La candidata presidencial de Juntos por el Cambio Patricia Bullrich, publicó este miércoles un documento de 86 páginas que denominó “Un país ordenado” en donde figuran sus propuestas de Gobierno en caso de ser elegida presidenta de la Nación. Allí se destaca la idea de una “colimba” cívica para jóvenes, una reforma laboral, el aval al gatillo fácil, represión a la protesta social y una drástica reducción del Estado.
La candidata de JxC compartió sus principales propuestas con “objetivos estratégicos” como “reordenar la economía para terminar con la inflación”, realizar una “reforma del Estado integral” y “potenciar la producción” del país.
Además de lo ya propuesto por Bullrich como “eliminación de la brecha de tipos de cambio y de las retenciones“, la “autonomía del Banco Central con prohibición de financiamiento al Gobierno“, el “bimonetarismo” y la implementación de “déficit cero inmediato” de las cuentas públicas, el documento ahonda en otros temas no tan recurrentes.
Nuestras propuestas de gobierno para #UnPaísOrdenado. 👇https://t.co/POJ7HUXmhh
— Patricia Bullrich (@PatoBullrich) September 6, 2023
Colimba para jóvenes
Entre las propuestas más polémicas se encuentra la instauración de un “servicio cívico voluntario en valores“, un programa que dirigido “a jóvenes de 18 a 25 años sin secundario y sin trabajo“, que brindará “oportunidades de formación, fomento del compromiso personal y comunitario”.
Este plan ya había sido impulsado por Bullrich en 2019 cuando estaba al frente del Ministerio de Seguridad, tuvo 1.200 inscriptos y fue administrado por la Gendarmería Nacional.
El plan se enmarca dentro de la categoría de propuestas sobre trabajo y seguridad social. Allí también se encuentra una reforma laboral que barrería con derechos adquiridos de los trabajadores, como la ultraactividad.
El programa confirma la decisión de “actualizar los convenios colectivos, incluyendo la eliminación de la ultraactividad y la negociación de nuevos convenios acordes al mercado laboral actual” y fomentar “la negociación de convenios por empresa“. Como parte de la reducción de costos laborales, el programa vuelve a la carga sobre la organización gremial al proponer “eliminar los aportes solidarios y las contribuciones previstas en los convenios actuales“.
En cuanto a las “políticas sociales“, la exministra de la Alianza propone la eliminación del programa Potenciar Trabajo y reconvertirlo “desde el primer día ” en un “seguro de desempleo temporal“.
“Con el sistema de seguro de desempleo las personas con este plan social deberán demostrar mensualmente que buscaron empleo, asistieron a una institución educativa o se capacitaron en un instituto de formación profesional”, indica.
Educación y el CONICET
La cruzada de Juntos por el Cambio contra los sindicatos también está presente en el capítulo de Educación del programa, en el que se habla de “declarar la educación servicio esencial” y menciona que “el derecho de huelga no debe estar por encima del derecho de los chicos a aprender“. En ese marco, también proponer evaluar la calidad de los Institutos de Formación para mejorarla calidad de los docentes.
A nivel universitario, Bullrich no propone la privatización pero sí contempla una modernización del sistema universitario, con reducción en la extensión de las carreras y el enfoque de estudio y investigación en “temas estratégicos para el país a través de acuerdos público-privados“. Lo que en pocas palabras significa reducir la cantidad de carreras disponibles, dejando y/o creando solo aquellas que considere “estratégicas”.
En tema de investigación, la candidata de Juntos por el Cambio no habla del cierre del CONICET, pero señala que “ha sufrido cierta partidización y desviación de sus objetivos“, por lo que propone “vincularlo fuertemente con el sector productivo, mediante asociaciones público-privadas para la investigación y desarrollo”. Lo que en la práctica sería una semi-privatización.
Reforma del Estado
Además, aseguró: “Vamos a bajar los ministerios a la mitad” y, si bien no precisa cuáles son los que dará de baja, señala que “tendremos solo los ministerios indispensables para dar los servicios que la población necesita“.
El documento, además, impulsa “reducir a su mínima expresión los cargos políticos” y una “racionalización de las empresas públicas” como parte de la “reforma del Estado”.
“El objetivo es que no produzcan gastos, es decir déficit, al Estado. Deberán presentar sus planes de negocio y tendrán fechas límites para ordenarse y autofinanciarse“, explica.
Como ejemplo de esto, el documento señala a Aerolíneas Argentinas, la cual “luego de un período de transición breve” dejará de “recibir subsidios estatales“.
El programa de la candidata de JxC habla de un “aumento de la conectividad aérea, generando la llegada de nuevas aerolíneas y vuelos directos entre provincias“, algo similar al plan de “cielos abiertos” propuesta por la gestión de Mauricio Macri.
Otro de los objetivos a privatizar es la Hidrovía Paraná-Paraguay:
“La Hidrovía es un componente fundamental para el desarrollo y la competitividad de la economía argentina. Por ella circula la mayoría del comercio exterior del país. Debemos volver a contar con un contrato de concesión que sea competitivo, administrado por el sector privado y controlado por la Subsecretaría de Vías Navegables”, exigió Bullrich.
Seguridad, represión y gatillo fácil
El programa de Bullrich menciona algunas ejes de intervención de las fuerzas de seguridad para mejorar la seguridad ciudadana y la convivencias, pero dedica buena parte del programa a un plan apuntada a la criminalización de la protesta social.
El programa de gobierno promete “orden público” al señalar que se va “a terminar con los bloqueos, las ocupaciones y los cortes ilegales” a partir de “un marco legal para la realización ordenada de manifestaciones” y la que serán prohibidas manifestaciones “ilegales“, que bloqueen actividades y movilidad de los ciudadanos.
En tanto, Bullrich plante un programa de “cuidar a los que nos cuidan“, que vuelva a poner sobre la mesa las resoluciones ministeriales con la que institucionalizó el gatillo fácil durante su gestión ministerial. La candidata presidencial propone “la reforma del artículo 34 del Código Penal para establecer la legítima defensa especial para los agentes que, en servicio o fuera de él, intervengan para defender la vida, la integridad física, la libertad o la propiedad de las personas“.
Este punto está estrechamente vinculado con el caso del policía Luis Chocobar, quien en 2021 fue condenado a dos años de prisión en suspenso por “exceso en el cumplimiento del deber“, cuando asesinó a un delincuente por la espalda, que escapaba tras un intento de robo y haber apuñalado a un turista.
Bullrich recibió a Chocobar, lo apoyó públicamente y, tras la condena que recibió entonces el oficial, le dijo: “Vos hiciste todo lo que tenías que hacer, todo lo que tiene que hacer un buen Policía”.
Además, Bullrich busca reformar el Código Procesal Penal para “restringir el uso abusivo de la prisión preventiva respecto al personal policial“.
También vuelve a poner sobre la mesa la Ley de Derribo, rechazada durante el gobierno de Mauricio Macri. Esta ley pensada para derribar aviones sospechados de actividades ilegales fue cuestionada por ser de facto una pena de muerte.
Por otro lado, el programa “impulsa la baja de la edad de imputabilidad” y pretende “modificar el régimen de menores que delinquen, para solucionar un vacío legal y evitar que los menores sean usados por redes delictivas”.