Guillermo Moreno, exsecretario de Comercio de Cristina Kirchner y líder del partido Principios y Valores, encabezará este sábado 1 de febrero un acto político en Parque Lezama, en pleno conflicto de agenda con la Marcha Federal LGTB, Antifascista y Antirracista, convocada para el mismo día y hora en rechazo al discurso del presidente Javier Milei en Davos.
La presunta coincidencia desató sospechas de una maniobra para restar participación a la movilización social, aunque el morenismo insiste en que se trata de una convocatoria previa, que de todos modos no buscaron reprogramar.
El acto de Moreno: candidatos, horario y justificaciones
El evento de Moreno, programado para las 17:00 en Parque Lezama, busca presentar a su equipo de candidatos para las elecciones legislativas 2025 en la Ciudad de Buenos Aires. Entre las figuras confirmadas están el influencer porteño y abogado Alejandro Kim, la presidenta de Principios y Valores Nydia Lirola, y la ex candidata a diputada Pimpi Colombo1
Moreno defendió la fecha en una entrevista radial: “Hace un mes pedimos el permiso. Ya el palco lo contratamos. No es que el acto sale $100.000 como para que podamos postergarlo”. Además, intentó desvincular su agenda de la marcha:“No es la agenda para confrontar a Milei, es la económica”.
La Marcha Antifascista: un reclamo nacional contra Milei
La marcha antifascista, que partirá a las 16:00 desde el Congreso hacia Plaza de Mayo, surge como respuesta al discurso de Milei en Davos, donde vinculó la homosexualidad con la pedofilia y criticó las políticas de género, calificándolas como parte de un “virus mental”. La marcha, apoyada por la CGT, sindicatos y organizaciones como la Comunidad Homosexual Argentina (CHA), lleva el lema “La vida está en riesgo ¡Basta! Al clóset no volvemos nunca más”.
Parque Lezama, sede del acto morenista, tiene un simbolismo histórico para el colectivo LGTB+: en 1985 fue escenario de una de las primeras manifestaciones por los derechos homosexuales en Argentina. Esta coincidencia geográfica y temporal aumenta críticas hacia Moreno, acusado de fragmentar la participación ciudadana y recordado por su ambivalente postura respecto a la interrupción voluntaria del embarazo.
Aunque el exfuncionario aseguró apoyar la diversidad argumentando que “Los homosexuales recibieron el reconocimiento más importante: el Papa dijo que puede haber sacerdotes homosexuales”, sus declaraciones han sido cuestionadas por su tono estereotipado. Recordó un cartel de los “Putos Peronistas” en la bienvenida a Perón y afirmó: “Si sos gay, sos radical. Si sos puto, sos peronista”.
La superposición de eventos refleja tensiones dentro del espectro opositor. Mientras la marcha antifascista busca unificar a sectores progresistas contra Milei, el acto de Moreno prioriza la visibilidad electoral de su espacio, incluso en detrimento de una causa que teóricamente comparte, pese a que en los últimos días en las redes sociales le recuerdan su silencio ante -por ej- el tratamiento de la Ley Bases o el RIGI.
Organizadores de la marcha han insistido en que la convocatoria es “una respuesta colectiva al odio”, sin mencionar directamente a Moreno. No obstante, la sospecha de una estrategia para “adelgazar” la protesta persiste, especialmente considerando que el morenismo no se sumó formalmente a la movilización.