A pesar de que el Gobierno argumenta que para salir de la crisis económica es necesario el fuerte ajuste al Estado incluido en el proyecto de Presupuesto 2019, algunos números de la iniciativa que hoy presento Nicolás Dujvone dicen lo contrario: contra 2018, Mauricio Macri busca casi duplicar los fondos para pinchar teléfonos.
Mientras que los números del Ejecutivo para el año próximo refieren a una inflación de 23%, el presupuesto previsto para escuchas se incrementa un 66,8%, ya que el organismo de la Corte Suprema encargado de las intervenciones telefónicas pasará de haber contado con $465.947.867 en 2018 a $777.116.861 en 2019.
La Dirección de Asistencia Judicial en Delitos Complejos y Crimen Organizado del Poder Judicial que depende de la Corte Suprema de Justicia había recibido, sólo hasta mitad de 2018, más de $10 millones del presupuesto que maneja el máximo tribunal, destinado a equipamiento para las oficinas de Avenida de los Incas, y material para su funcionamiento.
La cifra surge de las resoluciones firmadas por su presidente saliente, Ricardo Lorenzetti, para girar partidas que debieron ser aplicadas en el ejercicio del presente año, por fuera del resto de los gastos previstos en sueldos de personal, contratos y gastos corrientes para su operatividad.
Ahora, con Carlos Rosenkrantz al frente del máximo tribunal, el Gobierno busca que la exOjota y Dicom cuente nuevamente con generosos recursos para pinchar teléfonos, ya que pretende darle un 43,8% por encima de la inflación proyectada para el año próximo.
