crecimiento interanual del 10,5%, aunque esto se compara contra un período de fuerte desplome por la casi nula operación de varios sectores ante el COVID.
Se aprecia esta mejoría al ver la película entera: la actividad económica se ubica prácticamente en los niveles pre-pandemia, apenas un 0,8% por debajo de febrero de 2020.
“Se ve ahora una continuidad de la mejora, que se nota principalmente en la industria. Después de la debacle que sufrió en el gobierno de (Mauricio) Macri retomó un sendero de crecimiento y lo sostiene. Esto más allá de cierto estancamiento en el momento en que recrudeció un poco la pandemia, de abril a junio”, resaltó Martín Kalos, economista de la consultora EPYCA.
Puntualmente, la recuperación de la actividad industrial argentina es una de las más importantes a nivel global. En el ranking elaborado por el Centro de Estudios para la Producción (CEP XXI), el país se encuentra sólo detrás de la República Popular China.
En julio, la producción fabril de Argentina fue 5,6% mayor a la de la misma etapa de 2019 y 3,8% que la de 2018, según estadísticas del INDEC. Chile y Estados Unidos estuvieron por debajo, con crecimientos del 2,8% y 0,9%, respectivamente.
En tanto, el centro de estudios que funciona en la órbita del Ministerio de Desarrollo Productivo precisó que en Brasil las manufacturas cayeron 1,5% contra julio de 2019; en España 5,4%; en Francia, -10,4%; en Italia, -4,5%; en India, -2,1%; en México, -3,0%; en Alemania, -9,0%; y en Japón, -6,2%.
En cambio, China se posicionó por encima en el nivel de actividad industrial en igual período, con un alza del 11,5% en julio.
El director del CEP XXI, Daniel Schteingart, encontró las razones de esto en:
“El giro en la política industrial, la baja de las tasas de interés que generó una ecuación de costos más favorable, la crisis de los semiconductores en la industria automotriz global, y la brecha cambiaria que impulsó la demanda de bienes durables”.
Según los datos del SIPA conocidos la última semana, también continúa la recuperación del empleo privado.
La pandemia generó una destrucción neta cercana a los 190 mil puestos de trabajo privados, a los que se le deben sumar por la crisis previa generada por el colapso económico de la gestión de Cambiemos (que costó 275 mil puestos, es decir: un 44% más que la pandemia).
Desde agosto 2020 el sector privado recuperó más de la mitad de los puestos perdidos durante la pandemia (103 mil puestos registrados).
“Un caso testigo del dinamismo es la industria: su recuperación ha sido tan positiva que actualmente se superaron los niveles pre-pandémicos e, incluso, se recuperaron también más de 20 mil puestos de trabajo perdidos durante el último año del gobierno de Cambiemos”, apuntó Valentina Castro, de CEPA.
“Recordemos que, en materia de empleo industrial, Cambiemos fue 10 veces más grave que la pandemia”, graficó la analista económica.
En la construcción, los niveles de empleo ya superaron previos a la pandemia. El presidente de la Cámara Argentina de la Construcción, Iván Szczech, informó que en agosto el sector ocupó a 345 mil personas, superando el registro previo a la crisis del COVID.
Pero, además, las expectativas netas de las empresas en relación a la contratación de personal para los próximos tres meses resultan positivas (+4,2%), con lo que consolidan la tendencia creciente observada desde hace cinco meses, tal como confirmó la Encuesta de Indicadores Laborales de octubre. Alcanzó así el mayor valor desde mayo de 2018, precisó Daniel Schteingart en Twitter.
Se recuperan las expectativas empresarias de generación de empleo. El % de empresas que prevé que la dotación de personal aumentará en los próximos meses (menos el % que prevé que disminuirá) alcanzó el mayor valor desde mayo de 2018. pic.twitter.com/sw8S4Mgp5L
— Daniel Schteingart (@danyscht) October 1, 2021
Este indicador surge de la diferencia entre la proporción de compañías que esperan aumentar sus dotaciones y aquellas que esperan disminuirla: del 7% de las que declaran que harán cambios en sus dotaciones en el siguiente trimestre, el 5,6% espera aumentar la dotación y apenas el 1,4% estima que la reducirá.
“Estas expectativas, que resultan mejores a las observadas en los meses previos a la irrupción de la pandemia, permiten vislumbrar un escenario de expansión en la medida que continúe normalizándose la actividad productiva”, resaltó el Ministerio de Trabajo en su reporte de la EIL.
También en agosto las exportaciones llegaron a US$ 8.093 millones, el nivel más alto en ocho años (mayo de 2013). El salto de las ventas externas fue del 63,3%, casi a la par del crecimiento del 64% de las importaciones, que sumaron US$ 5.754 millones. Con esto el superávit comercial llegó a US$ 2.339 millones, el mayor valor desde noviembre de 2019.
A la mejora en la industria, la construcción y la actividad de los servicios, se sumó en los últimos meses la mejora en el consumo.
De la mano de una leve recuperación del poder adquisitivo, la demanda de los hogares creció en julio hasta superar los niveles del 2020 y los de 2019, el último año del macrismo.
Las ventas en supermercados ascendieron a 125.664 millones de pesos durante julio, de acuerdo al INDEC. Esto implicó una mejora a precios constantes del 4,2% respecto de igual mes de 2020 y del 5,1% contra 2019.
“El poder adquisitivo de la gente, de a poquito, está mejorando”, explicó al respecto el presidente de la Cámara Argentina de Distribuidores Mayoristas, Víctor Fera.
“Las ventas vienen subiendo y la inflación viene bajando lentamente”, apuntó. El empresario consideró que “si la gente tuviera un poquito más de sueldo, yo creo que el país se empieza a nivelar”. “Argentina es un país que se recupera rápido cuando el PBI crece”, valoró esta semana en declaraciones radiales.
Un indicador que puede interpretarse como un aliento de una mejor perspectiva para lo que se viene es la confianza del consumidor que mide el índice de la Universidad Di Tella: subió 1,9% en septiembre. Por tercer mes consecutivo mejoró el humor de los argentinos, pese a que se deterioró la situación personal.
Este indicador revela que, a pesar de que la crisis económica y social no terminó, una mayor proporción de la población finalmente empieza cambiar sus expectativas.
El ICC suele ser un anticipo de lo que va a pasar, previsor de una mejora. Con los tres meses consecutivos de alza es “suficiente para revertir la tendencia de caídas anuales acumuladas que mostraba el índice desde mayo 2020″, destacó el informe del Centro de Investigación en Finanzas.