El gobierno nacional comenzará a reactivar la obra pública en el interior del país, en plena cuarentena por el coronavirus, y progresivamente se intentará retomar la actividad en el Conurbano bonaerense. Esta disposición fue acordada por el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, con el Secretario General de la UOCRA, Gerardo Martínez, y empresarios del sector.
En una primera etapa de negociación, Katopodis logró que los empresarios no despidieran trabajadores. Como contraparte, el Ministerio comenzó a liquidar las deudas que había dejado la gestión de Mauricio Macri.
En las últimas reuniones virtuales se analizó puntualmente qué obras pueden ser reactivadas y se armó un listado de 240 obras en todo el país. Entre ellas hay obras hídricas, de Vialidad Nacional y del programa Argentina Hace. Todas las obras se consensuaron con los gobernadores.
Para avanzar con la reactivación, se consensuó un protocolo sanitario con la UOCRA y la Cámara Argentina de la Construcción para evitar que haya contagios en las obras.
En el interior, la situación es más simple en tanto los trabajadores acuden en camionetas a las obras. Antes de abordar se les toma la temperatura, lo mismo antes de dejarlos en su domicilio.
En Conurbano la situación reviste mayores dificultades, principalmente porque los trabajadores se trasladan en transporte público.