En las elecciones provinciales de Jujuy, Gerardo Morales logró imponer a su candidato Carlos Sadir, por el Frente Cambia Jujuy, como su sucesor con el 49,52% de los votos. En los festejos, el gobernador electo ocupó un rol secundario mientras Morales y Larreta se arrogaron el centro del escenario, nacionalizando la elección.
Este 7 de mayo, la ciudadanía jujeña se movilizó para elegir al sucesor del Gobernador radical Gerardo Morales, titular de la Unión Cívica Radical (UCR) a nivel nacional.
Con el 98,64% de las mesas escrutadas, quien fuera el ministro de Economía de Morales, Carlos Sadir (Cambia Jujuy) venció con el 49,52% de los votos. En tanto, en segundo puesto se ubica el candidato del Frente Justicialista, Rubén Rivarola, con el 22,32%.
Le siguen Alejandro Vilca del Frente de Izquierda y de Trabajadores (12,81%), Juan Cardozo de Unidad por Jujuy (6,66%) y Cecilia García Casasco de VIA + Libertarios (3,33%).
A continuación, se encuentran Rodolfo Tecchi de Jujuy tiene Futuro (3,24%), José Gabriel Chocobar del Partido Libres del Sur (1,23%), y Iñaki Aldasoro de Política Obrera, con el 0,89% de los votos.
La centralidad de Morales
El líder radical se aprovechó de la división del peronismo -que peleó con el FIT por el segundo puesto- y la presencia de su nombre en la lista de convencionales constituyentes para arrogarse para sí el triunfo provincial, asegurando que el resultado muestra el grado de aceptación que su gestión tiene en la ciudadanía jujeña. Nuevamente, Morales hizo gala de su discurso donde reivindicó el encarcelamiento de la lider social Milagro Sala.
Morales buscó maximizar el triunfo en Jujuy para plantarse con más autoridad en la interna de Juntos por el Cambio. El jujeño -todavía montado a su precandidatura presidencial- logró consagrar una foto federal del radicalismo, y la figura “ajena” invitada fue el Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
El montaje final de la foto, con ambos pegados, codo a codo, relegando al límite del cuadro a Carlos Sadir, gobernador electo, da muestra que la celebración buscó plantar la imagen de una posible fórmula presencial Larreta-Morales. En definitiva, la foto no era para Jujuy, sino para Buenos Aires.
El jujeño buscó, además, mostrar el músculo territorial de la UCR en el interior del país, a sabiendas de que el conurbano bonaerense es la zona donde no logra hacer pie. Allí pesa más el PRO, que irradia desde la Capital Federal que gobierna Larreta.
En el escenario montado hotel Altos de La Viña también estuvo presente el senador y precandidato a Jefe de Gobierno de CABA Martín Lousteau y el diputado todoterreno Emiliano Yacobitti, los alfiles del radicalismo porteño.
Y para incomodidad de Larreta, Morales aprovechó el aire triunfador para presentar a Lousteau como: “Este es el que te va a reemplazar, si Dios quiere. Estamos trabajando fuerte para eso”, le dijo en referencia al senador.
El alcalde porteño se incomodó. El radicalismo apuesta todo a recuperar la Ciudad de la mano del líder de Evolución. Es el único distrito en manos del PRO.
Morales luego presentó al actual intendente de CABA como “un candidato a presidente, como yo”.
A su turno Larreta lo felicitó por la gestión -la cual identificó con la suya– y llamó a consolidar los triunfos de Juntos por el Cambio “provincia a provincia”, para terminar en el triunfo nacional. El jefe de gobierno porteño le devolvió los elogios a Morales y hasta se dio el gusto de robarle a su competidora en la interna del PRO, Patricia Bullrich, la palabra que la exministra eligió como lema de campaña: “Orden”.
“Este es un triunfo del trabajo, un reconocimiento de todos los jujeños a una muy buena gestión de gobierno de Gerardo, a una gestión transformadora”, aseguró.
“Es un reconocimiento al orden, podemos vivir en una Argentina en paz, bajando los decibeles, garantizando la legalidad”, agregó.
Cabe recordar que para estos comicios, la Justicia jujeña -controlada por Morales- proscribió la candidatura del senador del Frente de Todos Guillermo Snopek, quien había denunciado “pactos espurios” entre el radicalismo de Morales y un sector del peronismo local.
Por su parte, el candidato del Frente de izquierda, Alejandro Vilca, no logró el esperado segundo puesto que creía tener asegurado. El candidato del PTS logró consolidar el tercer puesto que ya había logrado en las elecciones legislativas de 2021, pero achicando su margen de votos. Sin embargo, en medio de denuncias por robo y roturas de boletas, el trotkismo realizó en Jujuy su mejor elección histórica a gobernador -en cualquier provincia- desde 1983.