Los senadores del Frente de Todos cuestionaron los subsidios al trasporte que recibe la Ciudad de Buenos Aires, anunciaron que los revisarán cuando debatan el presupuesto de 2022 y acordaron crear una subcomisión para empezar a mirar los números en detalle.
La propuesta surgió espontáneamente en una reunión de la Comisión de Presupuesto convocada para tratar un proyecto que envió Diputados y tiene a la Ciudad como beneficiada, porque amplía a ese distrito el subsidio al transporte escolar que en la ley se reduce al “interior del país“.
Esa definición complicó la ayuda a los transportes del área metropolitana que atraviesan por los dos distritos, el fondo de 600 millones de pesos nunca fue ejecutado y lo será a partir de esta corrección, que estuvo a punto de caerse cuando los senadores de todos los bloques la acusaban de centralista.
“La autoridad de aplicación es el Ministerio de Transporte y no me pude comunicar. Entiendo que estos fondos no fueron liquidados por este problema“, se excusó el cordobés oficialista Carlos Caserio, presidente de la Comisión.
Fue necesario que algunos referentes de cada bloque bajaron el tono a las críticas para no frenar la ley, pero dejaron abierto otro capítulo de la disputa entre la Nación y la Ciudad por la distribución de los fondos, en este caso a través de subsidios. Aunque, sin mencionarlo, también quedó apuntado Axel Kicillof por los que recibe para el transporte del conurbano.
“Los subsidios al transporte llegaron a ser 90% para el área metropolitana y el 10% para la Ciudad. Y en el pacto fiscal de 2017 se había acordado con el ex presidente Mauricio Macri que se eliminarían. Lo hablé con (el gobernador de Córdoba Juan) Schiaretti”, recordó Caserio.
El primero en cuestionar a la Ciudad fue Oscar Parrilli:
“Distribuir igual entre desiguales no es justo, porque se comete una injusticia. Y el transporte escolar entre el interior del país y la Ciudad es desigual, porque hay subterráneos, colectivos, trenes y taxis. No es lo mismo que vaya a un colegio en Jujuy, Santa Cruz y Neuquén”.
Parrilli dijo que Larreta es el que más recibe de la Nación:
“(…) porque gasta el 70% de su presupuesto ahí. ¿Y que aporta? No aporta absolutamente nada, porque el transporte en el interior es más caro y seguimos con esta desigualdad. Tenemos que ir modificando estas cosas. Seguimos beneficiando a los que menos necesitan. Cuando venga el presupuesto, lo analicemos con más tiempo”.
El jefe del bloque oficialista José Mayans no quiso ser menos. “El subsidio de transporte en general es absolutamente injusto. No es equitativo el sistema de distribución y en el presupuesto que viene es un tema de discusión“.
La santafesina María de los Ángeles Sacnun, también del Frente de Todos, logró que la ley para aclarar los fondos de transporte escolar no se cayera, porque se trata de “sectores afectados por la pandemia“, pero anticipó una fuerte batalla por los subsidios cuando se debata el presupuesto.
“Pido, como moción concreta, trabajar respecto a los subsidios en transporte, porque la verdad estamos muy afectadas las provincias del interior por enormes distorsiones. Son casos Rosario y Santa Fe, que ni siquiera están gobernadas por nuestro color político. También el transporte interurbano de pasajeros, que en mi provincia debe ser eficiente”, reclamó y propuso un “subgrupo” que empiece a estudiar el tema.
No había representantes de la Ciudad presentes porque nunca se conectó el radical Martín Lousteau y sus correligionarios Víctor Zimmermann (Chaco), Julio Martínez (La Rioja) y Silvia Elías de Pérez, apoyaron un estudio preciso de los subsidios al transporte, aunque hablaron del área metropolitana que incluye provincia de Buenos Aires.
El presupuesto ingresa por Diputados el 15 de septiembre pero en estos días Martín Guzmán enviará un avance con las principales proyecciones. Los senadores le pedirán un anticipo de la política de subsidios al transporte, que el ministro bien podría reducir como parte de su plan fiscal para reducir el déficit. Lo debates comenzarán pronto.