El Gobierno decidió cerrar las exportaciones de carne por al menos un mes para contener la suba indiscriminada de precios al consumo popular. Así se lo informaron fuentes oficiales a empresas del sector nucleadas en el consorcio ABC, a las que les aseguraron que el cierre será por un mes.
“Como consecuencia del aumento sostenido del precio de la carne vacuna en el mercado interno, el gobierno nacional decidió la instrumentación de un conjunto de medidas de emergencia tendientes a ordenar el funcionamiento del sector, restringir prácticas especulativas, mejorar la trazabilidad de las exportaciones y evitar la evasión fiscal en el comercio exterior. Mientras se terminan de implementar tales medidas, las exportaciones de carne vacuna estarán limitadas durante un período de 30 días”, comunicaron desde la Casa Rosada.
La misma gacetilla aclaró que:
“El Presidente informó a los representantes del consorcio ABC que dicho período podrá verse reducido en el caso de que la implementación de las medidas antes señalada genere resultados positivos, al tiempo que se habilitarán mecanismos de excepción para operaciones en curso”.
Esta medida estaba en estudio en la Casa Rosada como una señal concreta para frenar el traslado al mercado local de la suba del precio internacional. Cortes populares de carne habían acumulado en los últimos doce meses subas de más del 70%, lo que arrastró el consumo a mínimos históricos.
Por eso la economista y diputada Fernanda Vallejos también había recomendado que se pusieran cupos a las exportaciones para garantizarle al mercado interno al menos el equivalente a los 50 kilos per cápita, aunque su recomendación incluía también políticas para fomentar la producción de modo tal que crecieran las exportaciones.
El domingo por la noche en una entrevista al canal C5N, Alberto Fernández había asegurado que la inflación que no cede del 4% mensual era culpa de los empresarios, ya que los sindicatos estaban cerrando paritarias por debajo del 35% en promedio y otros componentes del IPC subían incluso menos, mientras que los empresarios del sector alimenticio tenían abultadas ganancias.
“Lo único que ha pasado es que algunos han dicho ‘aprovechemos el momento’ y han ganado lo que no debían ganar“, aseguró.
En los últimos doce meses, los principales cortes de carne vacuna aumentaron por encima de la inflación: el asado subió un 81,5%; el matambre, un 76,6%; la tapa de nalga, un 65,6%; el lomo, un 62,5%; la picada, un 61,5% ;y el osobuco, un 60,2%, según datos oficiales.
Las medidas del sector
El cierre de exportaciones generó la reacción inmediata de terratenientes que rechazaron de plano la medida. Varios dirigentes del sector manifestaron su bronca en redes sociales advirtiendo por los daños que causará la suspensión dispuesta este lunes por Alberto Fernández.
Los directivos de la Mesa de Enlace, por su parte, ya empezaron a mantener conversaciones informales en diversos chats grupales en los que participan. Los dirigentes de las cuatro entidades rurales mantendrán reuniones este martes en el seno de sus organizaciones.
“La idea es analizar con los productores qué medidas vamos a tomar. Una vez que tengamos un diagnóstico certero nos reuniremos con la Mesa de Enlace para anunciar un paro, un cese de comercialización o lo que surja del pedido de las bases”, adelantó un importante dirigente.
En una de las cuatro entidades del campo ya se está planteando directamente un cese de comercialización de granos y hacienda por 10 días o más. Esta medida podría incluir manifestaciones al costado de las rutas y una campaña mediática.
En la Casa Rosada, por su parte, adelantan que en estos 30 días que en principio duraría la medida se tomarán medidas en el Mercado de Liniers con el objetivo de “acomodar los precios” y no descartan que, una vez reabiertas las exportaciones de carne, se suban las retenciones del 9 al 15%.
El Presidente de la Sociedad Rural (SRA), Daniel Pelegrina, salió al cruce de la medida:
“El cierre de exportaciones de carne por 30 días es un error y un paso atrás. Causará un daño irreparable a un sector productivo que ha demostrado que genera empleo y actividad en todo el país”.
“El daño que provoca la medida va a disminuir la oferta de carne, haciendo que los precios terminen subiendo como ya ocurrió en el pasado. Es inconcebible que se elijan recetas que ya fracasaron a falta de las soluciones de fondo que Argentina necesita”, agregó Pelegrina.
El titular de Confederaciones Rurales (CRA), Jorge Chemes, también se expresó al respecto.
“Es un error el cierre de exportaciones de carne. Es una marcha atrás para el desarrollo y crecimiento de la ganadería”. Enseguida adelantó que “vamos camino a un cese de comercialización”.
En la misma línea se expresó Coninagro.
“Expresamos nuestro profundo desacuerdo ante la medida anunciada por el Gobierno que prevé el cierre de exportaciones de carne. La base de productores de la entidad sostiene su descontento y preocupación ante medidas aisladas e inconsultas”.
El senador de Juntos por el Cambio, Alfredo de Angeli, fue contundente:
“Es una locura cerrar las exportaciones. Van a volver a destruir lo que costó tantos años construir después del 2006 cuando perdimos el 20% del stock ganadero y no pudieron controlar la inflación”.
Por último, el consultor privado, Salvador Di Stefano apuntó:
“El gobierno se pega un tiro en el pie, perderá dólares de la exportación y no bajará el precio de la carne vacuna en el mercado interno, animales de 340 a 360 kilos. El Manual de Kicillof ilustrado se vuelve a equivocar”.
Terratenientes y empresarios del sector ahora planean un paro por 7 días como demostración de fuerza contra la medida que apunta a recuperar el consumo popular de alimentos.