La jueza estadounidense Loretta Preska emitió un fallo en favor de la República Argentina en el caso Cupón PBI de 2019, en el que fondos supuestamente perjudicados por el no pago del cupón en 2014 reclaman al país cientos de millones de dólares.
La jueza del Distrito Sur de Nueva York falló en favor de Argentina en el expediente que investiga los cupones atados al PBI que habían sido emitidos en 2005 para canjear deuda defaulteada en 2001.
Los estrados ingleses habían dado la razón a los tenedores de bonos (que en 2013 tenían alrededor del 48% de los títulos), que habían acusado al país de reducir sus beneficios debido a la supuesta manipulación de los datos del PBI nacional realizados por Guillermo Moreno (entonces al frente del INDEC).
En este contexto, el Estado Argentino había sido condenado a pagar 1330 millones de euros, a los que se suman intereses, en relación con todos los títulos vinculados al PBI, aunque Argentina tuvo el permiso para impugnar esa sentencia.
Así, la abogada Tamara Oppenheimer explicó ante el Tribunal de Apelación que la decisión causaría “perjuicio al pueblo de Argentina“, pidiendo que sea reconsiderada. Finalmente, la solicitud fue aceptada.
Entre tanto, la magistrada no se refirió a la decisión de cambiar la formula del crecimiento de la economía, sino que apuntó al no cumplimiento de requisitos estipulados en el “no action clause” por parte de los acreedores como fundamento de su decisión, lo que permitirá al país evitar pagar 1.300 millones de euros.